One Shots (MIW)

Vinny Mauro

Pedido y dedicado:AranzaEscamilla
Título: Sachetti
Advertencia: si/contenido explícito
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Listo, mi trabajo estaba terminado. Guarde toda la información en mi computadora y después lo guardé en mi correo. Podía escuchar a Vinny hablar con un par de amigos mientras jugaban. No era para nada fan de su juego y me estresaba que pasará tanto tiempo en él.
-Vinny-le llamé pero estaba claro que no iba a atender hasta que dijera su nombre cuatro o cinco veces y cada vez más alto.
Me miró esperando a que le dijera que quería.
-Vinny, has jugado todo el día. Comienzo a tener hambre ¿Saldremos o preparo algo?-dije pensando en que él no iba a preparar nada.
-¿Quieres que pueda algo?-asentí dandome cuenta de que era una mejor idea y camine a la habitación donde lavaba ropa. Comencé a echar un par de ropa a la lavadora mientras rodeaba los ojos al oír como Vinny levantaba la voz mientras jugaba.
-La comida está aquí- me dijo por lo alto haciendome  salir para notar  que seguía en el mismo lugar. Algo frustrada por como no dejaba de jugar ni siquiera para comer caminé hacia él.
-Vinny, cariño-dije haciendo voz más dulce de lo normal llamando su atención. Volvió su mirada expectante a mi.-Vamos a comer, termina ese juego.
-No puedo, tú sabes... Estoy en línea con algunos amigos. De hecho pueden escucharte-dijo mientras sostenía un audífono fuera de su oreja.
Él rió seguro por algo que habían dicho sus amigos lo cual me hizo enfurecer.
-Ya-dije intentando sonar dura pero era imposible pues aunque Vinny me dijera que hará lo que le digo no lo hace. Siempre era mejor así aunque me hacia enfurecer. Asintió como siempre y volvió a mirar al monitos. Intenté confiar en que lo que decía era cierto aún sabiendo como iba a acabar todo. Él sentado en esa silla hasta que es demasiado noche que el sueño lo vence.
Comencé a comer mientras revisaba algunas notificaciones que tenía en mi celular pero cuando terminé mi comida y ví a Vinny en el mismo sitio algo molesta decidí dejar de intentarlo.
Ya con mis dientes limpios y mi computadora otra vez abierta se me ocurrió una idea, un último intento en donde Vinny iba a perder esta vez. Siempre lo hacia.
Bajé despacio por las escaleras y ví a Vinny hablando con sus amigos. Tomé todo el valor que pude esperando que esto diera el mejor resultado y caminé hacia el. De un movimiento le quité los audífonos e hice que volteara a verme. Tomé su cara con mis manos y lo acerqué para besarlo. Estaba claro que su primera reacción iba a ser de sorpresa pero a los segundos siguió con el beso.
Quedé a horcajadas sobre sus piernas y el cuido de que no fuera a caer.
-Espera-dijo haciéndome poner los ojos en blanco y a punto de irme y tomar la decisión de no dirigirle la palabra a Vinny tomó el mouse y quito el juego al igual que se aseguraba de que sus amigos no estuvieran escuchando.-Lo siento, no me agradaría que te escucharán gemir-le sonreí y volví a besarlo.
Sus manos retiraron mi camisa y después se adentraron en los extremos de mis pantalones y yo deposite mis brazos al rededor de su cuello.
Solté un pequeño grito sorprendiendome de que me haya levantado de un de repente.
Me depositó sobre la cama y mientras estaba sobre mi se quitó la camisa. Puso su atención sobre mi cuello haciéndome suspirar varias veces. Deseaba desde hace unas horas que pudiera su atención en mi.
Tomó mis caderas para después comenzar a desabotonar mis pantalones. Cuando estoy estuvieron en el suelo subió sus manos hasta mi sostén y lo desabrochó para jugar con mis pechos. Bajé mis manos para desabotonar sus pantalones y bajarlos. Pasé una de mis manos sobre su miembro provocando un gemido de su parte. Vinny tomó mis bragas de los extremos y las arrojó por la habitacion siendo igual de desesperado que siempre. Lo mismo hizo con sus boxer.
Pude escuchar sus gemidos inquietos y desesperados que a veces hacías los cuales ya identificaba a la perfección. Beso mi mejilla para bajar a mi cuello antes de entrar en mi haciéndome soltar un par de gemidos al igual que él. Vinny siempre fue inconstante y un desastre en el sexo pero había aprendido a amar cada cosa que hacía. Tomé su rostro y lo besé al mismo tiempo que novia mis caderas ayudándolo a encontrar un ritmo continuo pero fue imposible.
Sostuve su cabello entre mis dedos haciendo que se acercará más a mi. Cada movimiento que hacia me indicaba que tan cerca estaba su orgasmo o cada gemido que soltaba así que sabiendo que se aproximaba comencé a cambiar de ritmo al igual que él.
Hizo un gemido ruidoso cuando por fin llegó al igual que yo. Me tomó en sus brazos acercándome a él para después darme una de sus si esas juguetonas.
-perdón, se que mis juegos se llevan la mayoría de mi tiempo pero prometo que ya no jugaré tanto-dijo acariciando con sus dedos mis caderas. Asentí sabiendo que de igual forma seguiría jugando de la misma manera.