Velas y rosas

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* Narra Bruno*

- ¡Brunetee!- gritó Pol desde el baño. - ¿Pero qué has liado aquí?

Me levanté de la mesa, dejándome la tostada a medias y me dirigí al baño, con una sonrisa que era dificil de ocultar. Vi a Pol parado en la puerta, me miró, señaló el baño y volvió a mirarme. He de reconocer que me lo había currado.

- ¿ Y esto?- volvió a preguntar, con una voz mucho más suave.
- Bueno... anoche te dije que ya te lo compensaría.

Aquella mañana me había levantado más temprano, así que aproveché para darle una pequeña sorpresa a Pol. Había llenado la bañera con agua caliente, pétalos de rosa y bolas de colores, que le daban al agua un tono más rosado, además había puesto pequeñas velas aromáticas por todos lados. Del agua salía mucho vapor, haciendo que aquello pareciese una sauna.

- Pues si que mereció la pena la mamada.- alzó las cejas y me miró con una media sonrisa, yo me encogí de hombros.
- También he pensado que te va a venir bien para la resaca.
- Bah, yo no tengo de eso, la resaca es de débiles.
- ¿Ah si? - entré al baño y lentamente comencé a quitarme la ropa. - Pues este debil de aquí se va a dar un baño, tu puedes ir haciendo la colada. - la expresión de Pol cambió por completo mientras recorría mi cuerpo con los ojos.
- ¿Sabes qué?.- entró y cerró la puerta. - Igual un baño ahora mismo si que me viene bien.

Acabamos de quitarnos la poca ropa que nos quedaba y nos metimos léntamente en la bañera, el agua aún seguía muy caliente. Puse mi lista de canciones relajantes para crear un poco más de ambiente.

- Buah... - se dejó caer más. - Ojalá todos los días empezasen así.
- Hay que aprovechar ahora que hemos acabado el cuatri. -me humedecí las manos y me las pasé por el pelo. - Dentro de nada estaremos muertos del asco otra vez.
- Joder Bruno, no pienses ahora en la uni.
- Es que a veces se me hace muy cuesta arriba tio. Seguro que si no fuese por ti, Angel y Sara ya habría dejado la carrera. -él negó con la cabeza.
- ¿Vas a dejar la carrera quedando solo un curso de mierda?
- Si es que ya se que no me voy a dedicar a la historia. Estoy bien donde estoy ahora, con mi abuela.
- Pero la historia te gusta, ¿ y quien sabe si dentro de unos años te cansas del teatro?- me miró más serio - Tú acabala, que no te queda nada y sabes que el título lo vas a tener siempre ahí.
- Ya... si llevas razón.

Cerré los ojos y me recosté todo lo que pude en la bañera. Estuvimos un buen rato sin hablar, simplemente relajándonos, que falta nos hacía. Mi cabeza comenzó a divagar. Me gustaría que el Bruno de primero de bachiller pudiese ver esta escena. Pol y yo dándonos un baño caliente entre pétalos de rosa en nuestro propio piso, con Beethoven de fondo. Ojalá hubiese podido coger a aquel chaval que lloraba porque no se aceptaba o porque creía que nunca podría estar con el chico del que estaba enamorado y decirle: no te preocupes, todo va a ir bien, solo deja que el tiempo pase.

- Eeey.- Pol comenzó a salpicarme. -¿Te has dormido o qué? -negué con la cabeza.
- Estaba pensando.
- ¿En qué?
- No se... - jugueteé con los pétalos que había frente a mí. - En lo nuestro.
- Pero... ¿En qué plan? -se puso recto. - ¿Tengo que preocuparme?
- Nononono- negué enérgicamente con la cabeza. - Estaba pensando en cuando estábamos en el instituto ¿Qué crees que diría el Pol de primero de bachillerato si nos viese ahora?
- Ufff, buena pregunta. - se cruzó de brazos y se quedó unos segundos pensante. - Creo que así de primeras le chocaría un poco. No por el echo de estar contigo, si no por la escena en sí ¿sabes?
- No te pillo.
- Si tio, es lo más cursi que he hecho jamás. Vivimos juntos y estamos dándonos un baño en agua rosa y con olor a flores. - señaló a nuestro alrededor. -El Pol de bachiller no hacía estas cosas, solo buscaba follar e intentar no colgarse de nadie.
- ¿Y por qué piensas que no le chocaría estar conmigo? - lo miré alzando las cejas. -Que yo recuerde era muy heterazo.- se rió y volvió a salpicarme.
- Ya me fijaba en tí en cuarto de la eso. - abrí los ojos como platos.
- ¿Por qué me acabo de enterar de ese dato?- se encogió de hombros con una leve sonrisa- ¿Como fue la primera vez que te fijaste en mi?
- Ufff... pues si te digo la verdad, no me acuerdo del todo. Creo que fueron pequeñas cosas. -se rascó la cabeza. - Desde el primer momento que te vi me pareciste muy guapo, pero claro, yo entonces no era cociente de que pudieses atraerme sexualmente. Luego surgieron otros signos que hicieron que muy poco a poco me fuese dando cuenta; te miraba los brazos cuando hacíamos flexiones en gimnasia, te miraba el culo cuando llevabas aquellos pantalones grises... - mi sonrisa iba agrandándose lentamente, tenia cara de gilipollas. - Hasta que ya en la fiesta de Mónica no pude más y me lancé.
- Guau...- se le escapó una risa.
- ¿Guau? ¿Me pongo cursi y todo lo que me dices es guau?. -me salpicó.-Va, ¿cuando fue la primera vez que tú te fijaste en mí?
- Fue la primera vez que entraste por la puerta de clase, el año que repetiste. Estaba sentado junto a Tania, se giró y me dijo: buah tio...ha tenido que venir a nuestra clase el chulo este.- se rió.
- Joder ¿en serio?
- Completamente.- asentí. - Y mira como ha acabado el chulo ese.

Estuvimos en la bañera hasta que el agua se quedó helada, ya debía ser hora de comer. Al final madrugar para ponerme a desflorar rosas había valido la pena.

•••

¡¡ Holaa!! ¿Qué tal? ¿ Os ha gustado el capítulo? Me apetecía escribir algo de este estilo porque la segunda temporada de Sapere Aude me está dejando fatal. Así que he pensado que puede que vosotros también quisieseis leer algo así, más soft.

Por último, ¿os gustan los capítulos así, o preferís los de letras?

We are not friends [Brunol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora