Dos Chicos, Un Amor (+18) #DCUA1 ||TERMINADA||

25. Loco

*N. ETHAN *

Ya es lunes de nuevo, estoy cansado de los lunes por la escuela. Lo bueno de ir a la escuela es poder hablar como mis amigos y ver a Madison.

Trato de tranquilizarme y concentrarme en ducharme y cambiarme, pues en esta semana habrán exámenes antes de vacaciones de navidad. Agarro mi chaqueta y bajo para ver a mi hermano y mi prima comiendo un sandwich de jamón.

Sus estruendosa carcajadas cesan en cuanto entró a la cocina. Empiezo a comer y me encanta ese sabor del jamón, queso, lechuga y tomate combinado con el pan.

-¿Te gusta? - me ve Josh.

-¿Quién? - alzó una ceja y ambos se ríen.

-Se refiere al sandwich. - dice Valeria.

-Ah, entonces si. - me tomo mi jugo de naranja. - Ya vámonos.

-Okay. - Valeria rueda sus ojos.

Salimos de la casa y subimos al carro. Dejo a Valeria en su escuela para irme con mi hermano a la escuela y empezar el lunes.

Al bajar del carro, veo a Maddie esperando a su hermano de que salga del auto. Hay algo de solo, pero eso le favorece, la hace verse aún mejor de lo que ya es.

-Estas babeando. - dice Josh cerrando la puerta del carro.

-Cállate y avanza. - lo dirección o a la escuela y él se ríe.

Trato de avanzar pero enseguida dos chicas que parecen hermanas, pero no lo son, se ponen a mis lados.

-Hola Ethan. - hablan al unísono.

Son dos chicas rubias que siempre me cazan para seguirme. No sé porque lo hacen y le he dicho que no me gustan, en realidad prefiero a una sola castaña.

-Ya me voy a clase, váyanse. - digo cansado de lo mismo.

-Okay. - me sonríe una de ellas.

-No sé ni qué quieren. - bufo. - No me gustan y no quiero tener nada con ustedes, si no se van las demandaré por acoso.

Las dos se ven sorprendidas y se van a paso rápido, espero que eso funcione para que no me digan nada por varias semanas y espero meses.

Me voy a mi clase de matemáticas, preparado para las clases más pesadas de esta mañana.

***

Ya estoy en las gradas en la práctica de mi hermano, no me puedo ir porque Valeria en cualquier momento va a venir para irnos los tres pero mientras tanto tengo que esperarla. Aprovecho para ver a aquella porrista castaña.

Trae un suéter grande gris y unos leggins negros, cuando se quita su suéter, veo una blusa de manga corta blanca. Camino hacía ella mientras está bebiendo agua.

-Hola, entrometida. - me siento a su lado sonriendo.

-Hola, egoísta. - sonríe. ¿Qué haces aquí?

-Mi hermano, te recuerdo que mi juega con el tuyo.

-Es cierto. - se queda pensativa. - ¿Vienes a ver a las porristas?

-Por el momento, me gusta verte solo a ti. - digo y ella se sonroja.

Se ve linda así, pero no dura mucho porque se concentra en hacer su coleta alta.

-¿Solo estás tú? - digo y niega.

-También están ellas. - señala a unas que están calentando. - Las demás salen tarde, así que tengo que esperar.