Inocencia Interrumpida: Perfectly Wrong ||S.M|| #1

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El Café
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-Quíen es la víctima? Por mucho tiempo creí que yo lo era, inocente, asustada, destrozada... si tan solo la uviera escuchado, dos años atrás... La última vez que llore con este dolor fue en su funeral, no hace falta estar muerto, para saber que ya morí. Perdóname Joan, perdóname.

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-No puedo creer que te hayas enamorado de Raul, bueno Shawn- dijo Heiley.

-Y yo no creí que el fuera tan malo; ahora quiere quitarte a tu hijo, después de haber... perdóname Heiley, esto es tan duro para mí, no puedo- dije llorando, toda mi vida había sido una persona fuerte sin mostrar mis sentimientos, y ahora? Ahora lloro como loca por el.

-Qué va a pasar cuando regrese y quiera verme? Yo no podré ni verlo, me voy a morir de miedo Heiley, no sé que...

-Shh tranquila Alison, un paso a la vez, creo que tengo a la persona correcta para que te ayude, espérame un momento- pidió Heiley. Asentí.

-En está tarjeta está el número de la persona que puede ayudarte con Shawn, quiero que estés tranquila, el no te hará daño- dijo Heiley, tomé la tarjeta que me dió. En ella estaba el nombre de Cole Hoffman... ese nombre, lo recordaba... Espera.

-Cómo conoces a este señor? El no quiere a Shawn, no sé por qué pero es malo...

-Alison... la historia la has conocido al revés, Shawn no es aquí la víctima, aquí el es el diablo- dijo Heiley.

-Qué? No entiendo.

-Cole Hoffman, es el tío de Raul o Shawn, como quieras llamarlo... el casi lo mata; todo ese imperio que ves, que Shawn domina... todo eso le pertenecía a Cole, sé que lo que hace también es malo.

Yo estaba tan confundida, tan dolida, en que momento me había metido en toda esta locura- pensaba.

-No puedo con esto... yo necesito estar sola... yo...- apenas podía decir.

-Lo entiendo, pero si cambias de parecer... llama a Cole, él sabrá que decirte- dijo Heiley.

Salí lo más rápido posible de la casa de Heiley, no tenía nada claro, estaba tan confundida, dolida, imaginaba su mirada, sus palabras... el no parecía ser tan, tan... tan monstruo, tan malo! Pensaba en James, en Paulette... camine, camine mucho, ni siquiera sabía a donde iba, solo caminaba... llegué a una pequeña fuente, que jamás había visto en mi vida, estaba en un lugar el cual no recordaba haber estado nunca... ya estaba oscureciendo...

Me senté, seguía llorando, odiaba con toda mi alma estar así; jamás había sido tan débil en cuanto a llorar, a sentirme así. Nunca me había enamorado, nunca me había ilusionado con nadie, y menos en tampoco tiempo. Como pude... como pude ser tan inocente, si desde un principio fue una farsa!!!

-Señorita, se siente bien?- escuché decir. Levante mi mirada, era una mujer mayor, con su bastón de madera, muy arreglada, con muchas ganas y unos lentes. Calculo de unos 60 años.

-Ehh, si- contesté

-No te ves bien, llevas mucho tiempo aquí sentada, ya es de noche y puedo jurar que no eres de estos alrededores- dijo ella. Limpie mis lágrimas.

-Qué hora es?- pregunté.

-Más de las ocho- dijo ella.

-Gracias. Tengo que irme- respondí, me levanté de dónde estaba.