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En el otro mundo, minutos después de la batalla.
(6 meses antes de la actualidad)

— ¡Maldita sea!.—Se quejó Shuichi.— ¿Cómo fui derrotado con mí plan infalible?..

— Te dije que acabariamos en el infierno.—Intervino una voz.

— ¿Que? ¡¿Quien eres?!.—Cuestionó al ver a la chica, la cuál estrechó los ojos con una sonrisa.

— No hagas esa cara, sacaras mí lado sádico ya que tienes una expresión tan divertida.—Advirtió.— Antes de intentar borrar mis recuerdos, una pequeña parte de mí memoria se escondió y aquí estoy, soy los restos de la Pares que conociste, supongo que no valgo mucho. Apenas puedo crearme un cuerpo con el cual representarme, quizás hasta pronto sería eliminada al permanecer lejos de mi cuerpo. Realmente nose que pasa sí me alejo.

La chica se sentó en una roca con tranquilidad.

—Ya veo, solo eres los restos de recuerdos reunidos que no logre borrar.—Pronuncio mientras se calmaba.

La de ojos azules río.

El intentar justificar todas nuestras malas acciones nos hizo insensibles
Atrapados en una amarga oscuridad
La soledad acompaña todo este nuevo comienzo..

— Así es, solo soy una pequeña masa de recuerdos flotante.—Declaró.— Te agradezco el haber creado a Lia, ahora los demas no se sentiran tan mal.—Habló la albina.

— ¿Que haces aquí de todos modos?, ¿No deberias fusionarte con Lia para volver a ser tú?, quiero decir es tú otra parte.

— ¿Y desgraciar a Lía?, ni loca. Lo mejor para mí sera morir y dejarla como mi reemplazo.—Aclaró.— Pronto despertará, debido al impacto de todo en ella su alma ó consciencia se alejó un poco para asimilar todo.

— ¿No tienes miedo a morir?.—Preguntó sentándose a un lado de la chica.

Un sonriente dios de la muerte me esta diciendo: ¿Crees en ti misma?
Eh comenzado..

— Siempre dije que no pero creo que al final, sí.—Respondió con una sonrisa.— Me da miedo..¿sabes?cuando Kirito te mató pude ver miedo en tu rostro.

— Ese maldito bastardo.—Murmuró.— ¿Porque no aprovechas estos últimos momentos con alguien que valga la pena?

— ¿Le dices eso a unos simples recuerdos?—Preguntó.

Pares río.

— No estare satisfecha, nose porque.—Contestó y volteó a verlo.— Quizas es porque somos iguales, ambos estuvimos ante las críticas y traiciones. Tú con tu padre y la nave, yo con mi familia y mí mundo.

El sudor, lágrimas y errores parecen saber a miel
Cuidadosamente creé un amuleto de cristal, ¿con cien quilates de brillo?
¡Impostor!
Pero el mundo esta esperando un milagro deslumbrante que quite el aliento.

— ¿No me odias?.—Interrogó.

— Claro que te odio, ¿Cómo no odiar a mi propio reflejo? —Sonrió.— Pero me hiciste caer en un buen sueño, nada mal para un plan maligno.

La chica se levantó y se acercó al Shirosagi al punto de tocar su labio con el dedo índice.

Mi reflejo, tan repulsivo y vil que me otorga las ganas de destruirlo. Sin embargo.. —Penso la albina estrechando los ojos. — Me has demostrado que eres digno de usarme al no abandonarme.—Dijo.—Si de alguna manera pudieras revivir, ¿volverías a intentar destruir la tierra?

— Supongo que no, no podría con el poder de los guerreros de la tierra.—Contestó.— Quizas si hiciera algún plan pero sería arriesgado.

— No eres mala persona, solo querias ser reconocido por tú padre, ¿verdad?.—Preguntó la albina.— Es tan sorprendente ver como un simple deseo desencadena la destrucción de uno mismo ó de algun planeta, realmente me llama mucho la atención.

— Espera, yo mate a Hiro, tú padre ó hermano adoptivo en pocas palabras.—Decía Shuichi y Pares colocó su mano faltante en su cuello mientras hacía ligera presión.

— Hiro seguro esta en el cielo ya que nunca asesinó a nadie y aunque ayudó al plan para eliminar a la Tierra, la terminó salvando.—Explicó la albina al momento de pegar su mejilla con la del peliazul.— Aún así, no te perdonó.

— ¿Q-Que haces aquí en realidad? — Logro articular.

— Creo que acabo de darme cuenta que quise verte sufrir, te recomiendo que entrenes ya que hay mucha gente fuerte en este lugar.—Advirtió la chica mientras se separaba del chico y volvía a sentarse en la misma roca.— Aunque también de alguna forma..

La chica llevó la mano a su collar, aquélla piedra que le dio él Shirosagi para obtener energía ilimitada sí lo necesitaba.
Le encantaba todo de este collar, el color, la textura, forma circular.. y el poder.

La albina lo miró directamente.

— Estoy dispuesta a protegerte.—Acabo la frase.— Sigues siendo mi maestro.

¡Shiny sword, my diamond!
Una cristalizacion de mis penas y deseos.
Cada uno declara su deber y avanza a su respectiva luz.

Él peliazul se sorprendió.

He llegado hasta aquí al tomar un sin fin de decisiones
Es la hora, una sola plegaria mas confirmara esta revolución.
¡Así que brilla!

— Una pregunta mas, ¿no te sientes mal por haber intentado destruir todo tú mundo y a tus amigos.—Cuestionó con el ceño fruncido.

— Me siento fatal, tanto que quisiera morir. Lamento lastimarlos, odio haber asesinado a aquella persona y despreció en lo que me convertí.—Declaró mientras miraba el suelo.— Pero de alguna forma no puedo dejar este camino, es tan adictivo.. un lado de mí me dice que no lo haga pero el otro lado me controla mejor, y es el de lastimar a otros.

Shiny sword, my diamon!
Una cristalización de mí pureza y deseos, ilumina por completo mis lágrimas.
Ellas protegen el brillo de mi fortaleza
No tengo tiempo que perder con imitaciones, no hasta que el signo de mi fortaleza.
Hasta que la joya pulida de mis esfuerzos se desintegre.
Solo protegere lo que quiero cuidar

Él peliazul sonrió.

— Pares quería ser la buena y Lía la mala, es tan curioso ver como las dos intercambiaron lugares.—Pronunció Shuichi.

— Al final es la verdad.—Miró al cielo.—Lo que se siembra de cosecha, seguí este rumbo y coseche la desgracia. Lo merezco.

— No te preocupes, algún dia saldremos de aquí y seremos libres de nuevo.—Confesó él Shirosagi.— Ya sea por reencarnacion ó porque un subordinado nos reviva.

— Eso esperó pero no me molesta estar aquí y divertirnos un poco.—Sonrió la albina.— Te clasificaron como clase baja pero tienes un poder de al menos un super saiyajin avanzado.

— ¿Que tan fuerte es eso?

— Mucho pero necesitas ser más fuerte sí quieres mantenerte, claro.—Recomendó la de ojos azules.— Hay varias presencias fuertes, sería genial combatirlas.

La chica se levantó y extendió su mano.

— Sí así lo quieres te dejare cuando seas tan fuerte para defenderte sólo.—Agregó la Sao y él peliazul tomó su mano para ponerse de pie.

«Después de todo, soy una masa de recuerdos inservibles»

— Hazme fuerte.—Aceptó él Shirosagi.

¡Espada brillante, mí diamante!
Una cristalización de mis penas y deseos, cada uno declara su deber y avanza hacia su luz.
Tomando decisiones una y otra vez, continuaremos hacía el mañana.

[WITD] »Whispers in the dark«.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora