Tiempo de Ocio

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Sin duda fue un día complicado, demasiadas emociones solo con una platica, se quedó sentada un rato más y luego decidió volver a su casa temporal.

Se toparon a medio camino la sonrisa sincera de felicidad por encontrarla era más que radiante, verlo vestido de civil era algo extraño, pero no negaba que el atuendo le quedaba de maravilla.

-Me permites acompañarte? — hizo una leve reverencia entre formal y amistosa burla moviendo su cabellos rojizo.

-Sería un honor — respondió de la misma manera bromista.

Emprendieron rumbo desconocido, de pronto el volver a casa no parecía agradable por el momento.

-Que te ha parecido la aldea? — realmente tenía curiosidad por su respuesta, después de todo un país y en general un mundo militar, seguro era intrigante para él.

-Es un lugar agradable, las personas son amables pero también desconfiadas y siempre están en alerta, en especial con extranjeros, aun así nunca había visto un lugar así de pintoresco me gustaría tener más tiempo para conocerlo e incluso poder viajar a las otras aldeas de las que nos habló Shikamaru-san — todas sonaban igual de misteriosas e interesantes.

-Incluso cuando viví aquí no tuve la oportunidad de conocer las otras naciones — la tensión que existía entre los países no permitía entrar y salir con libertad de ellas — pero si conocí pueblos pequeños y agradables — Esperaba que las buenas personas con las que se topó estuvieran bien.

-Por lo que veo no tenias ese espíritu viajero entonces? — hubiera pensado que era igual en la otra vida.

-No, solo me concentraba en mis ocupaciones en el hospital, las misiones y en... — pensar como traer de regreso a Sasuke — Bueno, luego también en los preparativos para la guerra.

-Moriste demasiado joven... — un suceso lamentable y triste — ahora que nos conocemos yo, creo que no hubiera podido reponerme de algo así — el solo pensar lo que pudo haber pasado en Magnosttand seguía helándole la sangre.

-Muu, nadie es indispensable en nuestras vidas — sonaba duro pero era la verdad — así es el ciclo de la vida y por más que nos duela despedirnos de alguien, la vida sigue — Naruto, Sasuke y todos continuaron sin ella.

El fanalis le tomó delicadamente la mano deteniendo su andar y quedando frente a ella que lo observaba un tanto desconcertada.

-Yo no quiero que mi vida siga sin ti — le acaricio la mejilla y ante el contacto suave de su piel, Sakura cerro los ojos dejándose llevar acunando su rostro.

-Y si... si yo — abrió los ojos conectando sus miradas — decido quédame?

El silencio los rodeó, no lo había decidió pero existía la posibilidad. Muu no dejaría su hogar, amaba demasiado a su país y a su gente.

-Si es lo que quieres — se acercó hasta unir sus frentes — Entonces yo también me quedaré.

No existía duda o vacilación en sus palabras, si, Muu quería a su nación y se sentía orgulloso de ello, pero... a ella la amaba con una mayor intensidad.

-Han pasado mucho cosas Muu, apenas pasamos poco tiempo juntos luego de conocernos, y al final siempre terminamos distanciándonos.

-A sido el tiempo necesario para que te apoderaras de mi — pero que había de ella? — Se que quizá no soy yo quien esté en tu corazón — y eso dolía — pero si no es así entonces... déjame estar contigo, se que Titus podrá cuidar de todos sin mi — las últimas palabras del magi rubio retumbaban en su cabeza "Scheherazade- san quería que fueras feliz Muu, ve y lucha por ella" — sin importar lo que suceda de aquí en adelante, respetare tu decisión.

Magi - Princesa Shinobi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora