Jeon Jungkook, 23 años, recién graduado de fotografía con un excelente trabajo que le había ayudado a comprar uno de los mejores apartamentos de Seúl.
Su vida era perfecta y sin preocupaciones, o eso le había hecho saber a su madre para que dejara de preocuparse.
Lo cierto era que luego de regresar de Canadá, país en donde estudio su carrera universitaria, el chico no había tenido tanta suerte como había creído y no era porque él fuera malo o no diera la talla, simplemente no encontraba una empresa que realmente le gustara así que decidió hacer su pequeño negocio, repartió su tarjeta de presentación en todas partes, creó una página oficial para que pudieran apreciar su trabajo y fue como así, poco a poco pudo establecerse sin ser una carga para su familia.
Pudo encontrar un apartamento, bonito, acogedor y barato.
Todo parecía pintar bien los primeros meses, hasta que se dio cuenta que en su cocina faltaba comida, no era de pasar mucho en aquel apartamento, después de todo se había inscrito en un taller de artes plásticas y pasaba más entre eso y su trabajo temporal pero un día en la noche, buscando que comer para luego descansar se había dado cuenta de lo que había estado sucediendo.
Si él dejaba trozos de pizza, al día siguiente desaparecerían de su refrigerador, si dejaba algún caldo sobre la cocina, encontraba la cacerola hasta brillando y no por que quién sea que entrara a su casa los limpiara, más bien porque al parecer el hambre que traía siempre debía de ser inmensa como para dejar barrido los utensilios.
Se dio cuenta que al parecer la ventana de su habitación no cerraba correctamente, de hecho los primeros días no le dio importancia pero mediante el clima cambiaba en la ciudad había tenido que forzarla para poder cerrarla correctamente ya que suponía que esa era la entrada para su invitado no deseado.
El departamento era solo de un piso, contaba con dos cuartos, cada uno con un pequeño baño, la cocina, baño social y sala. Se encargó de cerrar todo con llave y aún así su comida desaparecía. Jungook estaba pensando seriamente que se debía de tratar de algún fantasma.
Ya sea que se tratara de algún ladrón, animal, fantasma o lo que sea, Jungkook lo atraparía, ya sea que necesite contactar a la policía, control animal o sacerdote.
Luego se daría cuenta que después de todo, tal vez no había sido una buena idea dar con el responsable que se convertiría en su perdición.
🐾🐾🐾🐾
Hola mis amores, aquí vamos de nuevo, empezando de cero.Espero le sigan dando mucho amor los te quiero 💕
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Lovely -Kookmin-
Fanfiction-Jungkook aprenderá a no dejar la ventana de su cuarto mal cerrada, si es que no quería seguir teniendo visitas no deseadas. ***** Kookmin❣️ Temática de híbrido 🐈 Jungook activo Jimin pasivo