[WITD] »Whispers in the dark«.

»48«

—No soy una idiota como para cooperar contigo—Dijo la albina.

— Pero lo harás, una vez que termine contigo no reconoceras a tus propios amigos ó aliados—Al decir eso la chica ensancho los ojos y miro a los lados buscando una salida.— Intenta como puedas ya que no podrás escapar, no te preocupes, te acostumbraras a disfrutar el sufrimiento que le traeras a cualquiera.

Este saco una jeringa con un liquido verde y después la inyectó en el brazo de la chica, esta no podia siquiera moverse.

— Te preguntaras que es esto, solo una medida de prevencion para los soldados mas fuertes que tengo.—Relato.— Si alguien crea un arma que revierta por completo mi control, esta sustancia intervendrá para que sigan siendo leales a mí.

— Eso solo pasaría si siguieses vivo ya que muerto se pierde esa orden.—Sonrió la chica con arrogancia.— ¿Y sí alguien te mata, eh?

— ¿Quien crees que me protegerá?.—Cuestionó divertido.— Ustedes, aun así la sustancia junto a la armadura solo los reformatea, con eso es suficiente para mí.
¿Sabes?, no le pedirias a Hiro que viniera a salvarte por tu orgullo, mas bien, lo motivarias a irse para su bien.

Este miró a la albina con una sonrisa ladina, la chica miró a otro lado.

— Esa mirada me dice que es cierta mí teoria.—Confirmó Shuichi al notar que Pares miro a otro lado.— Y conociendo a Hiro vendrá hasta aquí, no dejaría a su pequeña hija en malas manos.

La albina guardo silencio, no sabia que decir.

— Hay una segunda función en la inyeccion que es intercalar entre tú aspecto anterior y el actual, Golem ó humano.—Explicó Shuichi.— Así podras hacer creer que regresaste y los engañaras.

— ¡Dejalo fuera de esto!.—Grito con fuerza.— ¡Idiota!

— Para crear un monstruo, se necesita ser uno, ¿no es asi?.—Dijo sombriamente.

— Sí, ya recuerdo. Me matarán pero eso quiere decir que a ti también. Cataleya, Kirito, Gohan y Hiro, les dejo ese trabajo. Si tanto aman este mundo, matennos.—Pensó la albina confiada.— Aunque si no lo logran, lo hará Bills al ver que Shuichi hace un alboroto en el universo, claro cuando se animé. Quizas termine siendo zeno-sama ya que Goku no recomendará el torneo. Sería una eliminación directa. De todas formas moriré, ¿no es así?

— ¿Porque esa sonrisa?.—Pregunto molesto.

— Lastimosamente para ti, yo ya era un monstruo.—Dijo orgullosa.— Nos veremos en el infierno.—Despidió Pares.

—Realmente lo dudo.—Contradijo.— Solo tengo que reaformar al monstruo y mostrarle quien manda, ¿no es así?.

Este río al notar que la peliblanca había perdido la capacidad de contestar mientras el metal reclamaba su rostro.

— Tranquila, yo no desperdiciaria a alguien como tú.—Pronunció.—Tendrás el mejor uso posible.

Este camino hasta una extensa puerta que se abrió automáticamente revelando una gran cantidad de Golems, diferentes tipos de guerreros  convertidos en metal listos para empezar una guerra.
Cada uno de ellos se arregló para tener caras plateadas, estáticas y hermosas.
Eran Golems, sirvientes obedientes creados por Shuichi para cualquier cosa que el quisiera.

—Excelentes.—Pronunció Shuichi mientras su sonrisa se marcaba aún más en rostro.

No eran monstruos gigantes de roca, eran seres artificiales esculpidos como las mejores esculturas.

La frialdad que afectaba a todo lo que se volvió metal ahora golpeó sus mentes, vacíandolos de pensamientos y voluntad. Fue una vez que estaban en blanco que comenzaron a rellenarlos como si los reprogramaran, todos llenos de pensamientos idénticos sobre movimientos de pelea pero sobretodo proteger y servir al shirosagi. Eso hacía la inyección.

Mientras sus mentes eran reformadas sus cuerpos sufrieron un cambio de último momento, elegantes patrones oscuros en la armadura se formaron para hacer de los Golems lo más atractivos posibles, remarcaba músculos y aspecto brusco en parte de los hombres mientras a las mujeres se le atribuía una cintura mucha más marcada y rostros finos.

Todos los golems se pusieron en funcionamiento colocando su mano derecha en su corazón en forma de cuchilla mientras sus manos izquierdas la pasaban detrás de ellos, semejante a un saludo militar para luego inclinarse.

El podría acostumbrarse a este nivel de devoción, sí realmente quería gobernar su propio imperio necesitaba de un ejército que lo apoyará, acto seguido volteo a mirar a la peliblanca.
Su cabello se veia semejante a una hermosa masa de plata y obtuvo un aspecto metálico brillante, este se acercó a verla más de cerca.

El silencio preocupó a Shuichi a pesar que era parte del proceso no podía evitar tensarse.

— ¿Funcionó?, quiero decir mi modelo más reciente no pude tener fallas.—Habló nervioso, su respuesta llegó cuando los ojos vacíos de la Sao se iluminaron de una brillante luz celeste.

— Slave Golem SP-Type en línea.—Pronunció la Sao imitando la pose de los demás soldados metalicos.

— Impresionante.—Murmuró mientras tomaba un mechón del cabello de la chica, su cabello se podía mover como naturalmente lo hacía con la excepción que en realidad era de metal y era irrompible ó duro a la hora de golpearlo.

Este tomó a la chica del mentón, así mirando sus rasgos faciales un tanto distintos a las demás Golems femeninas, las líneas oscuras que decoraban su armadura se habían extendido hasta parte de su rostro, las líneas cruzaban por sus mejillas y conectada con la parte inferior de los ojos, así haciéndola destacar.

Este acarició aquellas marcas oscuras en su rostro. Hace un tiempo el había hecho una configuración que únicamente él o algún descendiente suyo podría tocar el tejido de piel mientras otros sentirían simple metal.

Con una explicación más detallada, el metal respondía a su ADN para que en las partes que él tocará se diluyera el acero, sí asi lo quería.

— Te dije que te daría el mejor uso posible, ¿No es así?.—Habló Shuichi acariciando el cabello de la chica.— Realmente serás la mejor arma del ejército.