El comienzo de algo nuevo [ReaperDust] ✔ #WorldSanscest2019

Capitulo 15: Algo especial

- Esta noche podríamos quedarnos aquí y ver una película, no tengo muchas ganas de salir, emo. -Explicaba el asesino de apodo "Dust", terminando de levantar los platos de ambos, donde previamente habían comido un delicioso spaguetti que tanto Papyrus y Dust hicieron. Bueno, realmente solo Dust lo hizo pero ya saben, es esquizofrénico(?

- Me parece bien, polvo. Heh. -Respondió el dios, ayudando a su amigo a levantar la mesa. Ahora que no tenía tanto trabajo podía disfrutar de un buen plato de comida, aunque no lo necesitara, ya que era inmortal.

Después de los previos sucesos donde Reaper estuvo hecho una mora por una hora entera después de ver a Dust semi desnudo, ambos se encargaron de hacer la comida. Mientras Dust cocinaba junto al fantasma de su hermano, Reaper hacía la mesa. Tiempo después, terminaron de comer y lavaron los platos juntos. Papyrus se despidió de ambos, pues ya era muy tarde y según el asesino, debía ir a dormir. Reaper se despidió de aquel "fantasma", siempre le seguía la corriente a Dust. Aún no se atrevía a decirle la verdad y tampoco tenían la suficiente confianza para ello.

Tan solo habían pasado tres meses desde que eran amigos.

El dios, después de que todo ya estuviera ordenado en la casa, se puso a buscar alguna película que ambos pudieran ver esa noche, agachándose frente al televisor. Sabía que el de ropas polvorientas tenía una preferencia por las películas de terror, así que buscaba alguna que aún no hayan visto, hasta que encontró una película de tema "zombies". La sonrisa que hasta hace unos segundos tenía se borró. Zombie...

"Heh, pequeño Zombie"

"¡No me llames así, Reaper!"

"Woops, lo siento Geno~"

¿Por qué tuvo que recordar eso justo cuando buscaba una película con la que divertirse y pasarlo bien? Agradecía que Dust estaba contándole un cuento a su hermano, porque así éste último no podría ver la actual mueca de tristeza que se le había formado al dios. Debía admitirlo, extrañaba al determinado. Su carácter, su sonrisa, la forma en que le hacía sentir acompañado... Apretó los puños, encogiéndose de hombros un momento, intentando no soltar lagrimas. Pues había escuchado como una puerta se cerraba y ese seguramente era Dust saliendo del cuarto de su Papyrus. Respiró profundo y puso la sonrisa más falsa que tenía. Entonces, el asesino apareció frente a él.

- Paps ya se durmió. ¿Encontraste alguna película para nosotros? -Mientras decía esto, miraba la película que tenía Reaper en manos y notó que era una de zombies, cosa que le causó una sonrisa floja- Heh, esa me gusta.

- Oh... Bueno, podríamos verla... -Realmente no quería. Le recordaba a Geno y ya estaba con los ánimos algo bajos. Dust no era tonto, notó eso. Como la voz de Reaper estaba más grave, baja y su sonrisa...esa sonrisa... No le daba buena espina.

- Hm, claro. Ponla entonces, iré por las palomitas.

El dios asintió y la colocó en el DVD mientras Dust buscaba las palomitas dulces para ambos. Luego de eso, se los pudo ver sentados en cada punta del sofá del dueño de la casa, quien curiosamente se encontraba comiendo la barra de chocolate que Reaper le regaló. En todo el trayecto de la película, había veces que Murder soltaba algunas risas por como los protagonistas iban muriendo y se lo mencionaba a Reaper, pero cuando le veía notaba que el dios a penas y estaba prestando atención a dicha película. Se encontraba abrazado a sus piernas, mirando a la nada.

Y es que, estaba pensando en todo ese tiempo que pasó junto a Geno. Como bromeaba con él, las veces que pudo abrazarle, la calidez que sentía al estar a su lado, y todos esos recuerdos le traían un fuerte dolor en su pecho. Exactamente en su alma. Le extrañaba. Quería verlo. Tanto tiempo había pasado ya desde que no le veía, desde que escuchó que su amado le odiaba. Porque sí, aún seguía siendo su amado, no le superaba.