DS-Capítulo 11

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Al despertar sentí como si regresáramos en el tiempo, como si estuviéramos de nuevo en la gira de la victoria, tratando de ser amiga de Peeta para poder tener una vida llevadera, aunque la situación es distinta, en ese momento no sabía que sentía algo por él, solo quería llevarme bien con Peeta para poder sobrevivir, para que no nos hiciera algo malo el presidente Snow. Ahora es distinto, quiero tener una buena relación con él porque sé que no podría imaginar un futuro en donde no estuviese, que lo necesito y no quiero que llegue a odiarme.

<<¡agh! Esto seguramente es confuso para él y también para mi>> pienso parándome del sofá, me duele el cuello dado que no dormí en una buena posición. Lo miro durmiendo todavía en el sofá, estoy debatiéndome si tengo que despertarlo o simplemente me voy a mi habitación a arreglarme.

-Peeta –hablo en un susurro moviéndole del hombro. –Peeta despierta –sigo moviéndole y solo murmura un quiero dormir. –Ya es de día, tienes que levantarte.

-¿Qué? –pregunta abriendo sus ojos y mirándome. -¿Qué paso? –se talla los ojos.

-Bueno es que ya es de día y... -pienso en que decir por un momento. –Hoy es el aniversario, hay cosas que hacer, pensé en despertarte para que te vayas a tu habitación.

-Mmmm –frunce el ceño mirando la sala -¿Me quede dormido aquí?

-Sí –afirmo mirando hacia el pasillo, me pareció oír algo –nos quedamos aquí dormidos y... bueno yo tengo que empezar mi día, por eso te desperté, creo que estarás mas cómodo en tu cama.

-Ok –dice mirándome fijamente –Lo mejor será que yo también empiece mi día, después de la fiesta regresamos al 12.

-¿Tan rápido? –pregunto sin evitarlo, <<diablos sonó desesperado>> pienso.

-¿Rápido? –interroga alzando una ceja –Llevamos más de una semana aquí, recuerda que Gale...

-Si ya entendí –le interrumpo.

-¿Estas bien?

-Sí, voy a bañarme –digo dirigiéndome a mi habitación.

-De acuerdo –alcanzo a escuchar que dice Peeta en voz baja.

Toda esta fiesta hace que me sienta mal, recordar todo lo que paso en esa estúpida guerra no me gusta, además hace que me acuerde de los juegos y mis pesadillas se hacen peores. Aunque la noche anterior no tuve ninguna pesadilla pero eso es porque Peeta estuvo conmigo.

Por la mañana tuve que pasar a la oficina a acabar los pendientes que tengo, así que cuando vuelvo al departamento ya es tarde, me doy cuenta cuando veo a Prim, Gale y Peeta ya arreglados, simplemente en la sala mirando tele. Ellos no se percatan de mi presencia y me quedo pensando en cómo hubiera sido mi vida si regresáramos al doce ¿así tal vez? Todos reunidos mirando cualquier cosa en el televisor, ¿con Haymitch quizás? Y cuando pase más el tiempo con la pareja de Gale y sus hijos, tal vez Prim también con familia...

-¡Katniss! –se gira Prim mirándome como con reproche -¿Por qué no te has arreglado?

-¿Qué? –pregunto confundida.

-En una hora va a venir Effie, si te ve se va a enojar mucho.

-Voy a cambiarme –digo mirando a Gale quien sonríe divertido, sé lo que probablemente está pensando, Prim, en lo que ha crecido y que ya no es una niña. Le devuelvo la sonrisa con una mirada cómplice y me voy hacia mi habitación.

Tardo 15 minutos en volverme a bañar y gracias que antes de ir a la oficina elegí el vestido que iba a usar y los zapatos no me retraso, justo cuando tocan la puerta voy saliendo ya arreglada, vestida, peinada y maquillada (aunque esto último muy levemente dado que casi no sé cómo maquillarme, no al menos como solían hacerlo)

Katniss Y Peeta--Sinsajo--Historia AlternativaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora