Era un Martes 7...

Reinicio

-Bueno, soy Thefany, su nueva maestra de robótica.

-Mierda.-susurré.

Iba a empezar todo de nuevo, lo cual no me sorprendía porque era muy sociable, pero me resultaba cierto extraño. Normalmente me enviaban a cursos para reforzar ciertos temas o simplemente me dejaban vagar libremente por toda la casa durante dos meses de puras vacaciones. Este año sería diferente y ya expliqué la razón.

-Yo soy Yuriko.

-Yo Fabiano.

-Yo Rose.

-Yo... (suspiro) Yo soy David.

Otra vez en clases.Estaba en otro colegio y me resultaba genial poder pasear por otro patio, otros baños, otro lugar, otro contexto; y sobretodo, nueva gente para conocer.

-¡Deja eso ahí y no me golpees!

_¡No, tú deja de molestar y de pegarme!

+A ve,r a ver, a ver; suaaavee. ¿Qué pasó?

--Quiere quitarme el cuaderno.

_Es mío.

-¡¡¡NNNOOO!!!

_¡¡¡QUE SÍÍÍÍ!!!

+Waaiiitt!!

Pasaba por la vereda al momento del receso y me encontré a dos hermanas peleando por un libro. En cierto modo, parecían gemelas, pero se llevaban 3 años de diferencia.

+Soy David.

-Yo Stefany.

_Yo Lucy.

+Ya, dejen de discutir, no soporto ver a gente así, siento que se ven como tontos; como seres que no razonan y todo lo ven a los golpes y a gritos. (El burro hablando de orejas, dijo mi subconsciente.)

-Okokok.

_Ok.

-Te lo devuelvo.

_Gracias.

+¿Lo ven?

A veces, cuando me ponía serio, podía hacer que las personas hicieran lo que quisiera. Era como un mini-don que tenía y que se activaba cuando se le daba la reverenda gana.

Ese día hice nuevos amigos, pero casi nadie tenía esa chispa que no puedo explicar.