Destino - Jenkook - [ CONCLUIDA ]

Capítulo XXIV

POV JUNGKOOK

Al fin pude abrir los ojos, lo primero que vi fue a Jennie viendo la televisión mientras daba suaves caricias en mi pelo. Llevé mi mano a la suya y la palpé, indicando que ya había despertado.

- ¿Te duele algo? - me preguntó, mirándome a mí esta vez.

- No, simplemente ya desperté - mi voz salía ronca, había descansado bien.

Llevó una mano a mi garganta y la masajeó, ella también notaba mi rara voz.

- ¿Quieres medicamentos? - me preguntó, centrando de nuevo su mirada en la televisión.

- No.

Alcancé a ver la hora en el reloj de la pared, eran las siete menos cuarto, y mi madre volvía a casa esta noche, debía irme.

- Tengo que irme a las nueve a mi casa - dije triste, en verdad estaba de maravilla aquí.

- No pasa nada, te doy mi número si quieres hablar un rato.

- ¿Lees mentes? Te lo iba a pedir más tarde.

Rió suave y pestañeó doble para volver a concentrarse en la película.

- Tienes sueño, ¿verdad? - cuestioné en voz baja. Ella asintió.

Me levanté de sus piernas y la cogí en brazos para sentarla encima de mis piernas. La recosté en mi pecho para que se durmiera y abracé todo su cuerpo contra mí.

- Duerme lo que quieras - le susurré, ella estaba adormilada.

POV LISA

Me sentía mal, muy preocupada por Taehyung. ¡No debía estarlo! Él me besó y se lo merece. Exacto Lisa, esa es la actitud.

Ahora habíamos quedado en casa de Rosé (que vive más cerca de Jennie) para irnos todas a casa de Jen y darle una sorpresa. Nos iríamos al centro comercial a comprar algo o a tomar algún café.

- ¡Chicas, llego tarde! Lo siento mucho - no sé cómo se las arregla Hyuna para llegar siempre tarde.

Partimos hasta la casa de Jennie, en verdad era muy grande, y llamamos al timbre y una señora, su madre, nos abrió.

- Hola, chicas. Pasad, Jennie está en el salón.

Sí, ella debía estar en el salón, porque las luces de la televisión se veían un poco por la puerta. Giré el pomo con cuidado y entramos todas, pero cuando vimos lo que había dentro, se nos quedó la cara hecha un cuadro.

Allí estaba Jennie, envuelta entre los brazos de Jungkook. Está estaba abrazada fuertemente a él y él también abrazaba su cuerpo proporcionándole calor.
¿Qué diablos se traían esos dos? Ya decía yo que se sonrojó mucho cuando empezamos a hablar de Muscle Kook y cuando él exhibió sus músculos del brazo y del abdomen.

- ¿Eh...hola? - Jihyo tan oportuna como siempre.

Jungkook dejó de mirar como un tonto la televisión y nos miró a nosotras aún más atontado. Jennie dio un pequeño bote sobre él y subió la cabeza para vernos.

- ¿Interrumpimos algo? - dijo Rosé, aguantando su risa.

- Pues...no, claro que no - Jennie nos respondió con la cara más roja que todos los tomates del mundo.

Ni se separaron, ya sabía yo que estos dos se traían algo entre manos.

- Esto sí que no me lo esperaba - rió Jungkook, estaba notablemente avergonzado.

- Veníamos a decirte que si te apetecía salir un rato al centro comercial, pero parece ser que tienes planes con tu...novio - Hyuna se lo pensó antes de decirlo.