Cuarto Menguante

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Me equivoqué tanto, hice tanto daño, me tocó cruzarme con personas maravillosas y vivir experiencias únicas junto a ellas pero me equivoqué al no soltar mi pasado, me aferre tanto a él que llegó a dañarme el presente, en este momento exacto no puedo recordar más nada que no sea aquellos días.

Subí el volumen del estéreo, saqué papel y lápiz y comencé a escribir, me deje llevar por lo que sentía en aquel momento, al terminar me di cuenta que había manchado aquella nota con algunas lágrimas, tomé un sobre y deje aquella carta guardada en mi mesón.

Entré a la ducha y dejé que el agua limpiara un poco mi ser, que me recorriera hasta el último rincón del cuerpo, pensar era difícil, en estos momentos todo estaba tan confuso. Me sentía vacía, mi cuepo estaba aquí pero yo no, no sé como explicarlo pero yo ya no estaba en mí.

Decidí ponerme algo sencillo, una vieja camisa blanca con un mensaje escrito en inglés «Smile more», unos jeans y anduve descalza todo el rato.

Me serví un café y volví a mi habitación, busqué mi teléfono celular y reproduci una de mis canciones favoritas «talking to the moon - Bruno Mars » me senté frente a mi ventana tratando de disfrutar de aquel momento. Tratando de soltar el nudo que a mi cuello asfixiaba, no les voy a negar, estaba llorando, que miserable que podía llegar a ser. Deje la taza a un lado y tomé entre mis manos aquello que parecía ser mi vía de escape.

Somos responsables de decidir si venir a la vida o irnos en el primer respiro... hoy quiero renacer y borrar patrones.

Lo último que escuché fue el sonido de la silla chocando contra el suelo.

La otra cara de la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora