One Shots (MIW)

Vinny Mauro

AranzaEscamilla

Advertencia: No
Nota: Lo siento, tal vez no sea muy bueno pero tuve muchos problemas escribiendolo. Espero que aun así lo disfrutes. 

Te despertaste con el ruido del despertador como acostumbrabas a hacerlo. Te preparaste para iniciar con tu rutina de la mañana cuando escuchaste a Vinny quejarse por el sonido.
-t/n, por favor-susurro aun con los ojos cerrados. No querías despertarlo del todo pues tenías entendido que era su última semana libre antes de iniciar con los ensayos de la banda. Quitaste algo del cabello que le caía por el rostro dispuesta a dejarlo descansar un rato más.
Terminaste de ducharte y cambiarte, aun era muy temprano en la mañana pero debías despertar a Caleb, tu hijo para ir a la escuela.
-Cariño-le llamaste antes de menear un poco su hombro- es hora de levantarse.
Él pequeño emitió un quejido pero aun así se levantó. Su cabello estaba desordenado y le cubría gran parte de los ojos lo cual te hizo reír. Con un bostezo se paró frente a ti esperando que le dieras la ropa que debía usar.
-Debo preparar el desayuno, ¿Puedes manejarlo solo?-dijiste refiriéndose a vestirse por sí mismo. Él asintió y antes de bajar a la cocina quitaste su cabello del rostro como hiciste con Vinny.

Mientras Caleb desayunaba acomodabas algunos papeles y portafolios que necesitabas en tu trabajo. Tu rutina iba como siempre hasta que escuchaste gran revuelto en tu habitación.
Miraste a Caleb como si buscaras la respuesta en él pero te diste cuenta de lo que sucedía cuando Vinny bajó hecho un desastre.
-Olvide que debo presentarme para los ensayos-te dijo al ver tu rostro de confusión.
-Pensé que iniciaban la siguiente semana.
Vinny asintió mientras terminaba de ponerse los zapatos y antes de que comenzaras a quejarte al respecto Caleb te interrumpió.
-Vendrás a mi partido de futbol ¿verdad?
Estabas segura de haberle dicho a Vinny sobre el partido de futbol de Caleb, para él es muy importante que su padre estuviera ahí no solo porque quería su apoyo sino que sabías que quería demostrar sus habilidades haciendo sentir orgulloso a su papá.
Vinny pareció sorprendido por solo unos segundos pero se arregló por completo antes de contestar.
-Claro que si-le dio una sonrisa-tengo que irme ya-caminó hasta ti y te beso cortamente y antes de dirigirse a la puerta se despidió de Caleb.
-Vinny, espera-caminaste hasta él y no hablaste hasta estar segura de que tu hijo no fuera a escuchar. – Vinny-volviste a repetir mientras te acercabas a él lo suficiente como para hacerlo sentir amenazado- dime que irás al partido de Caleb.
Él hizo una mueca.
-Lo olvide, lo siento pero prometo llegar. En serio haré lo posible por llegar.
-Vinny, es muy importante que vayas. Ya te has perdido la mayoría de sus partidos y él en serio quiere verte ahí.
-Prometo llegar, ¿si?-asentiste haciendo una mueca. Vinny volvió a besarte y salió de la casa con prisa.

-Tengo que irme-le dijiste a tu secretaria mientras revisabas tu bolso.
-De acuerdo, le diré al director que usted está ausente y que podrán ver lo de la presentación del nuevo proyecto en la siguiente junta-ella levantó el teléfono y tú le agradeciste para así poder marcharte.
Cuando llegaste a la escuela de Caleb el ya estaba esperando con su uniforme de juego.
-Parece que este emocionado- ya con su maleta en el hombro subió al auto.
-Si, espero que papá ya este en el campo-habías estado evitando pensar en eso, tu último mensaje a Vinny fue en la mañana cuando tomaste un descanso para el almuerzo pero él no había contestado. Entendías que tal vez estaba muy ocupado ya que los primeros días de ensayo eran algo difíciles para todos pero esperabas que Vinny recordara que tenía un compromiso.

Las madres y padres gritaban durante todo el partido, parecían pasarlo bien mientras los niños jugaban como solían hacerlo. Vinny aun no había aparecido y eras la única que estaba sentada en las gradas luciendo nerviosa.
-No te preocupes-dijo una de las madres mientras se acercaba a ti- estoy segura de que ganaran el partido-ella te sonrió y continuó viendo el juego. Al medio tiempo te habías dado por vencida y fue tu momento de levantarte y comenzar a animar a tu hijo quien parecía triste.
-¡Vamos, Caleb! ¡Tú puedes hacerlo!-Él te volteó a ver y te saludo con la mano pero de nuevo volvió a poner su mirada en el suelo.

La noche había caído, el equipo de Caleb había ganado pero no pudo jugar el resto del partido. Parecía triste y no había hablado contigo desde que llegaron a casa.
-Cariño, ¿quieres cenar algo?-él negó y dejó caer su maleta.-puedo prepararte cualquier cosa-dijiste tratando de animarlo pero el volvió a negar, está vez se quitó la camisa de su uniforme y la dejó caer sobre su maleta antes de comenzar a subir las escaleras.
Habías intentado de todo desde que terminó el partido, le habías intentado convencer de que seguro Vinny tuvo una emergencia o se le hizo imposible ir pero nada de ello arreglaba el único problema en el que Caleb se centraba. Su papá no había asistido a su partido.
Tecleabas con rapidez sobre tu computadora hasta que escuchaste que Vinny entraba en la casa.
-¿t/n? ¿Caleb?-los llamó mientras entraba. Te vio y sonrió pero inmediatamente borró su sonrisa al ver tu rostro.
En ese momento entendiste que sabía lo que había hecho e intentaste ignorarlo pero tu enojo te supero.
-Pensé que había hecho lo suficiente para hacerte recordarlo.
Él se paró junto a ti sin decir nada.
-Te lo dije tantas veces pero para ti te fue imporsible, Vinny. Entiendo que tienes que trabajar, es importante pero por esa razón Caleb te pidió ese tiempo para él. Te necesitaba ahí.
-Lo sé, lo siento tanto.
Antes de que le respondieras con enojó el continuó.
-Iré a hablar con él.
-No, está dormido. Mañana podrás hablar con él.
Vinny asintió y subió las escaleras dando suspiros y hablando entre dientes.

Era día en el que Vinny tenía que recoger a Caleb de la escuela. Esperabas que en el transcurso Vinny hablara con tu hijo pero al verlos llegar de la misma forma que el día anterior entendiste que Vinny no había intentado arreglar las cosas.
-Vinny-le susurraste mientras veías como Caleb iba al jardín.
-Ya lo sé. Es solo que no sé cómo hacerlo. Quiero hablar con él pero no sé qué decir.
Pusiste tus manos sobre tu cintura y rodaste los ojos.
-Ok, solo terminaré con esto. No quiero que siga enojado conmigo o peor...-miró hacía donde estaba Caleb- que crea que no me intereso en lo que hace.
Vinny se dirigió hasta tu hijo, él pequeño estaba sentado sobre su balón de futbol viendo al césped. Vinny comenzó a hablar y con el tiempo Caleb se intereso con lo que decía. Al poco tiempo los dos estaban jugando juntos con el balón lo cual te hizo sentir relajada.
-¿Qué le dijiste?-preguntaste cuando Vinny entró a la casa.
-Le dije que sentía haberme perdido su partido de futbol, le dije que él es importante en mi vida como lo eres tú y que no hacía falta verlo jugar para saber que es maravilloso jugando pero que aun así asistiría a todos los juegos que pudiera.
-Lo manejaste bien. Espero que cumplas lo que dices.
Él asintió y te beso. Ibas a continuar con lo que hacías pero Vinny tomó tus caderas haciéndote quedarte frente a él.
-Te debo una disculpa a ti también. Haces todo lo posible para evitar que cometa errores y cuando aun así lo hago intentas arreglarlos. Te amo y quiero que lo recuerdes todos los días.
-Lo sé, Vinny. También te amo-le dijiste antes de volver a juntar sus labios.