Eres mía y yo tuya (Supercorp)

El sentimiento del poder

Peligro. Era imposible que yo estuviera en peligro, no había hecho nada malo, no había molestado a alguien.
Clark no había querido seguir diciéndome nada, solo se limitaba a conducir en silencio. Estaba poniéndome impaciente, si de verdad estaba en peligro debería decirme que es lo que sucedía no podía dejarme en suspenso.

—Clark.—él apretó el volante, tal vez comenzaba a cansarlo, llevaba preguntándole lo mismo cada dos minutos—¿Que es lo que sucede?

—Ellos vienen tras de ti.

¿Ellos? Quería preguntarle quiénes eran ellos, pero sabía que lo molestaría más con mis preguntas. El auto dio un giro rápido haciendo que yo me moviera para un lado, Clark estacionó el auto en lo que parecía ser el bosque.

—Vamos.—desabrochó su cinturón y bajo del auto—No tenemos tiempo que perder.

Imite sus acciones, comenzó a andar por el bosque sin ningún problema, el respiro hondo como si se sintiera liberado de alguna forma y tal vez lo hacía, estando en su "habitad". Tras dar unos pasos llegamos a un pequeña casa de acampar junto a una fogata apagada.

—¿Tú has estado viviendo aquí?

El asintió—Vine a buscarte, e vivido casi toda mi vida en el bosque con mi manda y no era momento de buscar un hotel o algo parecido.

—¿Ahora podrías explicarme quiénes son ellos?

—Es una manda, su nombre es Glittering Moon—usando su súper velocidad entro a la casa de acampar—Es la manda más fuerte de las pocas que quedan.

Un dolor de cabeza hizo que cerrara los ojos con fuerza, un sonido agudo retumbaba en mis oídos pero de un momento a otro el dolor desaprecio. Dejándome un poco aturdida, Clark salió y me extendió una hoja; era un mapa, donde señalaba un gran círculo y en el centro el nombre de Glittering Moon.

—Todo eso es su territorio.

—¿Y porque están tras de mi?

El me miró indeciso. Luego pasó saliva, agudice mi oído, podía escuchar su corazón latiendo rápidamente.

—Te quieren muerta.

El peso de esas palabras me tomó desprevenida, no podían quererme muerta, no había hecho nada malo. Apenas y sabía de mi especie, había estado viviendo mi vida como una humana normal.

—Pero...pero ¿por qué?—sin darme cuenta estaba sujetando el mapa con demasiada fuerza.

—Porque eres más poderosa de lo que crees.

—¿De que estás hablando?

Él seguía moviendo cosas de lugar, no tenía sentido nada de lo que estaba haciendo.

—No estás lista para saber todo esto.

—¿Podrías explicarme de que estás hablando? Me estás diciendo que me quieren muerta pero no estoy lista para saberlo. Si de verdad estoy en peligro dímelo, ¿que es lo que está sucediendo?

—El alfa de la manda te ve como una amenaza.

Yo no podría ser una amenaza hacia él, ni siquiera sabía nada de ellos hasta hace unos minutos. Trate de darle sentido a las palabras de Clark, que podía hacer al saber que alguien quiere matarme.

—¿Qué fue lo que hice?

El me miró con lastima, se acercó a mi tomándome de los hombros.

—Nada, tú no hiciste nada Kara.

Sacó su celular de su bolsillo marcando a no sé quién. Solo escuche monosílabos salir de su boca, contestaciones cortas y breves. El corto la llamada y siguió guardando cosas en una mochila.