Destino - Jenkook - [ CONCLUIDA ]

Capítulo XXXV

Cuatro meses después...

POV JUNGKOOK

Era jueves y ya íbamos a empezar el segundo trimestre. El sonido del despertador me hizo abrir los ojos, pues tal era su intensidad que el sonido me retumbaba en los oídos unos segundos. Fruncí el ceño y abracé contra mí la almohada, pues el hábito de dormir con Jen aún no se me había ido. Me levanté con dolores en la espalda y me aseé rápido, pues iba un poco justo de tiempo. Hice la cama con prisas y dejé el pijama al lado de la almohada. Me puse rápido los pantalones del uniforme y busqué a tientas la camisa, pero no la encontré. Me acordé de que ayer por la noche la dejé en la lavadora para que mi madre la lavara, así que fui a por ella.

- ¡Buenos días! - saludé a mis padres, quienes estaban desayunando con prisas porque también tenían trabajo temprano.

- Hijo, ¿qué te dije de hacer ejercicio? - regañó mi padre al verme sin camisa.

- No puedo evitarlo, papá - reí, y me puse deprisa la camisa y subí por la corbata.

Me la até rápidamente y me coloqué la americana del uniforme. Ya listo, fui a peinarme un poco más y cogí la mochila. La colgué en mi hombro tras ponerme el abrigo y cogí algunas galletas de la cocina antes de irme al instituto.

Salí y dirigiéndose hacia mi casa estaba Jin hyung, quien iba acompañado de Rosé y Jen. Los tres me saludaron con la mano.

- Hola, Kookie - me dijo mi hyung cuando llegué junto a ellos -. ¿Estudiaste para vuestro examen de Historia del Arte?

- ¿Hay examen de Historia del Arte? - grité, asustado, y todos empezaron a reír.

- No, tontito, no hay examen - rió Jen, y todos volvieron a reír.

- Eres muy inocente, como un niño de cinco años - agregó Rosé, picando mi mejilla, y Jen le dirigió una extraña mirada.

- Es un niño de cinco años - aclaró hyung, a lo que volvieron a reír otra vez y después dejamos las bromas de lado y fuimos camino al instituto.

Yo no hablaba mucho, no era muy hablador, así que decidí guardar silencio durante todo el trayecto, escuchando las historias de mis tres amigos.

[...]

Ya visualizábamos el bloque donde recibíamos clase de lejos, yo me asombré porque lo habían reformado y habían puesto muchas pancartas de colores alrededor del mismo. Nos dimos un poco de prisa puesto a que algunos alumnos empezaban a entrar en el edificio, y además faltaban cinco minutos para que el timbre sonara.

Entramos en el recinto escolar y, en un árbol cercano a la puerta de entraba, estaba Dara, mi ex, con su grupo de amigas chismosas y pegajosas. Sentí un pequeño pinchazo de dolor cuando me miró y me sonrió como su fuéramos amigos de toda la vida. Yo no devolví la sonrisa, sino que desvié mi vista y seguí escuchando los relatos de mis amigos.

Cuando llegamos al tercer piso, es decir, el nuestro, Jin hyung y Rosé tomaron un camino y yo otro junto a Jen.

- Oye, ¿qué te pasa? Luces triste - preguntó Jen, haciendo que la mirara.

- No es nada, noona - le resté importancia con un pequeño gesto, pero ella no pareció muy convencida.

- ¿Estás seguro?

- Sí, estoy seguro.

Acarició ligeramente mi mejilla con dos de sus dedos antes de irse a sentar con Jisoo, quien ya estaba allí. Yo me senté al lado de Jimin, quien me saludó alegremente y estuvimos hablando sobre videojuegos hasta que el profesor llegó.