El silencio de un secreto | Uchiha Madara

• Capítulo 106 •

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La situación se complicó de manera sorpresiva, todas las personas fueron atrapadas por el Shinjū, Zetsu traicionó a Madara y reveló quién era realmente, Haru fue atrapada por el mismo y en contra de su voluntad empezaba a resucitar.

La piel agrietada y en estado de putrefacción caía lentamente de su cuerpo falso para cambiar a su piel real y perfecta, esos ojos dorados fueron tomando su forma física pero solamente el derecho ya que izquierdo lo perdió totalmente. El precio que pedía el Rosegan para revivir a una persona era perder permanentemente el ojo y ese fue el izquierdo.

Su corazón empezó a dar sus primeros latidos, el aire entró por su nariz hasta sus pulmones y sus órganos nuevamente entraron en función. Haru ha revivido completamente -No puede ser...- las palabras fueron liberadas con un suspiro de total preocupación. La mitad de cuerpo estaba siendo cubierta por Zetsu en estado líquido.

-¡Haru-obaasan iré por usted!- demandó Naruto a hacer el segundo intento de ir a rescatarla.

-¡No lo hagas Naruto o terminarás atrapado como yo!- Haru entendió las verdaderas intenciones que tenía Zetsu si atrapaba a Naruto, no podía dejar que muriera por su culpa.

-¡Entonces detendremos a Madara! ¡Vamos Naruto!- exclamó Sasuke creando una espada de rayo.

-¡Yo también iré!- se incluyó Amaterasu activando de nuevo su sharingan y con el tantō en manos mientras canalizaba chakra en ella.

-¡De acuerdo!- por el momento los ahora amigos y Amaterasu corrieron hasta Madara que gritaba de dolor, seguía recibiendo varias cantidades mounstrosas de chakra de las personas atrapas en el Shinjū y del suelo, el tamaño seguía aumentando cada vez más como si de un globo humano se tratase.

Pero no pudieron ni tocarlo o hacerle algo antes de que la cabellera blanca de esté que crecía a centímetros los atrapó dejándolos inmóviles. Amaterasu sujeto con fuerza el tantō e intentó cortarlo, pero cuando el filo hizo contacto con los hilos de cabello salió volando de sus manos.

-¡No puede ser! ¡Su cabello es fuerte, no pude hacerle un corte!- ya no tenía su arma que era la única salida de tenía, quedó atónita por la cabellera que parecía acero.

Naruto quiso hacer lo mismo usando una bijūdama pero los cabellos sujetaban cada parte de su cuerpo que no podía mover las manos -¡¿De que está hecho su cabello?!-

-¡Eso no importa ahora, hay que pensar una forma de salir de esta!- Sasuke estaba en las mismas condiciones, por lo menos para hacer un jutsu que los liberará le era imposible. Pensaba rápido en las formas que existieran para salir antes de que fuera demasiado tarde.

-Quieren ser parte de mi madre también-. comentó Zetsu entre risas ahora con el control total de Haru -Es hora de que unas a Madara para que mi madre pueda renacer Haru-.

Como estaba viva podía sentir la presión que usaba Zetsu para evitar que no se moviera, sentía que perdía el control de su cuerpo -No lo entiendo... creí que ibas tras mis ojos...-

-Tonta. En realidad te quería a ti, eres la reencarnación de Hikaru una descendiente lejana de mi madre, Kaguya. Cuando nací mi única tarea era revivirla, estudie varios años a los humanos y el ninshu, descubrí que cierta humana tenía la capacidad necesaria de ser el contenedor de chakra que poseía mi madre, pero también necesitaba a alguien especial que hiciera toda esa tarea. Indra y Hikaru eran los dos peones perfectos para revivirla, sin embargo esa chica era demasiado soberbia que no pude resistirme a matarla. Un gran error mío. Luego de varios años intentado manipular a las reencarnaciones de Hikaru tu fuiste la única que cayó-.

-¿Q-que quieres decir? Acabé con mi propia vida sellando mi cuerpo con la certeza de que no tuvieras control sobre mi poder-. como estaba perdiendo el conocimiento se le dificultaba hablar.