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Eugeo se posicionó en el mando de la nave, oprimio varios botones y parte del escudo se abrió dando paso al vehículo. Él rubio era el único actualmente que podía acceder al sistema de la barrera.

La nave aterrizó justo en la zona de batalla, la puerta se abrió dejando salir a cientos de soldados.
Cataleya empezó a estirarse una vez piso la tierra y sonrió.

— ¿Ya extrañabas esto?—Cuestionó Eugeo.

— No tienes idea.—Contestó la Saiyajin.

Le deprimia un poco el hecho de que todo dentro del escudo estaba destruido y masacrado, ¿cómo le explicaría todo lo que paso a su familia?

— Cataleya.—Llamó una voz y está volteó, este estaba acompañado de Kirito y Shu. El cuerpo de Hiro ya no estaba en el area ya que una vez el Sao estuvo bien llevo a todos al templo de Kami-sama para ser curados.

— ¡Gohan! —Exclamó la chica y abrazo al chico.

— Cataleya, aprietas con mucha fuerza.—Murmuró él Saiyajin.

— ¡Pues deja de preocuparme!—Exigió la chica.

— Perdóname, enserio.—Se disculpó él pelinegro y la de ojos rubies lo soltó.

— Vaya, ¿y nosotros no te preocupamos?—Cuestionó Kirito con diversión.

— Pero claro que sí, pero menos que Gohan.—Respondió Cataleya.

— Directa, eso es bueno.—Comentó Shu.

— Pero no se queden ahí, chicos.—Dijo Cataleya mientras extendía los brazos.

— Ah..—Murmuró Kirito.— Me daría verguenza.

— Yo no puedo.—Decía Shu retrocediendo varios pasos.

— Que orgullosos.—Cataleya inflo una mejilla.— ¡Bien!

La chica se lanzó en un abrazo hacía ellos.

— ¡Espera Cataleya!.—Exclamó él Sao, la Saiyajin se había lanzado con mucha fuerza.

— ¡Faltas Shu!—Avisó la de ojos rubíes.— ¡Dejese querer!

— No gracias.—Habló él albino, sabía que las cosas que alguna vez le hizo ver Hiro eran mentira pero sinceramente si le había afectado.

— Hombres.—Murmuró la Saiyajin y volvió al lado de Gohan.

— Chicos, me imaginó que se harán cargo del cuerpo de Hiro Shirosagi, ¿verdad?—Interrumpió Eugeo.

— Sí, nosotros nos encargamos.—Pronunció Kirito.

— Pero..—Intentó decir Cataleya pero él pelinegro le sonrió.— Bueno.

—Quizás esa sea la mejor opción.—Habló Gohan.

Eugeo alzó las cejas con una leve sonrisa.

— ¿Por casualidad saben como explicar esto?, en cuanto quitemos el escudo el mundo sabrá que esta area fue totalmente arrasada.—Comentó él rubio con seriedad.— Podría armarse un gran escandalo si no se inventan algo.

— ¿Algo parecido a terroristas espaciales?—Preguntó Cataleya.

— Ahora que recuerdo el mundo estaba en caos cuando sabían lo peligrosos que eran los saiyajin una vez llegaron.—Declaró Gohan.— Sí esta destrucción se hace publica sin motivo quizás la gente se asuste.

— Llegando al punto, ¿tienen alguna?—Volvió a preguntar él de ojos esmeralda.

— Pues..no—Respondio la pelinegra y él rubio río.— ¿Qué es?, ¿dije algo chistoso?

— Se nota que no acatas las indirectas.—Pronunció Kirito con una leve risa.— Prácticamente te esta diciendo que ya tiene un plan.

— Nunca lo dijo, ¿cómo quieras que me enteré?—Interrogó molesta.

— Nadie se te acerca y te pregunta por la nada.—Contestó Eugeo.— Verán, había una planta nuclear cerca que quedó algo dañada tras la batalla. Podrían irse y la gente pensará que fueron los empleados quienes no pudieron controlar la explosión.

— La falta de comunicación podría solucionarse con que la radiación impedía todo enlace con los demas.—Incluyó Kirito.

— Podría funcionar.—Opinó la Saiyajin.

— Bien, hora de enfrentar la realidad.—Avisó Eugeo y presionó el botón de un control provocando que el escudo se desvaneciera.— Será bueno volver a sus hogares, la patrulla se encargara de todo lo demas.

— Gracias, Eugeo.—Agradeció la Saiyajin que empezó a levitar.

— Adiós chicos.—Se despidió Gohan.— La acompañare.

— ¿No vienes, Kirito?—Preguntó Cataleya, le extrañaba que él Sao aún estuviera pisando el suelo.

— Tengo varias que cosa que resolver, quizás los visite después.—Sonrió él espadachin.

— Esta bien, vamos Gohan.—Indicó la chica y él Saiyajin asintió para luego salir volando del lugar.

[...]

— ¿Esta bien si te dejo aquí?, mamá me matará cuando llegue.—Cuestionó Gohan.

Cataleya río.

— ¿Dejarme en la puerta de mí casa no es suficiente para ti, Son Gohan?—Preguntó la chica.— Anda ve, tú madre seguro que esta preocupada.

— Bueno es que quizás te pase algo en el patio de tú casa y..—Habló nervioso.

— Gracias, Gohan.—Dijo la Saiyajin mientras se acercaba y le besaba la mejilla para después separarse.— Siempre te preocupas por mí.

Él Saiyajin puso una mano en la cabeza de la chica.

— Y lo seguire haciendo.—Declaró con una sonrisa y la de ojos rubíes volteo, se sonrojo.— Nos vemos.

— Nos vemos.—Se despidió la pelinegra, él chico miró a los lados y notó que no había nadie. Podría volar libremente.

La Saiyajin río por lo bajo y entró a Corporacion Capsula.

Caminó mirando el suelo, sus pensamientos le hacían perder la noción del lugar hasta que vio unas botas blancas, levantó la vista encontrandose con Vegeta frente a ella.

— Quiero que me cuentes que paso.—Habló él Saiyajin.— Llegamos hace días y la madre de Gohan llamó diciendo que estaba preocupada, tuvimos que mentirle para que se tranquilice.

Cataleya guardó silencio.

— Cuando regresamos no estaban y recientemente esta la noticia de la destrucción total de una cuidad.—Recalcó él Saiyajin, pronto la chica caminó hasta él y lo abrazó.

— Lo siento, los extrañe.—Murmuró.

Él Saiyajin correspondió, entendía que no era fácil de contar.

[WITD] »Whispers in the dark«.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora