❧ Estado: Completa y en futura edición.
❧ Fanfic basado en el juego de Harry Potter : Hogwarts Mystery.
❧ Toda la historia base es original del juego.
❧ No es necesario haber jugado al juego para leer la historia.
❧ Portada hecha por: -PORTADAS-
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Era verano de 1984, Natalia estaba relajada en casa cuando una lechuza entró por la ventana del salón. La niña corrió hacia el ave que sostenía un sobre amarillento con el pico y una gran sonrisa se dibujó en su rostro en cuanto descubrió la procedencia de éste. Natalia abrió la carta con ilusión mientras sus padres se miraban preocupados.
Natalia: —leyendo— Estimada Natalia Salas, Tenemos el placer de informarle que ha sido admitida en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. En adjunto encontrará una lista de todos los libros y el equipo que necesitará. El año escolar empieza el 1 de septiembre. Esperamos su lechuza a más tardar el 31 de julio...
Natalia estaba ilusionada, por fin podría asistir a esa escuela tan prestigiosa de magia. El sueño de todo niño con antecedentes mágicos. Pero sus padres no querían ese destino para la pequeña. Elissa, su madre, había estado insistiendo en mandarla a Beauxbatons, la escuela donde estudió ella. Cualquier opción mejor que Hogwarts. George, su padre, no estaba demasiado entusiasmado con la idea de su mujer, pues, tampoco quería mandar a su hija tan lejos de casa, pero ¿cómo iban a mandar a la pequeña Natalia a la misma escuela que provocó la desaparición de Jacob?
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Natalia fue al callejón Diagon ilusionada, preparada para comprar los útiles necesarios para empezar sus clases en Hogwarts.
Sus padres no habían querido acompañarla, pues ellos seguían sin estar de acuerdo con que fuera a Hogwarts, pero, por suerte, su abuela le indicó a dónde tenía que ir.
El callejón, a pesar de no ser demasiado grande, debido a lo repleto de gente que estaba, no era para nada apropiado para que una niña de apenas once años anduviese sola por ahí.
Cuando llegó, se sintió completamente desubicada y perdida. Había más niños, pero, en su mayoría, acompañados por sus padres. Ella estaba completamente sola y sin saber a dónde ir. Por suerte, vio a una chica de tez oscura y un pelo negro, graso y lacio, sonriéndole. Aquella chica parecía tener su misma edad y, lo más importante, estaba igual de sola que ella. Natalia se acercó a la chica observando sus rasgos, tenía los ojos negros, con unas gafas blancas y una nariz alargada.
