La ceremonia había sido todo lo que podían esperar, hasta podrían decir que había sido más emotiva que la primera. Eran la una de la mañana y la fiesta estaba en todo su apogeo, los niños ya se habían ido a dormir mientras los adultos y jóvenes festejaban que la pareja dominante de los vengadores estaban juntos nuevamente.
Mientras los invitados festejaban, Tony se había llevado a Steve a su despacho de su casa en Hawai, en donde habían decidido festejar su boda. El nuevo castaño estaba sentado en su escritorio solo con la camisa puesta que tenía semi abierta y de piernas bien abiertas siendo embestido salvajemente por su flamante esposo quien estaba completamente vestido con su traje de matrimonio.
Tony gemía como poseso mientras Steve daba estocadas certeras en aquella zona que lo hacía delirar, el castaño se aferraba a la espalda de su esposo arrugando la tela de su chaqueta, estrujadondola entre sus manos. El rubio cogió sus muslos y los puso en sus hombros, haciendo que el castaño terminara totalmente acostado en su escritorio.
El genio tubo que agarrarse al borde del mismo, ya que Steve prácticamente se había subido encima de él para molerle las caderas con más fuerza. Su escritorio era fuerte, pero empezaba a temer por su integridad cuando la madera empezó a crujir bajo el peso de ambos.
- S-steve... El... El escritorio...¡Ah!
Su esencia salió disparada entre sus cuerpos en el momento exacto en el que Steve mordió su cuello. No sabía si era por las hormonas del embarazo o porque al fin estaba junto a su alma gemela, pero podía jurar que tocaba las estrellas cada vez que el rubio lo hacía llegar al orgasmo de manera brutal. Quedándose ciego y hasta sordo.
Cuando regreso a la tierra se percató de dos cosas, la primera, que Steve lo había llenado de tal manera, que sentía su semilla escurrirse fuera de él a pesar del nudo, y la segunda, que su escritorio no había sobrevivido.
Tony miró a su marido por unos momentos, para luego ambos soltar una carcajada más que liberadora.
- Eres un salvaje, mi amor— ronroneo el castaño.
- Es tu culpa, estás demasiado sexy vestido de novio, te extrañe tanto, bonito.
Steve comenzó a repartir besos en todo su rostro haciéndolo reír, ambos se habían extrañado tanto.
- Que está... ¡PAPÁ!
Tan sumidos estaban en su burbuja que no se percataron de que alguien había abierto la puerta y encendido las luces, alertado por el fuerte estrépito que se había escuchado hace unos momentos en aquella habitación, producto de la ruptura del macizo escritorio.
- No es nada cariño, estamos bien— comenzó a reír Tony, mientras Steve había escondido su rostro colorado en su cuello luego de bajar las piernas de Tony de sus hombros— tu padre a veces se pone salvaje y le gusta...
- ¡YA! esa es demasiada información considerando lo que acabo de ver— Peter se había cubierto los ojos— dios, podían haber ido a su habitación.
Tony comenzó a carcajearse mientras su Steve murmuraba contra su cuello una disculpa.
- Ya, ya, no seas melodramático y asegúrate de hecharle seguro a la puerta que tu padre y yo nos pondremos al día.
- ¡PAPÁ! —se quejó Peter mientras escuchaba la risa de su papá— la cuenta del terapeuta te saldrá cara.
Peter salió casi corriendo y se aseguró de cerrar la puerta.
- Tu hijo salió bastante melodramático.
- ¿A quien habrá salido?
Tony rodó los ojos.
- A ti, por supuesto, espero que éste salga más a mi.
- Estos—Tony lo miro interrogativo—son dos, bonito, ya puedo sentirlos.
Steve restregó su rostro contra su pecho, mientras con una mano acariciaba su ahora ligeramente abultado abdomen. Tony se quedó mirando a la nada por unos momentos mientras procesaba aquella información.
Ahora entendía porque sentía una presencia extra dentro suyo, era nada más y nada menos que su tercer bebé, el castaño cerró los ojos y abrazo a Steve, quien más que emocionado estaba bañando su pecho con sus lágrimas.
- Tony, mi Tony, no sabes que dulce y placentero me resulta saborear tu nombre en mi boca, te amo, Anthony.
- Tu siempre tan cursi, pero eres mi cursi, Te amo.
Steve lo abrazo más fuerte, era la segunda vez que le decía que lo amaba y escucharlo después de tanto tiempo no dejaba de sentirse como si fuera la primera vez, después de que había logrado que lo amara nuevamente, quería que siguiera diciéndole que lo amaba a cada momento y de él dependía que aquello sucediera con frecuencia.
[...]
- Hola princesa, se que no ha pasado mucho tiempo desde que vine a verte, pero necesitaba hacerlo.
Tony se encontraba sentado con las piernas cruzadas frente a la tumba de su esposa, ya la había limpiado un poco y había cambiado las flores. Su marido estaba parado detrás de él, no lo dejaba solo ni a sol ni a sombra y lo entendía, después de años de estar separados y de haberse perdido el embarazo de Peter, no quería perderse ni un minuto del de sus gemelos.
- Se que debes saberlo, hoy es el día de la boda de nuestro Pet, te ruego cariño que lo protejas desde tu nube. En verdad te agradezco por toda la felicidad que me diste antes y por la de ahora, sé que fuiste tu, no te hagas la loca, mira como estoy, mira mi panza.
Tony se acaricio tiernamente su vientre abultado, los gemelos iban creciendo rápidamente.
- Mi princesa, espero de todo corazón que estés bien junto a Nicole y a tu bebé, gracias por todo mi amor, te amo.
Steve lo ayudó a levantarse y lo abrazó, pegando la espalda del castaño a su fornido pecho.
- Yo también debo agradecerte Mary, por haber salvado a nuestro Tony y a nuestro Peter, siempre estaré en deuda contigo por el resto de mi vida, por haberlos cuidado y protegido cuando yo no pude hacerlo, he de confesarte que me siento celoso de ti porque ocupas un lugar muy especial en sus corazones pero también se que te lo mereces. Te prometo que los cuidare con mi vida, muchas gracias por existir en nuestras vidas, Mary.
- Hey, eso fue muy emotivo y sincero de tu parte.
- Simplemente es la verdad, ella hizo lo que yo debí hacer, debí cumplir con los primeros votos en vez de lo que te hice, ella te cuido a ti y a nuestro hijo, fue tu esposa, tu amiga y tu amante, ella fue tu sustento y a pesar de mis celos, estoy muy agradecido, porque sin ella quizá tu hubieras muerto de verdad y te hubiera perdido para siempre.
- Sabes que si ella siguiera viva, tu y yo no estaríamos así, ¿verdad?
- Soy consciente de ello, pero hubiera preferido mil veces verte de lejos y bien que saberte tres metros bajo tierra junto a nuestro hijo, la sola idea hace que me enferme.
Steve lo abrazo más fuerte mientras con una de sus manos acariciaba su vientre. El castaño simplemente se dejó abrazar, sabía que Steve estaba arrepentido y más que dolido por todo lo sucedido, si estaba celoso nunca lo demostró, pero ahora que lo sabía se sentía un poco mal. Él disfrutó mucho de su esposa y su matrimonio, mientras que su hermoso rubio vivió un infierno junto a Sharon sin poder olvidarlo, armándolo a la distancia, amando su recuerdo.
Nadie se merecía algo así, pero la vida y las consecuencias que venían según las decisiones que se tomaban, eran así.
- Sabes que te amo, ¿verdad?—Tony levanto su mano y acaricio su rostro cubierto por su más que caliente barba.
- Lo se mi amor, yo te amo con toda el alma, bonito.
- Será mejor que nos vayamos, la boda de nuestro hijo será en un par de horas y conociéndolo, debe estar histérico.
- ¿A quien habrá salido?
Suspiró Steve pasando un brazo por encima de los hombros de su adorado esposo, quien le lanzó un beso a la tumba de Mary para luego encaminarse a la boda de su hijo mayor.
[...]
" Oh rayos, ya es hora"
" Tenemos que ser serios en esto"
" Esta será la segunda y última vez que haremos esto"
" Debemos hacerlo bien, no queremos avergonzar a nuestro baby boy"
" ¿Defraudarlo y quedarnos sin su sabroso culo?"
" ¡Ni de broma!"
- Yo, Wade Winston Wilson, te tomo a ti como esposo y prometo amarte y respetarte por el resto de mi vida, eres lo más preciado que el destino puso en mi camino y me siento bendecido al saber que eres tu mi pareja destinada, prometo protegerte con mi vida y nunca ser causante de que tus hermosos ojos se opaquen con la tristeza, te amo más que a mi vida, mi Peter.
Todos los asistentes a la boda se quedaron mudos, incluyendo al novio, nunca habían oído tanta elocuencia y solemnidad en el ex mercenario. Lo cual era prueba fehaciente que lo que decía era más que cierto, aquel hombre había desnudado su corazón ante todos solo por su amor. Sólo por él.
- Es su turno, Peter— lo llamó el padre, quien emocionado se secaba una traviesa lágrima.
Peter se aclaro la garganta un poco, su casi marido lo había emocionado demasiado.
- Yo, Peter Benjamin Parker Rogers - Stark, te tomo a ti como esposo y prometo amarte y respetarte por el resto de mi vida, muchas parejas destinadas esperan años, incluso vidas para encontrarse, pero yo no tuve que esperar mucho para encontrarte y agradezco al destino por eso, tu eres mi complemento perfecto, eres la locura que necesita mi serenidad, eres el amor que necesita mi corazón, prometo protegerte con mi vida de ser necesario y siempre, siempre estar junto a ti, Te amo Wilson.
- Oficialmente, los declaro esposos, pueden besarse.
La gente comenzó a aplaudir y a silvar cuando Wade tomó en sus brazos a su flamante esposo y lo beso envolviendo los mismos en su estrecha cintura, pero no se aguanto más y bajo sus manos para apretar sus perfectos glúteos, sacando una risa a los asistentes, un sonrojo al padre y que alguien le lanzara un zapato certero a su cabeza junto a varios objetos más, suponía, cortesía de su suegrita pasiva y de los tíos más que sobreprotectores de su baby boy.
- Casado a los diecisiete ¿quien lo hubiera dicho?—comento Thorun abrazando a su primo.
- Si, siempre pensé que el primero en casarse sería Howard, pero tu le ganaste. —sonrió Luna.
- Vaya nombrecito el que te cargas.—comentó Howard intentando alejar la atención de él.
- Es que nuestro Pet es de la realeza—se burló Lyra.
- Sir Peter Benjamin Wilson Parker Rogers–Stark, ¿tendremos que hacerte reverencia a partir de ahora?— Nathaniel comenzó a carcajearse.
- Ya sueltenmme, ¿no?— se quejo el castaño.
Sus amigos se miraron entre sí para luego sonreírle.
- ¡NOOO!—gritaron todos.
Peter sólo río, ya se encontraban en la recepción de su boda y fiesta de cumpleaños de su flamante esposo, ya le habían cantado el feliz cumpleaños, así que era libre de vagar por ahí mientras sus amigos acaparaban y felicitaban a su marido. No cabía en su cuerpo de toda la felicidad que sentía, aunque le faltaba su madre, pero sabía que ella lo veía desde el cielo y se sentía más que feliz por él.
Busco a su marido con la mirada y lo vio siendo acorralado por su padre y sus tíos Thor, Loki, Bruce, Natasha y hasta su tía Pepper. Al sentir su mirada, su marido lo miró con cara de ayúdame, a lo que simplemente Peter se encogió de hombros y le guiño un ojo, prometiéndole que lo compensaría.
Peter sonrió al ver la sonrisa sucia que su marido le lanzó, pero se le borró al instante cuando su piel se erizo, su sentido arácnido se había despertado.
- ¡GRANADA!

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Monumento a tu Amor
أدب الهواة" Tony Stark ha muerto" Ese era el título que abarrotaban las primeras planas en los periódicos, revistas, en las redes sociales, noticias de televisión y de radio de todo el mundo. ¿Lo peor de todo?, es que no estaba tan lejos de ser verdad. ¿Qui...