4- Admirador numero uno

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Las clases se habían acabado y para mi suerte el chico está en mi clase de matemáticas así que ocultarme de él fue totalmente absurdo e insignificante ya que durante todo el semestre vamos a coincidir.

Salgo al campus donde quedaban pocas personas y veo a Leah recostado de su jeep con la mano en su bolsillo y fumando un cigarrillo, no nos habíamos vistos más en el día ya que esta en arquitectura y va en el 3er cuatrimestre y solo coincidimos como en una sola clase.

— Hey 50 mordidas de Grey!!.

Dice burlón llamado mi atención por la mordida que le había hecho hace rato y camino hacia él y rió ante su estúpido comentario.

— Que hay bisexual enfermizo— Digo al llegar burlona.

— ¿Vas a tu casa? — Pregunta.

— Si, tomare un taxi — Explicó.

— Claro que no — Niega inmediatamente lanzan su cigarrillo ya gastado al piso y da un leve suspiro de tranquilidad — Sube yo te llevo.

Habla por último abriendo la puerta del jeep y asiento subiendo sin reclamar y este empieza a conducir.

— Hacia donde my lady — Dice burlón fingiendo un acento británico y río negando.

— Forest green.

Digo y este abre los ojos como plato ante mi respuesta.

— Vaya sí que tienes huevos para vivir por ahí — Dice negando, pero ya es algo que me habían dicho antes, mi tía tiene gustos muy peculiares para meterse en la zona más peligroso del estado, pero si alguien se mete con Mel o conmigo le clavamos un disparo en el culo y listo.

— Mi tía decidió mudarse ahí, Así que no me quedaba de otra.

— ¿Que te trajo a la hermosa y peligrosa Chicago?

Dice y lo único que llega a mi mente es Ivan y mi venganza y me retuerzo un poco incomoda.

—Bueno, la carrera de medicina — Digo finalmente fingiendo ser obvia y este asiente.

— Yo no haría 7 años en una Universidad ni que me pagaran 1,000,000 $ de dólares.

Dice negando.

— Solo haré medicina general en 4 años no escogeré especialidad.

Explicó y este asiente, 25 minutos después se detiene enfrente de mi casa.

— Gracias por traerme — Agradezco sujetando mi mochila para bajarme.

—¿Que harás en la noche?

—Voy a trabajar.

— ¿Trabajas? — Pregunta curioso/sorprendido y asiento obvio, cara de rica no tengo...— De que trabajas.

— Soy mesera y bailarina en un club...

— ¿En clandestino? — Dice rápido y asiento levemente Sorprendida, este es un acosador ¿O qué?.

— Como lo sabes... — Niego confusa definitivamente este chico es una cajita de sorpresas o como dije antes un acosador.

— Es el mejor club de la ciudad y con los mejores cócteles — Explica mirándose las uñas y asiento, bueno si eso es verdad— Además ya te había visto bailar.

Dice burlón en lo último y mi boca forma una O negando y quedó momentáneamente en shock y niego nuevamente, ok ya estoy clara de que no es un acosador.

—¿Cómo? ¿Cuando? — Es lo único que me sale ante mi gran sorpresa y este sonríe con inocencia.

— El viernes estaba con unos "amigos" y te vimos, aunque llevabas un pequeño antifaz no hay que ser un genio para reconocerte.

Cuidado con Roy Blacked [#1 ADV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora