Empecé a cuestionarme a mi misma el porque de esta reacción. Llegué a pensar que tal vez era por que estaba rodeada de mucha gente, pero desde que llegué al lugar ha sido así y en ningún momento percibí ninguna señal de claustrofobia.
-¿Que haces ahí niña? Ven aunque sea para que arruines la foto -se dirigió a mi de manera burlona Tara, una de las amigas de Carly. En otros momentos se me habría ocurrido responderle algo como "¿Decías, Tarada? " pero esta vez simplemente no estaba de ánimos. Siquiera entendí bien lo que decía, por ello pestañé varias veces tratando de comprender lo que decía y salir de mi dilema mental.
-¿Qué foto? -dejé a flote mi ignorancia.
Ella rodó los ojos.-La foto final niña. Nuestro grupo quiere sacar una foto de recuerdo, juntos. Y tu tienes que estar ahí. Ven o te quedas fuera. Total, ni tan imprescindible que fueras -sin cuestionar mas, le seguí mientras esquibaba personas con cada paso. Apenas me di cuenta que nunca quité la mancha del vestido. Cuando me encontré a Dylan lo olvidé por completo y ya no tendría tiempo de ir al baño o me quedaría fuera de la foto. Puse mi mano sobre él tratando de disimular la mancha para cuando estuviera lista para la foto. Digamos que es una nueva "pose" de fotografía que aprendí.
Llegamos al lugar donde ya un gran grupo se preparaba para la fotografía. Eso me alivió un poco, pues al haber mucha gente eran mas pocas las posibilidades de que la mancha fuera capturada. Aunque creo para ser sincera que hasta la mancha tenía mas ánimos para la foto que yo misma justo ahora
Cory, un chico de nuestro grupo ya estaba detrás de la cámara ajustando de modos que todos nos viéramos. Ajustaba también los segundos para que la foto se disparara de manera automática y él pudiera salir en la fotografía. Ya todo estaba casi listo cuando Gwen, la amiga de Carly que me topé cuando iba al baño, se unió de prisa al grupo para ser parte de la fotografía.
En ese momento mi corazón cayó al suelo y sentí como si alguien llegó en ese mismo instante y le dio mil y un martillazos hasta dejar sus pedazos tan disminutos he irreparables como arena.
Gwen se unió a nosotros para ser parte de la foto, pero no vino sola. Un chico la acompañaba tomados de la mano. Pude imaginar a cualquiera pero jamás pensé que ese chico sería Dylan. Aquel que aseguró que estaba aquí por mi. Aquel que aseguró que me veía hermosa. Aquel que aseguró que me quería.
La fotografía fue tomada. Pero en ningún momento miré a la cámara. Mi mirada estuvo todo el tiempo clavada en él. Aunque ahora no me estuviera viendo, pues estaba muy ocupado en mirar a Gwen. Sus ojos brillaban tanto mientras la veía. Y esa sonrisa que tanto yo amaba, estaba allí. Brillando en la noche con todo su esplendor. Pero estaba vez no era por mi. Lo acepto.
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Desconocido a la vista. #1 ©
Short Story¿No has considerado comprar un diario personal? He escuchado que no son tan caros. ••• Bridget nunca había sido una persona popular. Ni estaba cerca de serlo. No tenía amigos. Ni estaba cerca de tenerlos. Tampoco era una persona social;...