• Capítulo 26 •

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Han pasado algunas unas semanas desde que Haru regresó a la Konoha de su época, nuevamente volvió a su rutina normal de todos los días, salir de casa, ayudar a su hermano mayor con los documentos y lidiar con los regaños de Tobirama. Mientras arregabla y leía unos pergaminos en la oficina del hokage, su hermano mayor le habló.

—Haru, mañana iré a una reunión con el líder del clan Uzumaki y Mito en la aldea del remolino. —dijo Hashirama con una sonrisa.

—Iré contigo, hermano. —Haru se ofreció a acompañarlo, era su deber y obligación como embajadora oficial de Konoha ir a cualquier reunión en la que el hokage fuera citado.

—Lo siento, hermana, pero por esta vez no puedes acompañarme. —Hashirama se colocó frente a la puerta para que Haru no diera otro paso más.

No comprendía, por qué no quería que lo acompañará —¿Pero, por qué? —preguntó.

—Esta reunión será totalmente privada, solo asistirá el líder del clan Uzumaki, Mito y yo. Hablaremos de diferentes temas relacionados con nuestra unión entre clanes, entre otra cosas que tenemos en futuro para Konoha.

—Comprendo. —Bajó un poco la mirada, era extraño que Hashirama no la dejará acompañarlo, normalmente siempre la dejaba ir aunque no participará en las reuniones, probablemente sospechaban de ella y era normal, después de todo, ella fue quién robó algo importante de Uzushiogakure la última vez que fue a dejar algo al líder de dicho clan. Pero también le preocupaba otra cosa.

—No te preocupes, hermana. —Hashirama colocó su mano en la cabeza de su hermana que era de estatura un poco más baja que él. —Estaré bien, Mito irá conmigo.

—Eso no me preocupa, hermano. Se que eres fuerte, pero, ¿quién estará al mando de la aldea mientras tú estás ausente?

Konoha no podía quedarse sin su hokage ya que eso podía ser una clara desventaja para los enemigos que quisieran invidirla. Cualquier kage necesitaba una segunda persona que tomara su lugar mientras estuviera ausente por un asunto de total importancia.

—No te preocupes por eso, Tobirama se hará cargo, él me sustituirá mientras yo estoy ausente. Tenía pensado en que Madara tomará el mando pero Tobirama me gritó y se ofreció como voluntario.

La Uchiha bufó burlona —Típico de mi hermano.

Con Tobirama al mando, fue más fácil terminar todo el papeleo que Hashirama no podía terminar ni en un mes, lo que le dió más tiempo libre a Haru para pasar un tiempo de pareja con Madara

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Con Tobirama al mando, fue más fácil terminar todo el papeleo que Hashirama no podía terminar ni en un mes, lo que le dió más tiempo libre a Haru para pasar un tiempo de pareja con Madara. Su idea era disfrutar su único día libre que tenía con Madara, ya habían planeado todo, pero fue arruinado por los viejos Uchiha que lo citaron repentinamente a otra reunión secreta con todo el clan en el templo Nakano.

El silencio de un secreto | Uchiha MadaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora