We are not friends [Brunol]

"L" (I)

¿Todos hacemos trampas de vez en cuando, no? Eso pensaba mientras desdoblaba varios papelitos hasta dar con la letra que había estado buscando, la "L". Necesitaba que saliera ya y no me quedaba otra que jugar un poco sucio.

Pol había cumplido una de mis mayores fantasías y yo le debía una. Recordé lo que le contó Berta a Tania durante el primer curso, cuando yo me moría por Pol en secreto y ellos aún estaban juntos. Dijo que su mayor debilidad era la ropa interior sexy, la lencería, aquello podía con él. Los picardías, los corsés y las ligas acompañados de unos buenos tacones lo ponían a mil en cuestión de segundos.

No pensaba ponerme tacones ni corsé, pero seguro que encontraba algo. Puede que aprovechando el subidón incluso le dijera algo sobre nuestra relación aquella misma noche. Saqué el móvil de mi bolsillo y le escribí a la persona que necesitaba en aquellos casos.

Yo: Eyyy!!
Yo: te apetece quedar a las seis?
Yo: necesito tu ayudaa :)
Tania: Holaa!!
Tania: Creo que si puedo
Yo: Te recojo?
Tania: Perfecto

A las seis en punto, lo que es raro en mí, me encontraba llamando a su timbre. Tardó unos minutos en bajar y en cuanto llegó nos fundimos en un fuerte abrazo. Ya no nos veíamos tanto como antes. Los dos habíamos conocido gente nueva y estábamos más ocupados, pero siempre que podíamos quedábamos aunque fuera media hora.

-¿Que tal estás ?- pregunté colocando mi brazo sobre sus hombros y comenzando a caminar hacia la zona comercial.
- Uff un poco agobiada con la uni, el alquiler y esas cosas, pero bueno, nada importante.
- ¿Y con Marc que?
- Buah, muy bieen. El otro día se lo presenté a mi madre y me dijo que le gustaba mucho para mi, pero que Pol era más guapo.- se me escapó una risa-. Oye y hablando de Pol... ¿que tal os va?
- De eso quería hablarte...
- ¿Por fin sois novios?
- Nononono. Es que creo que estoy empezando a sentir demasiadas cosas por él. Más de lo que debe sentirse por un follamigo, ¿sabes?- asintió.- Y no se, me da miedo decírselo, que él no sienta lo mismo y que ya no seamos follamigos ni seamos nada.

Tania se quedó callada unos segundos, pensando uno de sus sabios consejos.

- ¿Tu notas que sea mutuo? - asentí recordando el te quiero del otro día.- Entonces ya está. Si es lo que sientes y notas que es recíproco tienes que decírselo. O al menos insinuárselo un poco o dejárselo caer.
- ¿ Y como puedo dejárselo caer disimuladamente ?
- Puedes decirle algo tipo: ¿Tu tendrías algo? Es solo por curiosidad.

Tania siempre me daba buenos consejos, aunque a veces no le hiciera ni puto caso y acabase haciendo lo que me diera la gana. Cuando llegamos a la tienda me detuve en seco.

- Es aquí.- dije observando el escaparate.
-¿Como?- se detuvo detrás de mí. - Aquí solo hay tangas, sujetadores y cosas de esas.
- Exacto.- abrí la puerta y entramos a la tienda, la cual estaba casi vacía afortunadamente.- Ayúdame a buscar un tanga negro lencero con ligas.
- No entiendo nada.- me miró con los ojos como platos mientras yo buscaba entre las perchas.
- Pol y yo estamos haciendo un juego para probar cosas nuevas en la cama. Cada día sacamos una letra y hay que buscar algo sexual que empiece por esa letra. Hoy me ha salido la "L". Bueno... mejor dicho la he sacado yo porque me he acorde de lo que te dijo Berta en primero, lo de que a Pol le gustaba tanto la lencería.- Tania me miraba alucinando mientras asentía lentamente.
- Es muy buena idea. Lo vas a tener a tus pies cariño.- dijo y comenzó a mirar entre las perchas de al lado.

Nos separamos, ella comenzó a buscar por un lado y yo por otro. A los pocos minutos nos encontramos en los probadores. Teniamos al menos cinco conjuntos, todos muy parecidos. Un tanga minúsculo negro de encaje unido a unas ligas, medias de rejilla y una gargantilla a juego. Finalmente me decidí por el tercer conjunto. Le hice un gesto con la mano a Tania para que se asomara al probador y me diera su aprobación.

- ¿Qué te parece?.- dije posando sensualmente frente al espejo.
- Ufff, te queda genial, de verdad.
- ¿Me hace buen culo?
- Tio, yo te daba.- le lancé un beso y le guiñé un ojo.

Estaba terminando de ponerme mi ropa cuando el móvil vibró en mi bolsillo.

Pol: oye estas haciendo algo?
Pol: no hay nadie en mi casa
Pol: te apetece venir un rato? ;)
Yo: estoy allí en 20 mins

Pagué lo que había comprado y acompañé a Tania a su casa.

- Quiero que luego me lo cuentes todo ¿vale?- dijo dándome un abrazo y dos besos de despedida.
- Bueno... a lo mejor me ahorro algunos detalles.

Acabé de despedirme de ella y cogí el metro para ir al piso de Pol. Estaba muy nervioso por lo que pudiese pasar.