Monumento a tu Amor

XXIV.

Aviso parroquial.
Mil gracias por leer.
FELIZ NAVIDAD 😄🎄🎁❄🎅
Atte.
Estefaniaec.

                           ***
- Hola mamá, tengo que contarte que hice, algo muy malo, o quizá ya lo sepas, mamá, no sé qué hacer, me siento tan mal que he empezado a odiarme por sentirme culpable. Tu mejor que nadie lo sabe mamá, él se lo merecía y mi cabeza me dice que lo volvería a hacer si lo veo, pero mis instintos gritan y mi corazón sangra de tan solo pensar en si quiera dañarlo, no quiero traicionarte mami y a papá tampoco, todo esto es muy confuso, no sé qué hacer.
Peter se encontraba compungido, sentado frente a la tumba de su madre intentando encontrar la iluminación. No había ido a la base desde lo que pasó con Steve, sus amigos lo llamaban insistentemente para que le contaran lo que pasó, pero él simplemente los ignoraba, incluso había dejado de hablar con Wade.
Y eso lo desesperada más.
- Fácil, habla con él y asunto arreglado.
Peter gritó, había estado tan preocupado que no se percató de la presencia de una ancianita sentada en la tumba contigua. La anciana rió con ganas. 
- Lo sé, siempre causo ese impacto en la gente.
- Discúlpeme, estaba distraído.
- No te preocupes muchacho, cuando la gente se sumerge en sus miserias por lo general solo piensan en sus desgracias y nada más, estancándose una y otra vez en lo mismo y nunca encuentran una salida.
- Ni que lo diga.
- ¿Pero sabes?  A veces es bueno hablar con terceras personas que son ajenas a tus problemas, muchas veces eso ayuda a esclarecer la mente. 
Peter la miro por un instante, su instinto arácnido estaba tranquilo, la señora le transmitía un aura de calma que hasta podría dejarlo atontado y quizá tuviera razón, su madre solía pensar también así.
- De acuerdo, hace unos días me enteré que tengo un padre alfa y que éste atacó a mi papá cuando estaba embarazado de mí, cuando supe que había sido él me descontrole y lo ataque mandándolo al hospital. Yo realmente me siento fatal porque conviví con él y desde que lo conocí sentí la conexión de padre e hijo sin saberlo, sentí en lo más hondo de mi ser que él era buena persona, pero ahora...
Peter agachó la cabeza, se sintió peor al escuchar lo que pasó en voz alta.
- ¿Tu papi te habló mal de tu padre? —preguntó dulcemente la anciana.
- No, él estaba buscando la forma de disfrazar las cosas para decirme la verdad, pero eso no se puede disfrazar con nada, señora.
- Tienes razón, ¿pero sabes?  Muchas veces los adultos cometemos errores y en especial los padres, tú no sabes lo que en ese momento pasaba por la cabeza de tu padre para cometer tal acto, ¿él sabía que tu papi estaba en cinta?
- No y según entendí fue él quien convenció a mi papá para tenerme.
- ¿Lo ves?  si tú papi te transmitió ese sentimiento entonces no debe ser tan mala persona, te sugiero que hables con tu padre alfa, es la única manera en que puedas calmar tu corazón.
Peter suspiró y miro la tumba de su mamá, tenía el presentimiento de que su mamá hubiera dicho lo mismo.
- Gracias señora, disculpe, ¿cuál es su nombre...
Peter giró para verla, pero no la encontró, en su lugar una sensación de calor inundó su pecho.
- Gracias, mamá

[…]

Después de tres días, Steve Rogers salió del hospital directo a su casa, Richard no regresó a verlo ni una sola vez y su hijo, no sabía ni cómo hacer para acercarse a su cachorro. Y pensar que desde que lo conoció lo sintió en el fondo de su alma, su alfa gimoteaba cada vez que lo veía marchar y cuando éste le sonreía movía la cola de felicidad como si fuera un labrador a pesar de ser un león.
Lo echaba de menos, echaba de menos sus conversaciones y sus risas, por eso se había escapado de casa y había acabado en la sala Ironman, donde lo conoció. Su muchacho es un genio igual a su papi, tiene su apariencia y su hermosa sonrisa, pero ahora que sabía la verdad, se dio cuenta que tenía el mismo color de sus ojos y muchas manías y gestos propios de él.
Que estúpido había sido.
- Sabía que te encontraría aquí.
Steve se tensó, sus ojos se encontraron con otros idénticos a los suyos, su corazón lloró.
- Peter...
- Antes que nada, siento mucho lo que hice, no debí reaccionar de esa manera, ¿puedo sentarme?
Steve asintió, no podía hablar, el nudo en su garganta no lo dejaba, su pequeño cachorro había sacado también esa parte impulsiva de su carácter que nadie conocía, salvo Tony.
- Por favor—tragó el nudo con dificultad — el que debe pedirte perdón soy yo, me siento tan mal.
- Tu, ¿amabas a papá?
- Dios, claro que sí, lo hacía en ese entonces y lo sigo amando cada día más, tu papá es y será el amor de mi vida, por eso me duele tanto lo que le hice.
- Si es así, ¿por qué lo atacaste? ¿Por qué no intentaste detenerlo de otra manera?
- Yo...no lo tenía previsto, no va a sonar bien, pero, se me pasó la mano, cuando tu padre se enteró de que le había ocultado información, vi en sus ojos lo traicionado que se sentía, cuando me apartó de un manotazo lejos de su camino para atacar a Bucky, pesó más mis años de amistad con él que los años que tu papi y yo llevábamos como pareja. Con cada golpe me sentía morir, lo único que quería era detenerlo y sabía que a las buenas no iba a poder, Tony nunca le quitó la vida a nadie y una vez que cruzas esa línea no hay vuelta atrás, yo no quería eso para él.  Pero la frustración y la rabia de verme eligiendo entre ellos dos me superó. Al final, la persona que más amo en este mundo terminó pagando por mis malas desiciones .
Peter lo miró por un momento, se notaba que estaba sufriendo a horrores, tenía una expresión más torturada que Wade y si Steve sentía una cuarta parte de lo que él sentía gracias a la conexión con su alfa, entonces era grave.
- Si hubieras sabido que papá estaba esperándome, ¿qué crees que hubieras hecho?
- Me gustaría decirte que hubiera tomado a tu padre y mandado todo al averno llevándomelo lejos, pero, creo que me hubiera alejado de él, hubiera encontrado la forma de decirle la verdad y de ayudar a Bucky, una vez que él estuviera seguro habría regresado a tu papá arrastrándome por su perdón, para rogar que me permitiera formar parte de su vida, de tu vida.
En lo más hondo de su corazón, él sabía que Steve estaba siendo lo más sincero posible y lo agradecía.
- ¿Aun amas a papá?
- Con toda mi alma, muero cada día que estoy lejos de él.
- Y, ¿a mí?
- Te amé desde el primer día que te vi sin imaginar que eras mi hijo, te habría amado igual si no lo fueras. Solo quisiera que me dieras la oportunidad de demostrártelo, que me permitieras formar parte de...
Steve fue interrumpido por unos brazos que rodeaban su cuello.
- Por supuesto que sí, y yo también te quise desde que te vi, padre.
Steve simplemente apoyó su cabeza contra el hombro de su hijo y comenzó a llorar en silencio, agradeciendo a Dios por su hermoso cachorro.