Capítulo 41

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El invierno, la estación que indicaba la llegada de una de mis festividades favoritas, navidad. Habían pasado exactamente tres meses desde que mis queridos novios se marcharon a sus hogares, cada día y cada noche pensaba en si algún día volvería a verlos porque en las cartas que me enviaban decían que los esperara...

Aún así, no podía evitar pensar a veces que se olvidaron de mí, ¿por qué me querían mantener en su vida si ya lo tenían todo? Las inseguridades aumentaban cada día que pasaba sin verlos. Pero Camila siempre me decía que dejara la negatividad e inseguridad de lado y pensara en positivo porque ella estaba segura de que volverían por mí, aunque debía admitir que me costaba creerlo.

Tenía puesto un abrigo, bastante cómodo a mi parecer, era una de las tantas prendas que me regaló la señora Alicia cuando estuve en casa de Axel... Un hogar maravilloso, esperaba que estuviera feliz con su familia. La mayoría del tiempo los chicos estando alegres al haber recuperado sus lujos estaban en mi mente sin yo llamarlos, supuse que todavía seguía sintiendo un amor muy fuerte por ellos. Les prometí que nunca los olvidaría, tampoco planeaba hacerlo porque me tocaron en alma, me hicieron experimentar el amor de una forma inusual.

Me era imposible sacarlos de mi cabeza cuando ya había caído en sus redes. Respiré profundo antes de abrir la puerta principal, coloqué la bufanda cerca de mi boca para que el frío no congelara mis labios, la época de invierno era la más helada, no había calor, más bien tenía que dormir con una sábana para no convertirme en hielo.

Ajusté mejor mi gorro, era de un color negro carbón. Caminé dejando las huellas de mis zapatos en la nieve que se amontonó desde hace varios días atrás, blanca como un papel. Una sonrisa se formó en mis labios, ¿y si ellos estuvieran ahí? ¿Qué pensarían al ver la cristalina nieve? Llevé una mano a mi frente para dirigir mi vista al cielo, nublado, no lograba distinguir dónde se encontraba el sol. Seguí con mi caminata, saludando a todo el que se me cruzaba como lo hacía normalmente. Me detuve frente al tronco donde siempre me sentaba cuando necesitaba salir a tomar aire fresco, a pesar de que el viento era muy fuerte.

Los copos de nieve empezaron a caer con delicadeza y escasez. Cerré mis ojos al sentir el frío que me brindaban, sonreí mientras  quedé absorta en mis pensamientos. Cuanto los extrañaba, quisiera estar ahí sentada junto a ellos, que me abrazaran y me brindaran su calidez... Escuchar los chiste de Axel, las discusiones que tenían con Jacob por ser un pervertido, las quejas y risas de Damián...

Abrí lentamente mis ojos, fui sorprendida en cuanto distinguí una figura a lo lejos, luego dos, tres... Se acercaban cada vez más. Mi corazón dejó de latir por un instante y de mi boca salió un pesado aliento que se convirtió en aire frío. Mi respiración aumentó su ritmo al ver con claridad a las personas que se acercaban.

El primero llevaba puesto un gorro blanco que lograba cubrir la parte de arriba de su despeinado cabello castaño, un abrigo elegante y del mismo color hasta las rodillas, sus manos estaban guardadas en los bolsillos que su ropa poseía, me miró con una sonrisa contagiosa, pero lo único que logró en mí fue sacar las lágrimas que se acumulaban en mis ojos, mis manos fueron instintivamente a mi boca para cubrirla de la sorpresa que sentía en cuanto detallé a los otros dos.

Un chico rubio y sin gorro, con un suéter que le quedaba enorme me estaba sonriendo con los ojos cerrados, a su lado estaba el más alto y fornido con un abrigo negro que le cubría casi todo el cuerpo  y noté que se había cortado el cabello, se veía más sexy.

Se detuvieron frente a mí, los tres abrieron los brazos dándome a entender que corriera hacia ellos. El nudo en la garganta era infernal, quería hablar y decirles algo, pero mi voz se volvió un hilo debido a todas las emociones que me recorrían, felicidad, nostalgia tristeza. Solté el llanto en cuanto me abalancé sobre ellos, me correspondieron en un abrazo grupal como la última vez, fue el mejor momento que tuve.

Emily y compañía [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora