Su camino era apresurado, iba cruzando portal por portal con rapidez puesto de su universo al del esquizofrénico habían muchos universos en medio. Miedo. Eso era lo que recorría todo su cuerpo en aquellos momentos además de la adrenalina. Miedo a que esa sensación en su alma se hiciera más fuerte. La sensación de un alma que esperaba a ser cosechada. Con todas sus fuerzas deseaba que no fuera Dust, que estuviera equivocado. Incluso sentía que las lagrimas se asomaban amenazantes.
<Por favor, Dust. ¡Resiste! ¡Ya estoy en camino!>
La desesperación se hacía dueño del dios de la muerte. Un último portal fue abierto, Dusttale se hizo camino y entonces, comenzó su búsqueda. En Hotland no encontraba indicios de que Dust estuviera cerca, para colmo el hecho de ver tanto polvo solo le causaba más paranoia. ¿Y si una de esas montañas de polvo era su querido amigo? No quería ni pensarlo. Con más velocidad, usando sus poderes de levitación y transportación, terminó de recorrer aquel mapa de fuego para trasladarse a Waterfall. Más y más búsqueda, cruzando ríos, cascadas, campos de flores y aún nada. Empezaba a desesperarse al sentir que la sensación se hacía más fuerte.
<No, no, no, no, no, no>
Era lo que pensaba con más repetición, deseando, suplicando a cualquier fuerza que nada le haya pasado al asesino. Cuando Waterfall terminó de ser explorado y se dio cuenta que Dust no estaba allí, continuó por Snowdin, yendo a la casa del asesino, donde entonces con mucho miedo pudo ver como el lugar estaba destrozado. Sus huesos temblaron, quedó boquiabierto, el frío le envolvió. Se había quedado en shock al ver aquel desastre. Notó debajo suyo que habían unas pisadas y empezó a seguirlas, siendo sigiloso esta vez puesto que cada vez que avanzaba más, se encontraba con más destrucción. Casas destruidas, marcas de ¿Cortes? Y eran grandes, como si fueran hechas por una especie de espada gigante. Pero tenían la forma del corte de un cuchillo. También notó ataques de huesos destrozados en el suelo.Siguió avanzando hasta encontrarse con el puente que conectaba los bosques de Snowdin al pueblito en el que estuvo, roto. Eso fue un indicador para saber que cualquier batalla que haya había en el pueblo de Snowdin, continuó en el bosque. Se elevó hasta llegar al bosque y allí empezó a buscar con más rapidez, intentaba perder el menos tiempo posible. Empezó a llamar casi en voz baja al asesino para ver si alguna respuesta obtenía pero fue entonces que llegó a una parte del bosque, donde logró ver un cuerpo tirado contra un árbol, cubierto en sangre y heridas. No... No podía ser él... Tenía que ser una mala broma...
Porque mientras más se acercaba, más lograba divisar aquel cuerpo hasta lograr verle por completo y el horror fue tal que tuvo que tapar su boca con sus manos para evitar soltar un grito. Era Dust, moribundo, aquel cuerpo cubierto de heridas ya no tenía salvación. Pero aún respiraba... O al menos, su pecho tenía leves movimientos de demostrar eso. Se acercó más y le miró con lagrimas en sus cuencas. El asesino, que estaba con sus "ojos" cerrados, los fue abriendo lentamente, con pereza y al notar una figura delante suyo, a penas y pudo dirigir la vista hacia Reaper.
- Dust...
- Rea..per...
- Shh, no hables por favor...
- Heh... sabía que....te vería...una vez más...
- ¿Estabas esperándome...? -Las lagrimas se hicieron más gruesas al escuchar a su contrario. ¿Sabía que iría a por él? ¿Para cosechar su alma? Si. Y eso le dolía.
- Si... Y te tardaste... -La voz del asesino era entrecortada, el polvo mezclado con sangre estaba por todo su cuerpo en forma de manchas o hilos que caían de su boca. ¿Quién? ¿Quién pudo herir a alguien tan fuerte como el esquizofrénico de tal forma?
Si nos fijábamos más tiempo y en detalle en las heridas del asesino, podíamos ver que incluso varias de sus costillas estaban rotas por culpa de unos agujeros grandes que le habían hecho a su pecho, justo donde estaba su alma. Fracturas, cortadas, sangre. Reaper no podía con tanto. Quería matar con sus propias manos a aquel que allá esto.
- Quién... Dime quién te hizo esto y lo haré pagar...
- No... Tú... tienes que irte... -El dios le miró con credulidad- Ellos están buscándome... si te..v-ven... te harán daño..
- ¡No me importa! ¡No puedo dejarte así! ¡Merecen ser castigados! -Leves temblores se apoderaron del cuerpo del dios, quien había empezado a llorar mucho más que antes. Sus deseos de abrazar al asesino, sin importarle mancharse de sangre, eran fuertes pero eso solo adelantaría la muerte de aquel al que tanto quería.
- ¡Reaper! -El de túnica miró con sorpresa al asesino al escucharle casi gritar su nombre. Dust tuvo que hacer un gran esfuerzo para lograr pronunciar bien su nombre pero eso provocó que empezara a toser más sangre- Agh! G-Ghg...
- N-No... ¡Resiste, por favor! -Con mucho cansancio, después de poder regular su respiración, Dust miró al dios de forma suplicante.
- Vete ya... Nightmare vendrá pronto... Me las arreglaré...
¿Nightmare? ¿Nightmare había hecho todo esto? Esa fue la gota que rebalsó el vaso de Reaper, quién empezó a sentir una furia que nunca antes había sentido en su vida. Una furia que le decía que debía ir a por aquel ser de oscuridad y matarlo a como de lugar por sus actos malditos. Cerró sus cuencas con fuerza y empezó a limpiarse sus lagrimas bajo la mirada del asesino. No lloraría más. Se había hartado de llorar. Demostraría el tipo de dios que era. Demostraría al mundo que nadie debía meterse con él ni con sus seres queridos. Observó el HP de Dust una vez más.
0.1/99 HP
Con paso cuidadoso se puso de pie, procurando no tocar a su contrario y sostuvo su hoz con fuerza antes de que un portal se abriera frente a ellos y de allí salieran Killer!Sans junto con Cross!Sans listos para atacar. Habían llegado en busca de Dust y el dios lo sabía.
- Los haré pagar por esto. -Les dijo, igualmente preparándose para atacar, quedando frente a frente de los secuaces del rey de las pesadillas.
Porque nadie puede escapar de la irá de la muerte.
Continuara
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El comienzo de algo nuevo [ReaperDust] ✔ #WorldSanscest2019
Hayran KurguDos esqueletos de dimensiones diferentes. Uno, un dios. El otro, un asesino. ¿Qué sucederá cuando ambos se encuentren? Para Dust, el dios solo era otra abominación que nació de los diferentes Au's del multiverso. Para Reaper, Dust era otro problema...