Capítulo XLIII

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POV LISA

- Lis, despierta, tienes que comer algo o enfermarás - algo besó mi frente con cuidado para despertarme de la manera más tierna posible.

- Taehyung... - murmuré.

Esa cosa quiso fastidiar mis sueños y me besó esta vez en los labios.

- Cariño - hablaron entre el beso -. Vamos, la Taeconda te necesita ahora.

Esa voz era tan malditamente ronca y sexy que la piel se me erizó por completo y casi me dejo llevar por escalofríos.

- Vamos, Lis - los besos siguieron hasta mi cuello, dejando varias marcas que se quitarían con el tiempo -. Despierta.

- Mmmh, Taehyung - murmuré -. No pares, por favor...

- Creo que Lis ya despertó - rió Tae -. Vamos, hay que irnos a comer.

- Pero, Tae...sigue...

- A comer, dije. Como no te levantes a la cuenta de tres, iré abajo y te quedarás aquí sola.

Hice un puchero y me levanté, y me quedé mirando a Tae como si fuera la persona más malvada de la historia. Después me cogió del brazo como si nada hubiera pasado y estuvimos bajando juntos las escaleras.

- Oppa...

- ¿Sí, pequeña?

- ¿Tú...me quieres mucho y...confías...confías en mí?

- Pues claro, te amo y confío en ti ciegamente - sonrió, y sentí un poco de vergüenza por sus palabras bonitas -. ¿Por qué lo decías?

- Nunca hemos tenido...relaciones, ya sabes...eh...

- Eso es por varias razones: la primera, no solo estoy contigo para tener relaciones. La segunda: yo confío en ti de una manera tan ciega que no te puedes imaginar, pero no sé si tú confías en mí de la misma forma. La tercera: no quiero hacerte daño, quiero hacerlo sólo si tú te sientes preparada. La cuarta: no seas impaciente, aún no he comprado protección y no me gustaría que tú tengas que controlarte mediante anticonceptivos, me parecen unas píldoras antinaturales que afectan a tu salud. De momento tenemos que esperar, pero si realmente quieres, sólo tienes que decirlo.

Asentí con una sonrisa de confianza, yo confiaba plenamente en él pero no podía poner peros a todas esas palabras bonitas que él me dedicaba.

- Lis... - me llamó, yo le miré -. ¿Eres...ya sabes...virgen?

- No, no lo soy.

- Oh...de acuerdo.

Parece que eso le dolió, pues bajó la mirada un poco entristecido y empezó a golpear con un dedo de la mano desocupada su pierna.

- Pero no te pongas triste - sonreí -. Aquel idiota no fue mi primera vez, porque yo no lo amaba. Me obligó a tomar para tener relaciones con él. Mi primera vez será contigo, porque yo sí te amo y estoy segura de que tú eres el indicado.

- Gracias por eso - dijo también sonriendo -. Yo también estoy seguro de que tú eres la indicada.

- De nada, oppa.

Reímos como estúpidos y finalmente nos sentamos para comer algo.

[...]

Eran justamente las ocho menos cuarto, Tae y yo estábamos terminando de ver una película. Yo reposaba en su hombro, pues me sentía verdaderamente cansada.

- Lis, tienes que irte, casi son las ocho y antes me llamó tu padre con tono enojado diciendo que te quería en casa antes de las ocho.

- Mi padre es todo un caso perdido

Destino  -  Jenkook -  [ CONCLUIDA ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora