Rebeldía (Luke Hemmings)

13. Una jodida mentirosa.

                                                                  13.    Una jodida mentirosa.

—¿De qué cojones va todo esto, Mickie? —pronunció mi hermano casi gritando y apretando los puños a los lados de su cuerpo para contenerse. Me tensé. Ashton no solía decir palabrotas, estoy tenía muy mala pinta.

—Ash... —comencé a decir.

—¿Ash qué? ¿Hemmings es tu amiga? ¿Has estado con él todo este puñetero tiempo? —acusó y, en un rápido vistazo, observé como toda la gente había dejado de bailar y prestaba atención a nuestra discusión mientras de fondo se escuchaba alguna canción a la que nadie prestaba atención.

—Yo...

—Yo la obligué a venir —me interrumpió Luke cuando iba a responder con alguna excusa muy poco justificada para lo que había hecho. Había mentido desde que estábamos en Holmes Chapel como no lo había hecho nunca y la decepción que vi en los ojos de mi hermano hizo que un nudo ser formase en mi estómago. No podía estar pasando eso.

—No me cabe duda, eres un gilipollas pero mi hermana no es una puta cría, ella sabe lo que hace... —Sonrió con amargura.—No me esperaba esto, Mickie, no de ti.

—Ashton, yo solo...

—Ashton nada, ¿cuántas veces has salido con él? ¿Qué ha pasado entre vosotros? ¡Este tío es un maldito gilipollas, Mickie! De todos los tíos por los que has podido mentirme, eliges a este.

—No pongas tu odio hacia mí como justificación para gritar de esa forma a Mickie —habló Luke mientras veía como su cuerpo estaba casi tan tenso como el de mi hermano, la verdad, no me esperaba aquella reacción de Luke, creía que se lanzaría a su cuello la primera vez que Ashton le había llamado gilipollas, pero no era así, estaba allí, de pie, delante de mí, como si quisiese protegerme de las posibles agresiones verbales de mi hermano o algo parecido.

—¿Puedes callarte de una vez? ¿Acaso mi hermana no tiene boca?

—Ashton, por favor...

—¿Por qué me has mentido? —quiso saber con el tono de voz más calmado pero sabía que seguía igual de alterado que cuando nos había encontrado bailando.

—Yo solo... Sabía que reaccionarías de esta forma.

—Hubiese reaccionado de otra forma si me hubieses dicho la verdad, no ocultándome todo esto como una jodida mentirosa. Has caído bajo para mí, Mickie —escupió las palabras y juro que en ese momento se me olvidó respirar. Jamás Ashton me había hablado de esa forma. Nunca había utilizado algo insultante hacia mi persona. "Una jodida mentirosa"

—Creo que ya está bien... —intervino Luke que había notado como había suspirado fuertemente cuando mi hermano había terminado su frase.

—No, no está bien. Mickie, vámonos a casa, hablaremos por el camino. —Y entonces, miré por encima de su hombro y observé como Brook miraba aquella escena realmente asombrado y apenado por lo que se me venía encima. Bajé la cabeza dispuesta a salir de allí con mi hermano, sabía que lo que acababa de decirme era solo algo suave de un hiriente discurso que iba a relatarme de camino a casa. A Ashton no le gustaba dar el espectáculo en cualquier sitio y estaba esperando a que estuviésemos a solas para seguirme gritando todo lo imbécil que había sido.

—Ella no va a ningún sitio. —Luke me agarró del brazo y me pegó a su espalda, me recosté contra esta, estaba temblando.

—Me estoy conteniendo demasiado contigo, Hemmings, apártate de mi hermana o voy a partirte la cara contra el puñetero suelo —amenazó mi hermano y temblé más impactada de lo que estaba antes. Aquel chico que se encontraba maldiciendo y hablando de aquella forma no era mi hermano.

—Eh, tranquilo, Irwin, estás muy tenso —le provocó Luke a pesar de todo lo que estaba ocurriendo y juraría que en ese momento se encontraba sonriendo de esa manera que tanto le gustaba. Desafiando. Escuché a mi hermano gruñir, sabía que no le convenía pelearse con Luke pues, la última vez, había acabado bastante mal y, en un momento, comprendí lo que Luke estaba haciendo, quería que mi hermano descargase toda su furia e ira contra él y no contra mí.

—Deja de provocarme, gilipollas —contestó mi hermano hablando entre dientes.

—Vamos, ven y golpéame si quieres, voy a devolverte cada uno de los golpes incrementando otros cinco de regalo.

—Suelta a mi hermana. —Volví a escuchar como decía perdiendo la poca paciencia que le debía quedar, aunque, pensándolo bien, esta debía de haberse agotado cuando Luke se negó a dejarme ir por primera vez.

—No.

—Suéltala —repitió lentamente y separando la palabra en sílabas. Y entonces noté como Luke me echaba hacia atrás y vi a mi hermano abalanzándose sobre él.

—¡Ashton! ¡Luke! ¡Parad! —chillé mientras Derek, que no sabía de donde había salido, me sujetaba por los hombros para no dejarme ir a separarlos—. Maldita sea, Luke, ¡deja de golpearle! —grité cuando vi como le daba a mi hermano otro puñetazo en el estómago y Ashton escupía sangre—. ¡Por favor! —rogué y Luke se detuvo tan rápido como grité. Brook agarró a mi hermano y le sacó a la fuerza de allí mientras le convencía de que era mejor irse a casa, que iría poco después que él o eso entendí pues mi hermano no dejaba de revolverse en los brazos de Brook para intentar volver a por Luke. Este se giró hacia mí, tenía la ceja rota y los nudillos con restos de sangre. Sangre de mi hermano—. Luke... —comencé a decir pero paré mis palabras, sabía que si seguía me derrumbaría y Luke pareció notarlo pues se acercó a mí poniendo sus manos acariciando mis mejillas como siempre hacía.

—¿Estás bien? —quiso comprobar examinando mi cara, seguramente, en busca de lágrimas. Negué con la cabeza, de nada servía mentirle cuando estaba rota por dentro. Había perdido la confianza de mi hermano—. Vámonos de aquí, ángel. —Cogió mi mano y, bajo la mirada de todos, me sacó de allí.