Lo encontraron

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POV Lena

—En la mañana siguiente—

Sentí un movimiento lento debajo de mi cabeza, mis ojos se sentían mas pesados de lo normal. Me aprieto más contra el colchón o eso trate, pues lo que sentí de bajo de mi era mucho más duro, no podía ser mi cama. Sentí una mano por mi espalda apretándome más contra ella, ahora reconocía, un cuerpo.

—Mmm—escuche un pequeño quejido y eso fue todo lo que necesité para despertarme del todo.

Apoye una mano en el colchón para poder ver a Kara enredada conmigo, ella seguía respirando lentamente sin percatarse que yo estaba despierta. Tal vez ella tampoco recuerda haberse quedado dormida, lo único que podía recordar con completa claridad era lo sucedido en el lago.

El solo pensamiento causó que me llevara una mano al cuello tocando la marca reciente en mi, que aún se sentía tan fresca. Kara volvió a soltar un gruñido y después abrió los ojos de golpe levantándose de un salto, casi hizo que nuestros rostros chocaran.

—Hola...—murmuró con una sonrisa boba, su rostro a centímetros del mío.

—Buenos días—Dije con toda la intención de que se diera cuenta de nuestra posición—Llegaremos tarde al instituto.

Mis palabras fueron lentas pero eso no quito la confusión que se reflejó en el bello rostro de mi novia.

Kara cerró los ojos con el ceño fruncido tratando de analizar mis palabras y hallarles el sentido. Parecía estar aún muy dormida como para entender cualquier cosa. Tal vez podría decirle que nos casamos ayer y ella lo aceptaría porque no entendería que estaba sucediendo.

—¿El instituto?—se rascó la cabeza—¡El instituto!

Me tomó de sorpresa como me tomó entre su brazos y me cargo un poco para dejarme a su lado en mi cama. No iba admitir que rápidamente extrañé su calor e iba a decirle qué tal vez era mejor quedarnos solas en mi casa.

—¿Puedo ducharme aquí?—asentí mirando como ella caminaba hasta la puerta del baño aún desnuda. Ella frenó sus pasos antes de cerrar la puerta—¿También podrías prestarme algo de ropa?—Volví asentir pero ella no se movió, solo continuo mirándome—¿Es mala idea si nos bañamos juntas?

Me dio la tentación de decirle que no, que en realidad era una maravillosa idea pero no teníamos tiempo para más toqueteos entre nosotras, así que asentí. Ella hizo un puchero pero entendió, segundos después cerró la puerta a su espalda.

Mire mi cama y me dieron ganas de dormir por un rato más, pero no, tenía que ir al instituto. Esa era la única razón por la que no estaba compartiendo una ducha caliente con Kara. Me estire lo mejor que pude y comencé a tender la cama y a sacar ropa para Kara. Decide llevarme ropa al baño de la casa y yo bañarme ahí, así podríamos estar listas casi al mismo tiempo.

No espere que moverme de un lado a otro causará tanto cansancio en mi, no quería sacar conclusiones pero sospechaba a que se debía al día anterior.

Tampoco espere que sepárame de Kara tan solo por unos minutos me doliera como si no la hubiera visto en años. Pero su ausencia era rápidamente captada por mi cuerpo, y me hacía sentir sola y vulnerable.

En el momento en el que llegue de nuevo a la habitación y Kara parecía estar esperándome con el conjunto de ropa que le había dejado en la cama y unos tenis deportivos que parecía que era lo único que tenía en mi closet que podía calzar y con una sonrisa ladeada me hizo sonrojar.

—Supongo que no tenemos tiempo para desayunar verdad—Sabía que lo decía de broma pero mi estómago dio un rugido—Parezco no ser la única con hambre aquí.

Eres mía y yo tuya (Supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora