Creo que ya es hora de hablar sobre esto.
Es hora de enterrar las cosas del pasado.
Desde pequeño, cuando tan solo iba a inicial, fui diferente. Una enfermedad de nacimiento. No me mataría, pero sería constante. Tenía una cura, pero llegada hasta cierta edad, ya no la habría. Yo me mantenía lejos de los demás para no incomodarles, sentía que salía sobrando en todo. Me sentía un pordiosero.
De pequeño, era un poco obeso. El peso que te hace que los demás te critiquen por tu forma física. Yo nunca los odié, así me pegaran, así me escupieran. Y no solo era el peso, sino también el color. Mi tez trigeña me hacía una burla caminante. Siempre lo hacían. Nunca los odié.
Mamá me dijo que no les hiciera caso, y le obedecí firmemente hasta el final. Cuando me apartaba de ellos, hacía pequeños bocetos, pequeños trazos, que en un futuro me convertirían quién soy. Le agarré el gusto a la escritura, a la prosa y al verso. Recitaba, cantaba y participaba en concursos. Por más que participaba, nunca ganaba.
-No llores, alégrate. Estás ganando experiencia.
Te amo mamá.
Nunca se lo dije frente a frente, pero ahora es lo que más quiero.
Mamá daba buenos consejos.
"Si ves mis pequeñas ilusiones,
verás miles de caminos,
si oyes mis rimas que canto,
verás que en un segundo te deprimo,
cada vez que escribo versos,
eso pasa muy seguido,
pero no me critiques aún por mi calidad, pues solo soy un niño."
Rimas que hacía cuando era muy chico todavía. Claro, fui creciendo y me volví algo más potente con eso de las rimas. Sobretodo cuando me uní al R.A.P. Cuando batallaba y una que otra vez hacía estallar a la gente.
Mamá era sabia.
Pasé por mucho. Me costó mucho salir de tantas depresiones. Pero, por más que sufría, nunca se lo decía a nadie. No quería que me vieran como alguien débil.No era por querer mostrarme como alguien que soporta todo, que es el más "Macho" de todos; lo hacía porque quería ayudar a los demás. Mis padres siempre me recalcaron que fuera solidario con los demás. Pero no solo ellos, sino también mis hermanos y compañías.
-Ok, te lo diré. Si necesito tanto dinero... es por ella: mi madre.
-...
-Mira, sé que estoy en lo incorrecto, pero quiero que ella mejore. Tú sabes por lo que he pasado, necesito que se recupere. No quiero perderla. Simplemente no podría soportarlo...
-Te entiendo. También he tenido ese tipo de miedo cuando mamá enferma, Barry. Pero no podemos darnos por vencidos. Mira, te voy a ayudar, pero debes hacer todo lo que te diga a partir de ahora.
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Era un Martes 7...
Lãng mạnHace mucho tiempo que no recuerdo esto, hasta creo que olvidé el día. Pero había algo en esa historia que me dejaba un poco confuso, algo que me hacía rememorar lo que pasó una y otra vez...