CAPÍTULO 30

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BOKU NO HERO NO ME PERTENECE

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Nejire: - Izuku...-
Eri: - Papá ¡Mira quién volvió! - Dijo feliz mientras se ponía de pie e iba a abrazar al pecoso.
El  sucesor de All Might se quedó estático ¿por qué ahora? ¿A quién le di la paliza de su  vida para merecer esto?... eran las preguntas que rondaban por la cabeza del chico.
Izuku: - Ya vi Eri... ¿por qué no sales con Ochako mientras hablo con  mamá?-  sugirió  con una cálida sonrisa.
Eri: - Bien...- Respondió haciendo un puchero que la hacía ver demasiado tierna. - Vamos princesa - Llamó  mientras tomaba de la mano a la pelicastaña quién se había quedado de piedra hasta ese momento.
Uraraka: - Eri-chan yo...- Intentó decir mientras era arrastrada por la chica del pequeño cuerno.
Izuku: - Ochako... ve con Eri... ahora voy.-
Uraraka: - Pero... Deku-kun- Trató de reprochar la pelicastaña.
Izuku: - Ahora voy... mientras pueden decidir dónde desayunaremos- Finalizó con una sonrisa tranquilizadora que sonrojó un poco a la pelicastaña.
Uraraka: - Bien - Respondió con una sonrisa.
La chica del cabello celeste quién se había mantenido en silencio intentó hablar.
Nejire: - Izuku... yo - Intentó decir cabizbaja.
Izuku: - Señorita Hado ¿qué sucede?- Preguntó serio.
El corazón de la chica peliazul se detuvo unos instantes y es que, el simple hecho de que Izuku... el que alguna vez fue SU Izuku, se dirigiera a ella de esa forma seria y fría le hacía mucho daño...
Nejire: - Izuku... yo...- Intentó decir nuevamente pero por alguna razón las palabras no  salían de su boca.
Izuku: - Si no tiene nada que decir me retiro... las dos mujeres que más quiero en este mundo me esperan fuera...- Comentó con el mismo tono frío mientras se daba la vuelta y se dirigía a la salida.
Nejire: - ¡Se lo de tu compromiso con Himiko!- Exclamó con algo de ¿enojo?
El peliverde se detuvo en seco y dio media vuelta.
Izuku: - ¡¿Qué?!- Preguntó incrédulo.
Nejire: - Se que tienes planes de casarte con esa villana- Recriminó con la cabeza gacha mientras su cabello cubría sus ojos.
Izuku: - Señorita Hado... Himiko-chan ya no es una villana y no veo qué tiene de malo que esté comprometido con ella.- Respondió serio rompiendo cada vez más el corazón de la curiosa chica, pues no sólo tenía un sufijo cariñoso para la ex-villana... sino que también había dejado de decirle Nejire-chan.
Nejire: - ¿Y por qué no está aquí? ¿Por qué en su lugar  está  esa chica que te abandonó y te  rompió el corazón?- Cuestionó cada vez con mayor evidencia  de molestia en sus palabras.
Izuku: - Ella no fue la única que lo hizo...- Comentó en voz baja mientras apretaba los puños y bajaba la mirada.
La ex-integrante de los Tres Grandes inmediatamente se dio cuenta de lo que había dicho.
Nejire: - Izuku... yo...-
Izuku: - Nos vemos señorita Hado- Dijo de la misma manera mientras se daba la vuelta y nuevamente se dirigía hacia la puerta.
Nejire: - ¡Lo hice por una buena razón!- Gritó enojada deteniendo nuevamente al peliverde. - Necesitamos hablar Izuku... hay tantas cosas que debemos aclarar.- Comento cabizbaja mientras poco a poco se acercaba al peliverde.
Izuku: - Te veo en el parque de siempre a las 8 de la noche.-  Dijo finalmente con un suspiro.
Nejire: - ¿En nuestro banco? - Cuestionó esperanzada.
Izuku: - No  creí que lo recordaras- Comentó visiblemente sorprendido mientras salía por la puerta.
Nejire: - No podría olvidar el lugar de nuestro primer beso...- Susurró para sí misma mientas ponía una mano en su pecho, en dónde su corazón latía rápidamente.

El noveno portador del One For All salió del edifico sólo para encontrarse a una sonriente Eri y una preocupada Ochako.
Uraraka: - Deku-kun... - Intentó preguntar algo nerviosa y bastante inquieta.
El peliverde vio esto y sólo pudo acercarse a abrazar a su ex-compañera con una dulce sonrisa, todo bajo la mirada de una expectante Eri a quién no le importaba si su mamá había regresado... no era tonta, era consciente del tiempo que la peliazul se había ido y de cómo su papá a pesar de todo había hecho lo imposible por que ella fuera feliz, exceptuando lo de Himiko, claro está, pero dentro de ella sentía que Izuku merecía ser feliz, tal vez no  con su mamá, pero sí con alguien más como la princesa, y no, no es que la chica del pequeño cuerno no quisiera que sus padres estuvieran juntos, pero antes de que lo estuvieran sólo quería que fueran felices, claro y que, particularmente, la afortunada que se case con su padre no intente alejarlo de ella.
Eri: - Bien papá, luego puedes besar a la princesa... vamos a desayunar- Dijo sonriente, mientras la pareja que continuaba abrazada se separaba con la cara roja.
Izuku: - Bien ¡Vamos! - Exclamó sonrojado y como un robot.
Eri: - Papá detente, con esa forma de caminar pareces el tío Lida - Reprochó  sonriente.
Uraraka: - ¿Lida-kun sigue moviéndose así?- Preguntó divertida.
El pecoso sólo asintió con la cabeza.
Eri: - Vaya... Así que ¿Lida-kun no princesa?- Preguntó con una sonrisa.
Uraraka: - ¿Si por? Después de todo somos amigos o eso creo.- Respondió nerviosa la chica de mejillas regordetas.
Eri: - ¿No será que lo llamas así porque  sientes algo más que amistad por él? Digo no te he escuchado llamar a nadie con ese sufijo tan cariñoso- Mencionó  divertida mientras el peliverde que un par de pasos más adelante se detuvo en seco.
Uraraka: - Pero Deku-kun...- Intentó decir.
Eri: - Pero a papá lo llamas por su nombre de héroe, no por el verdadero- Contratacó con una sonrisa.
La pelicastaña entendió lo que la actúal estudiante del curso 1A intentaba hacer y sólo pudo reír para sus adentros, justo cuándo iba a responderle a Eri que ella y Lida sólo eran amigos, el peliverde quién se había mantenido en silencio hasta ese momento habló.
Izuku: - Recuerdo que Lida-kun me había comentado que estaba saliendo con Hatsume-san- Dijo serio y con algo de enojo por la pregunta que Eri había hecho, aunque más bien se sintió algo celoso, sí, el enojo no fue por la pregunta de su hija, fue porque se imagino a Ochako, SU Ochako con otro que no era él.
La chica del pequeño cuerno sólo comenzó a reír dejando desconcertados a los héroes profesionales.
Eri: - Vaya papá- Intentó hablar pero la risa no la dejaba - Sabía que te había heredado mis celos... Digo sé que quieres mucho a la princesa, pero no  creí que hasta este extremo- Comentó  ahora algo más calmada mientras el joven héroe se sonrojaba por la vergüenza y la chica con la particularidad de Gravedad Zero se sonrojaba por aquella pequeña escena de celos que acababa de presenciar, SU Deku-kun no era alguien celoso y eso lo sabía, pero al ver su reacción por el comentario de Eri no pudo evitar emocionarse, pues eso significaba que Izuku la consideraba muy importante para él y que no la dejaría ir.
Izuku:  - Bueno... - Habló  nervioso mientras el color carmín continuaba presente en sus mejillas - ¿Qué decidieron que haremos hoy?- Preguntó tratando de aparentar seriedad.
Ambas chicas sonrieron y después de desayunar en un puesto de comida rápida estuvieron todo el día en el centro comercial, hasta que, para extrañeza de la pareja de héroes profesionales la chica del pequeño cuerno se detuvo de la nada y se quedó viendo una tienda en particular.
Izuku: - Eri ¿Qué sucede? - Cuestionó extrañado por el repentino comportamiento de su hija.
Uraraka: - Eri-chan... - Llamó la pelicastaña  quién se sorprendió al ver la tienda que la hija de su ex-compañero  estaba viendo, y es que en efecto... era una tienda de vestidos de novia, pero no cualquier tienda... sino  aquella en la que se había enterado, de la peor manera posible, del compromiso del peliverde con la ex-villana.
Eri: - Papá ¿podemos entrar? - Preguntó curiosa y con una tierna sonrisa.
Izuku: - Eri... aún eres muy joven para eso y cualquier tonto que quiera a mi rayito de sol tendrá que pasar primero conmigo- Comentó bastante serio mientras cruzaba los brazos.
Ambas chicas sólo pudieron reír por la actitud de padre celoso del pecoso.
Eri: - Nunca dije que era para mi - Respondió con una sonrisa mientras tomaba a la pelicastaña de la mano y la arrastraba a la tienda.

CAMBIO DE ÚLTIMO MINUTO (IzuChako)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora