One Shots (MIW)

Ricky| Chris| Ryan| Balz| Devin| Vinny|

uchiha666

Advertencia: Contenido +18 
Summary: Prácticamente todo el OS es smut con los chicos. 
Nota: Primer actualización del año. Por fin estoy en casa y puedo escribir. También tardé en hacer este OS porque necesitaba que tuviera sentido y como es un OS largo tiene mucha información que debía revisar pero por fin lo terminé. Espero que lo disfruten. 

Habías bromeado cada que Ricky mencionaba que quería compartirte con los chicos. Nunca pensaste que sus palabras tuvieran valor real pero las cosas habían cambiado y podías ver ahora que hablaba en serio.
No tenías ningún inconveniente. Te habías imaginado estar con ellos muchas veces, pero nunca pensaste que en realidad fuera a suceder.
Ahora estando frente a ellos tú respiración no solo era entrecortada sino también tu corazón palpitaba muy rápido y casi te sentiste apenada al darte cuenta de cómo tu ropa interior ya estaba empapada de la excitación.
Pero incluso aunque hubieras soñado con este momento tantas veces el nerviosismo ganaba tu entusiasmo. Necesitabas un respiro de lo que estaba sucediendo, pero no querías dejar la habitación.
Ricky te sonreía y parecía estar atento a tus reacciones y movimientos. Era tranquilizador saber que él estaba ahí.
-¿Estás bien?-preguntó Chris rompiendo el silencio. Todos dentro de la habitación parecieron relajarse un poco gracias a él.
-Si, solo un poco nerviosa- Era notorio que estabas muy nerviosa. - no significa que no quiera estar con ustedes es solo que...-intentaste explicarte, pero te fue difícil sacar las palabras de tu garganta. Querías decirles que los deseabas a todos en ese mismo momento pero que necesitabas un guía, no sabías como comenzar y no imaginabas a nadie que supiera como.
-Primero queremos que sepas que ninguno de nosotros desea hacerte daño, Ricky dejó muy en claro que no permitiría que ninguno sobrepasara tus limites, pero no solo Ricky... Cuando lo digas nos detendremos e iremos si así lo deseas.
Asentiste y casi sueltas un suspiro intentando liberar presión. Aunque ya lo supieras las palabras de Chris te habían aliviado los nervios un poco.
-Dinos qué esto es lo que quieres y podremos comenzar-dijo Chris mientras sonreía.
Asentiste y Devin habló con rapidez.
-Con palabras.
-SI, quiero esto. -dijiste con notoria emoción.

Chris iba primero, preferiste tomar tu tiempo con cada uno sabiendo que lo disfrutarías más y ellos no tuvieron ninguna objeción.
Aun presentes en la habitación los demás tuvieron que esperar su turno mientras venían como Chris te tomaba.
Sus besos eran lentos y dudosos al principio, pero mientras tu cuerpo se relajaba sentías que tomaba más decisión en lo que hacía sin dejar de ser cuidadoso. Sus manos acariciaban tus piernas por debajo de tu vestido y tuviste la necesidad abrirlas dejándolo entrar a donde él quisiera llegar. Jadeaste con el primer toque, desde que Ricky te había propuesto dejar que tus fantasías con sus amigos se cumplieran estabas deseando que alguno te tocara y ahora casi te sentías llegar al clímax mientras sucedía.
-Voy a quitar tu vestido-te avisó, pero sonó más como si estuviera pidiendo permiso. Solo asentiste mientras te alejabas un poco de él.
Te guío hasta la cama y subió sobre ti mientras volvía a unir sus labios con los tuyos.
Sus movimientos eran cuidadosos incluso cuando retiraba su ropa. Podías ver que prefería tomarse su tiempo.
-Chris-susurraste. Querías decir tantas cosas, pero fue lo primero que se te vino a la mente-
Rio por lo bajo mientras se acomodaba entre tus piernas. Sentiste el latex del condón rozando tu pierna e intentaste alinearte con él esperando recibirlo por completo.
-Dame un segundo.-te dio una sonrisa, sabías que le divertía verte de esa forma.
Sus labios conectaron con tu cuello y tu cuerpo por inercia se acercó a él intentando encontrar algo de fricción entre los dos. Su pierna estaba tan cerca de tu sexo que no pudiste contener un 'oh dios' sobre su oreja haciendo que te tomara con sorpresiva fuerza de la cintura. Pareció que eso le dio la iniciativa necesaria para entrar en ti o tal vez se dio cuenta de que no tenían tanto tiempo como quisieran.
Masajeaba tu sexo mientras daba embestidas lentas y profundas. Tus gemidos eran lo único que se escuchaba en la habitación. Tomaste con fuerza la espada de Chris intentado acercarte más al él.
-Si, si.. Si-susurraste mientras arqueabas tu espalda en un inútil intento de mantenerte en tu lugar.
Los dos gimieron con fuerza mientras sentían llegar el orgasmo.
-Chris-dijiste por lo alto mientras intentabas recuperarte.
-Tomaste tu tiempo-dijo Devin mientras Chris recogía su ropa. Él solo se limitó a vestirse de nuevo.
Pusiste tus manos sobre tu rostro mientras intentabas regular tu respiración. Juntaste tus piernas por instinto al sentir repentinamente de nuevo como alguien masajeaba tu sexo. Devin parecía ya haberse retirado la ropa y por la forma en la que te tocaba parecía haber estado esperando su turno con ansias.
Intentaste levantarte, pero te lo impidió poniendo su cuerpo sobre el tuyo. Seguidamente atacó tu cuello haciéndote suspirar. Sus manos ahora estaban sobre tus pechos y comenzó a darles atención al mismo tiempo que sus besos bajaban y se concentraban en la misma zona en la que trabajaban sus manos.
Intentaste tomar su pelo o cuello, pero te lo impidió de nuevo. Parecía querer tener el control sobre ti en todo momento.
Volviste a tener la sensación de necesitar más, necesitabas sentir a Devin totalmente.
-Devin, necesito...-suspiraste intentando encontrar las palabras- te necesito.
-Lo sé-dijo mientras volvía a subir sus labios a tu cuello- pero tendrás que esperar un poco más.
Después de haber dicho eso acercó su pelvis a la tuya haciéndote soltar un fuerte gemido.
Se golpeaba con lentitud contra ti haciéndote desesperar más. Tomaste con fuerza las sabanas intentando encontrar estabilidad, pero lo único que provocaste fue que Devin se burlara aun más de ti.
Estabas a punto de protestar cuando golpeó con fuerza dentro de ti.
Las embestidas de Devin eran descuidadas y rápidas. Intentabas moverte junto a él intentando encontrar algún ritmo, pero te fue imposible. Devin tomaba tus caderas con tanta fuerza que sabías que iba a dejar marca, pero no sentías molestias por ello. 
-¡Ohhhh! ¡Devin!-gritaste esta vez sintiendo como estabas a punto de liberarte por segunda vez. Intestaste aferrarte a algo para contener tu cuerpo, pero no podías concéntrate en algo más que en cómo te sentías en ese momento.
Devin se retiró de ti dejándote descansar unos minutos. Ricky te miraba desde un extremo de la habitación mientras sonreía. Parecía estarse divirtiendo.  
-¿Estas bien?
Asentiste con lentitud mientras se te salía una sonrisa.
-Es mi turno-dijo Balz mientras se acercaba a ti. Se recostó de lado junto a ti mientras observa como respirabas con dificultad.
Te miró mientras sonreía y tomó un mechón de tu cabello que estaba sobre tu rostro.
-¿Quieres un respiro?-dijo mientras acomodaba tu cabello. Sus dedos acariciaron tu rostro delicadamente.
Negaste al mismo tiempo que se te escapaba una pequeña risa. Él te imitó mientras sentías como sus dedos bajaban por tu cuello hasta tu pecho. Su toque era delicado, parecía no tener prisa lo cual era relajante para ti.
-Dime que es lo que quieres-dijo mirándote a los ojos. Te sonrojaste de solo pensar en que tendrías que decirle donde lo necesitabas y de qué forma. Te avergonzaba pensar que durante todo este tiempo todos los que estaban en la habitación estuvieron observándote de esa manera y ahora tener que decirles como querías a Balz te hacía sentir apenada.
-Quiero que me toques-dijiste por lo bajo. Él no dudo en mover sus manos por tu cuerpo dudoso.
-¿Dónde?
Suspiraste de frustración sabiendo que así sería con Balz durante su tiempo. Te sentías impaciente, pero al mismo tiempo te emocionaba tener que dirigirlo de la forma en la que querías exactamente.
-¿Aquí?-preguntó mientras sus dedos tocaban tus pechos. Negaste mientras fruncías los labios.- ¿Y aquí?-susurró al mismo tiempo que sus dedos tocaban tu vientre.
-No-le susurraste mirando sus movimientos.
-¿Aquí?-suspiraste cuando por fin sus dedos encontraron el lugar donde deseabas que estuvieran.- ¿Lento...-cada movimiento que hacía te hacía desesperar. Él estaba jugando contigo y aunque sentías que no pudieras hacer nada al respecto, deseabas que su juego continuara.-O rápido?
Gemiste sobre tu mano, no te habías dado cuenta que hasta ese momento intentabas silenciar tus gemidos con tus manos.
Volviste a gemir reconociendo la sensación que ahora se acumulaba en tu pelvis, pero repentinamente paró.
-Necesito que me digas que es lo que quieres, tn.
Intentaste reprimir los gestos de frustración en tu rostro con tu antebrazo. 
-Rápido-susurraste buscando de nuevo sus dedos.
Al instante Balz volvió a darte la atención que necesitabas y de nuevo apareció la sensación se acumulaba dentro de ti.
-Ohhh, balz... No pares-dijiste mientras cerrabas los ojos con fuerza.
Sus dedos iban más rápido y a los segundos te liberaste completamente con la llegada de tu tercer orgasmo. Tus piernas se doblaron en el aire levemente mientras gemías sin importante que tan fuerte sonaras.

Ya habías vuelto a recuperar tu respiración. No sabías que iba a suceder, pero Ryan parecía interesado en ser el siguiente.
Se sentó sobre la cama mientras esperaba a tener algún indicio de que podía acercarse a ti. Lo besaste con fuerza haciéndolo sentir seguro y en seguida te tomó en brazos y te posicionó sobre él. Tus manos pasaron sobre su torso y Ryan comenzó a deshacerse de su ropa. Era la primera vez en la que sentías tener el control sobre los chicos. Ryan parecía animarte a que continuaras explorando su cuerpo y con su ayuda encontrabas las zonas en donde él parecía disfrutar más de tu toque.
Comenzaste a hacer movimientos sobre su pelvis buscando satisfacer tus necesidades.
Sus manos estaban sobre todo tu cuerpo. Tocaba con fuerza y decisión las partes de tu cuerpo que quería reclamar mientras te besaba con rudeza.
El cinturón de Ryan comenzó a hacer ruido provocándote un leve cosquilleó.
-Date la vuelta-te susurró sobre los labios mientras aun acariciaba tus piernas. No dudaste en hacer lo que te decía y él pareció satisfecho con ello.
Sus manos bajaron desde tu nuca hasta la parte trasera de tus piernas. Disfrutabas demasiado su toque. Cada vez que masajeaba alguna de tus zonas soltabas suspiros y gemidos que casi eran inaudibles.
Levantaste levemente tu trasero llamando su atención.
-¿impaciente?-te preguntó de forma burlesca.
-Mucho-Intentaste acercarte lo máximo que pudieras a él, pero terminó por cargar su cuerpo sobre el tuyo acabando con cualquier espacio que pudiera haber entre ustedes.
Segundos después te encontrabas gimiendo contra las sabanas mientras Ryan se movía contra tu cuerpo. Pasó una de sus manos sobre tu nuca y después la bajó por toda tu espalda. Mientras más se sentía llegar a su orgasmo cargaba más su cuerpo contra el tuyo, pero no te era molestia.
Gemiste y tomaste la sabana con fuerza cuando volviste a llegar al climax por cuarta vez. Caíste sobre la cama sintiéndote más cansada de lo que esperabas.
Vinny tomó tus caderas sin previo aviso y te acercó al borde de la cama. Casi sueltas un grito de la sorpresa. Ibas a sentarte, pero te fue imposible. El rostro de Vinny estaba entre tus piernas y lo único que podías hacer era intentar aferrarte a tu lugar. Tomaste su cabello con bastante facilidad por lo largo que estaba ahora y le diste algunos tirones descuidados. Su boca fue remplazada por sus dedos mientras Vinny subía por tu cuerpo hasta tus pechos. Te sorprendiste lo bueno que era en lo que hacía y a los minutos estabas implorando por liberarte de nuevo.
Tus gemidos fueron callados por sus besos y te relajaste al instante en que se retiró de encima  tuyo.

Observaste como Ricky se acercaba a ti. No podías leer su mirada, pero estabas expectante a cualquier movimiento que fuera a realizar. 
Te beso con fuerza cuando finalmente estuvo cerca de ti. Sus manos se clavaron en tu cintura, era tan conocida esa sensación para ti que casi te hizo sonreír.
-¿Me extrañaste?-sonrió mientras correspondías cada una de sus caricias.
-Si-sonreíste reconociendo a tu juguetón novio.
-¿Quieres que les muestre como es que deben complacerte verdaderamente?-te pregunto antes de volverte a besar.
No imaginabas que esa oración te emocionara tanto. Asentiste antes de atraerlo hacia ti.
Se retiró su ropa intentando romper su beso lo mínimo posible. Te sentó sobre sus piernas y casi instintivamente te acomodaste sin dejar de besarlo.
Te sentías con la libertad de pedirle lo que desearas, era normal y sin duda lo estabas disfrutando más.
Tus gemidos eran fuertes y sin cuidado. No habías olvidado que aun habían personas en la habitación y te movías sobre tu novio como si quisieras enviarles un mensaje.
Ricky sabía exactamente que hacer contigo y lo demostraba cada vez que estaban juntos. Desde el primer momento en que sus manos tocaron tu cuerpo supiste que no había otra persona que te conociera tanto como él. No había nadie que te hiciera sentir como él lo hacía, pero los chicos podían intentarlo cualquier otro día que quisieras.