Era un Martes 7...

Camino...

-Vas de mal en peor.

-Lo sé.

-Es que, no lo entiendo, ¿por qué insistes en eso? Ya pasó. Ya fue.

-No bro, no lo entiendes. Es mucho más que eso.

-... Bueno, si tú lo dices...

-...

-...

-Anthony... ¿Qué pasó después de que se fuera?

-Al igual que todos, no logro recordar con exactitud los hechos. Pero sé que no dejaron de hablar. Creo que intentaron su "Relación a distancia".

Al rededor de dos meses habían transcurrido desde que se fue. Sarah me contaba todo lo que le pasaba cada que se conectaba. A veces le iba bien, y a veces mal. Trataba siempre de darle ánimos.

El parte iba a solucionarse pronto, o al menos eso creía.

Todo llega a su final. Pero al menos puedes disfrutar de todos los recuerdos.

Hubo una canción, la cual escuchaba desde hacía ya tiempo, pero logré entenderla por completo.

"...Anoche mientras dormía bajó Dios 

y me dijo que vos 

Ya te olvidaste de mí. 

Y sí, gracias a Dios que ya ni creo en Dios 

Así que olvidé su voz y me dormí, para soñarte aquí 

Te veías igual de (ahhh.!), por supuesto 

Juro haber sentido el olor de tu cabello en mi pecho, 

De hecho el cigarro

 Y tu recuerdo amargo 

Es todo lo que dejo siempre y regresa sin embargo, 

Te esperare así no lo sepas 

Así tenga que hacer en forma de "te quiero" miles de caretas..."

Llovía, se acercaba el invierno, y, al parecer, este año sería por mucho, peor que otros. La comprendí, no era culpa de nadie. No podía forzarla a algo. Siempre preguntaba si estaba molesto con ella, pero nunca lo estuve. Fue bueno; muy bueno. Así, se terminó algo que inició bueno, y terminó de la misma forma. 

Estábamos de vacaciones de medio año, hablaba con Ellie sobre todo, y sobre cuánto nos parecíamos. Mantenía una relación a distancia un poco parecida a la mía (en algunos aspectos). Solo atiné a desearle suerte. 

Carol intentaba darme ánimos. Siempre trataba de hacerlo, en sí, era algo mutuo. Era de las pocas personas a las cuales le podría confiar sentimientos y emociones.

-Ya, no estés así.

-No te preocupes, estaré bien. Total, no es la primera vez que me pasa.

-...

-Aún así, quisiera conservar la promesa.

-Si tú eres feliz con eso, está bien.

Debía cumplirla, pase lo que pase.

-¿Alguna sugerencia de dónde pudo haber ido?

-Ninguna. ¿En serio no lo recuerdas?

-Nada.

-¿No tienes algún contacto cercano de ella?

-No lo sé.

Investiga pues.

Media hora después, hablé.

-Recuerdo que tenía una amiga, a la cual le contaba todo. Creo que era algo así como "Margaret"...

-No lo sé.

-Creo que sí. Espera... Mmm...

Pasaron y pasaron los minutos...

-¡La encontré!

-¿Y?

-Nada, la conversación pasa normal. Al parecer, ni hablamos de ella...

-Mmm...

-Bueno, aquí hay algo sobre una persona que está lejos, que "extraño". Quizá sea ella.

-Cabe la posibilidad que sí.

-En todo caso, creo que debería hablarle. Pero debemos ir a trabajar, se nos hace tarde; lugo seguimos.

En algún lado, en algún tiempo, alguien espera por ti. Descubrir quién es, es lo más hermoso de la vida. No importa quién seas, todos podemos tener a alguien.

Alguien piensa en ti ahora.

En algún lugar, alguien se desliza rápidamente de entre la gente, con un poco de preocupación que trata de ocultar bajo su característica sonrisa. Entra a una edificio, pregunta un par de cosas a la secretaria y por último, llega a la puerta de una oficina. Intenta arreglarse lo mejor que puede. Respira hondo, e ingresa.

-Buenos días...

-Hola, buenos días. Bienvenida a tu nuevo trabajo, Sarah.