Rebeldía (Luke Hemmings)

75. Como en casa.

                                                                        75. Como en casa.

Mi cabeza se encontraba apoyada sobre el hombro de Luke mientras este pasaba su mano por mi pelo una otra vez y dejaba suaves besos sobre mi cabeza, mi mano estaba cogida con la de Ashton que se encontraba en silencio a nuestro lado desde hacía media hora después de nuestra llegada y algunos sollozos por el miedo.

—He venido lo antes que he podido.—Escuché la voz de Travis y levanté mi cabeza, observando a través de mis ojos llorosos como el rubio se encontraba frente a nosotros en la sala de espera, su pelo estaba desaliñado y sus manos metidas en los pantalones vaqueros sin planchar.

—Gracias, tío.—Habló ahora Ashton a mi lado y Travis vino a darme un beso en la frente para después sentarse al lado de mi hermano y comenzar a hablar con él en voz baja de lo que había pasado, me gustaba tenerle allí, a pesar de que él no podía hacer nada para cambiar esa situación, brindaba apoyo y estaba orgullosa de poder decir que nunca faltaba cuando se le necesitaba.

—¿En qué piensas, ángel?—Susurró Luke contra mi pelo cuando volví a apoyar mi cabeza en su hombro y sus caricias bajaron a mi brazo.

—Tengo miedo, Luke, sé que no es el mejor padre del mundo ni por asomo, pero es mi padre, y debajo de toda esa fachada de alcóholico violento sé que mi padre amable y cariñoso de hace unos años sigue estando allí, solo que está tan destrozado que tiene miedo a volver a dejarse ver.—Confesé mientras suspiraba contra su pecho y el olor de su masculina colonia me confortó.

—Esto seguro de que tarde o temprano, le recuperarás, porque vas a poder hacerlo, Mickie... porque todo va a salir bien, ¿me oyes? Todo estará bien.—Y a pesar de que sabía que no estaba ni la mitad de seguro de sus palabras, le creí, porque me hacía creerle y me trasmitía la tranquilidad y confianza que necesitaba.

—Está bien, solo no quiero pensar en que lo peor pueda pasar.

—¿Sabes que pase lo que pase estaré aquí para ti, cierto? No pienso darte la espalda.

—Te quiero.—Susurré y sonrió contra mi sien.

—No más que yo, puedes apostar.

                                                     -o-

—¿Familiares de Tom Irwin?—El doctor entró en la sala de espera y casi salté de mi asiento arrastrando a Luke conmigo.

—Sí.—Dijo Ashton a mi lado y volvió a sostener mi mano como si realmente me estuviese sosteniendo a mí por lo que pudiese pasar.

—La operación ha salido bien pero las 48 horas siguientes son críticas, puede que sobreviva, pero también hay posibilidades de que no lo haga, ha sufrido muchos daños y sus órganos están...

—Está bien, doctor, avísenos con lo que sea.—Le cortó mi hermano, apretando mi mano, queriendo, como hacía horas antes, no hacerme escuchar todo lo que estaba pasando, queriendo evadirme de la realidad cuando yo estaba metida en ella tanto como él.

—Se encuentra en launidad de cuidados intensivos, solo pueden pasar dos personas y a horas concretas con tiempo limitado, hasta mañana a la una no se podrá acceder a su habitación.—Nos hizo saber y asentí al igual que Ashton.

—Avísenos.

—De acuerdo, que pasen una buena noche.—Y se fue de la habitación en pocos segundos, tiempo suficiente para que Luke viniese nuevamente a mi lado, agarrándome de los hombros y pegándome en su pecho.