-Otra vez.
Estaba en el mismo instituto en el cual me había instalado las vacaciones pasadas.
Quería saber si Yuriko estaría de nuevo allí.
No lo estaba, pero tenía nuevos amigos.
-Buenos días, alumnos, soy Ana, su profesora de inglés.
-A la mierda.-susurré.
Todo el día pasó con total normalidad. Excepto por el hecho de que ahora, sin razón alguna, estudiaba con chicos un poco menores que yo.
Iban a enseñar guitarra, y, felizmente, me gustaba tocar guitarra. De he hecho, ahora que lo recuerdo, yo compré mi guitarra por una sola razón: Sarah. Sarah tocaba guitarra y cantaba hermoso. Era perfecta. Lo tenía todo: Era bonita, comprensiva, cantante, buena luchadora, tenía argumentos de abogada, era celosa, tenía cualidades y defectos, era humilde, sincera, amable, solidaria, era... Sarah. A veces me pregunto cómo fue que se fijó en alguien como yo.
Pasaron los días, y empecé a destacar de entre los demás por mi habilidad con la guitarra y me eligieron para formar parte de un pequeño show que se realizaría el día de clausura de vacaciones.
Practiqué y practiqué para ese día.
-Hola, soy Selene. Por si no te has dado cuenta aún, estudio en el mismo colegio que tú.
-Hola. En primera, soy David. En segunda, ¡¿qué demonios?!
-Sip, estudio contigo.
-Pero si nunca te he visto.
-Ah, es porque soy un año menor que tú.
Un chico entra y grita:
-¡¡¡¡¡PPPPeeeeeddddóóóóóóófffiiillloooo!!!!!!!!!
-¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿WWWTTTTFFFFF????!!!!!!!
Todo el día se la pasaron molestando de que yo quería algo con la chica.
-Aquí vamos de nuevo-pensé en ese entonces.
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Era un Martes 7...
RomanceHace mucho tiempo que no recuerdo esto, hasta creo que olvidé el día. Pero había algo en esa historia que me dejaba un poco confuso, algo que me hacía rememorar lo que pasó una y otra vez...
