Capitulo 40: Cuando el amor es real [1/2]

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Aún recordaba cuando Toriel solía darle consejos. Incluso consejos sobre que no debía limitarse. Debía ser feliz. Pero a su vez, ser cuidadoso. Intentar ser feliz, conocer el mundo. En resumen: Ser un maldito rebelde. ¿Y a qué le había llevado eso? Rompieron su corazón, lo arreglaron nuevamente, tuvo amigos, tuvo un amor. ¿Y ahora? Estaba camino a su muerte. Irónico, ¿Verdad? La muerte moriría ese día. ¿Y lo peor? Había unas palabras que se le habían grabado perfectamente a Reaper en la mente: "Si realmente lo quieres, cuídalo". 

¿Cómo podía cuidar a alguien tan frágil a su tacto? Ya ni siquiera pensar podía con todo el trabajo que tenía antes de su "secuestro". Solo deseaba ver a Murder una vez más, escucharle decir que él era increíble. Ah, nunca pudo olvidar esas palabras tan cariñosas de parte del polvoriento.

Y allí se encontraba ahora, siendo escoltado por guardias hacia la sala de su ejecución. Su inmortalidad sería quitada, los años serían contados. Se volvería simple polvo en la nada.

Observó el lugar de su ejecución, los dioses le esperaban al otro lado de una gran y alta puerta cubierta en bellas enredaderas. Justo cuando iban a hacerle cruzar, una explosión logró escucharse detrás suyo. ¡Los guardias intentaron defenderse! Abandonando al dios de la muerte, dejándolo tirado al suelo con heridas y cadenas, corrieron hacia el lugar de donde provenía todo ese caos.

- ¡Reaper!

No, esperen un momento. Esa voz... Era imposible, no podía ser él. No él. Y sin dudarlo corrió hacia donde venía las explicaciones. Más bien, con las pocas fuerzas que le quedaban, se puso de pie para usar sus poderes de levitación. No, el no podía estar en Reapertale. Si alguien más se enteraba que un mortal estaba en el monte Olimpo no sabía cómo reaccionarían los demás dioses y más con los escándalos que estaba haciendo, solo rogaba que la diosa de la guerra no estuviera por los alrededores; peor el dios de la sabiduría.

- ¡Dust!

Ah, pero inevitable fue llamarle al verlo a lo lejos, dándole una paliza a cada guerrero guardián del Olimpo. Claro, sin matarlos. Solo los dejaba noqueados. Era algo que en el fondo Reaper agradecía, sus clases de bondad habían logrado cambiar ese lado de Dust. O al menos eso pensaba.

- ¿Reaper? -Tan solo escuchar su voz fue lo suficiente para que empezara a correr hacia donde el dios estuviera. Ambos se llamaban, corriendo hacia el otro, ilusionados, emocionados, y entonces, se vieron. Reaper sintió que las lágrimas querían llegar a sus cuencas al ver al asesino y Dust... Ah, él tan solo no lo soportó y se tele-transporto para quedar frente a Reaper para poder darle un fuerte abrazo que hizo que ambos cayeran al suelo– ¡Emo! -Pobre espalda de Reaper.

- ¡Dusty! ¡Tonto! - Lloraba de alegría, no podía creer que estaba en frente del ser que había empezado a amar. Esos días fueron tortuosos para el Dios del no saber nada del asesino, pero mantenía la esperanza de poder encontrase algún día y ese día llegó. Tenía al asesino quién lo abrazaba con fuerza, siendo claramente cuidadoso esta vez de no tacar las partes expuestas del Dios. Aunque igualmente había logrado escuchar un quejido en la parca, logrando que ambos se sentaran en el suelo pero no dejaran de abrazarse.

- ¡Te estuve buscando tantos días! -Y ahí estaba. El único que se había atrevido a venir a su universo en su búsqueda y que ahora le miraba con aquellos "ojos" tan profundos. Si supieran que estaban siendo observados por tantos dioses que no hacían nada al respecto solo porque Gaster les decía que se mantuvieran lejos– Reaper, te extrañe tanto... No vuelvas a irte así..

- ¿Cómo... cómo me encontraste? -Si, estaba alegre por volver a ver a su, em, amigo. Pero la incógnita seguía presente. ¿Cómo había llegado allí? ¿Cómo supo dónde se encontraba? Tantas preguntas y tan poco tiempo para responderlas.

- No se necesita de un genio para saberlo. -<Pero fue más difícil de lo que pensé>, un pensamiento interno hecho por el asesino que por el momento no le contaría a su contrario cómo había logrado encontrarle. Acariciando las mejillas cubiertas en lagrimas del dios, dijo- Pero eso no importa ahora. Vayámonos de aquí. No dejaré que nada ni nadie vuelva a alejarte de mi lado, ¿Comprendes?

Le agradaba la idea de huir de aquí con Dust pero estaba el inconveniente de que justamente casi la mayoría de dioses estaban siendo expectantes de toda esta escena- ... Está aquí. - Susurró mientras miraba a su alrededor hasta encontrarse con la mirada de su creador, el Dios de la sabiduría, Gaster. Seguido estaba Andyne, Alphys, Mettaton, entre otros- O-Oh no..

¿Cómo habían llegado tan rápido? Entre polvo y cuerpos inconscientes, nuestros protagonistas supieron que escapar de aquel universo sería más difícil de lo que parecía. Dioses y asesino, se observaban con rabia. Un momento demasiado tenso, en el cual Dust fue el primero en ponerse de pie, ayudando a la parca en el proceso. Había notado sus heridas y estaba furioso.

- Parece que pasaran un rato desquiciado. ~ 

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Disfruten éste cap <3 
Será dividido en dos partes, muack. Los veo en la segunda parte(?

El comienzo de algo nuevo [ReaperDust] ✔ #WorldSanscest2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora