Detrás de un sueño inútil

Cap. 4 Un Angel en Los Angeles Parte 1

Después de celebrar el entrenador les aviso a todas que el martes será la ceremonia de reconocimiento por el campeonato que ganaron, así que todas no podrían faltar a esa ceremonia, por que igual tendrán una beca de $500 USD

- Muchas felicitaciones a todas, - Hablo el entrenador. - Los veré el martes para la ceremonia.

Todas se despidieron y se fueron directo a sus casas. Lynn detiene a Jordan Chica para agradecerle por reemplazar a su amiga Paula tras la operación en su pie.

- No sabes cuánto te lo agradezco Jordan, de verdad si sabes defender la noche portería (Obvio que ella jugaba de Portera)
- Gracias Lynn, - Dijo Jordan. - de verdad jamás me sentí tan viva y tan masacrada, je.

Mientras que las dos chicas estaban hablando, el albino se estaba alejando disimuladamente de la narizona para que ella no la siguiera acosando. Ya que Lincoln está saliendo actualmente con Ronnie Anne y es muy feliz con ella.

Margo ve a Lincoln y de manera coqueta se le acerca para... Ya saben.

- Me dió mucho gusto verte, - Le susurra Margo al oido del albino. - por cierto, no bailas tan mal y ojalá pudieras invitarme a ver una película en tu casa.
- A mi también me da gusto verte. - Responde el albino con sarcasmo y con un poco de furia. - Pero ya te dije que estoy feliz con Ronnie, así que respeta mi relación hacia ella
- Ok, pero te estás perdiendo de lo bueno.

Después de terminar la charla, la mejor amiga de Lynn le roba un beso a Linc, el albino después de eso, se quedó paralizado sin poder hacer nada ya que es una mujer por qué si no, le daría su merecido.

- Jajajaja, - Se burla Margo de el. - Te ves sexy cuando te enojas mi osito panda.
- Mejor me largo para no verte más. - Grito Lincoln con furia y con ganas de darle un bofetón a la chica.

Lynn escucho el grito de su hermano y decidió despedirse de Jordan y de las demas. Por último se despide de su mejor amiga.

- Vaya que tu hermano sabe besar bien aparte de bailar. - Dijo Margo con una voz excitante.
- Si, claro. - Exclamó Lynn. - Mejor alejate de el, que ya tiene novia.
- Oye, tranquila que no me lo voy a comer... Creo
- Mejor cállate y hazme caso.
- Oye, no es para tanto. Solo estoy siendo amable con tu hermano... Al menos que ustedes estén haciendo algo prohibido, jejeje.
- ¿QUE? Sabes que, pudrete y déjame en paz.
- No te enojes, solo fue una broma jajajaja, nunca aguantas mis bromas pesadas, pero bueno. Te veo mañana.

Después de discutir con su mejor amiga, corre para alcanzar a su hermano.

- ESPERA LINCOLN, -Grito la chica Loud. - ¿Acaso estás pensando en abandonarme?
- Si se trata de quedarme contigo para quedarme con la loca de la narizona, entonces si. - Respondió el albino muy enojado.
- Tranquilo, ya me dijo y también me dijo que se disculpa por su mala actuación.
- Prefiero no preguntar el por qué.
- Mejor olvidemos ese tema y hablemos de ti. ¿Esos son las espinilleras que me regalaste en mi primer campeonato?
- Si, lo dejaste tirado en el piso de la casa y tuve la molestia de entregártelo para que no te lastimaras.
- Lo se, disculpa por no llevármelo conmigo. Prometo que no va a volver a pasar, hermanito.
- Eso espero.
- Oye, ¿Puedo pedirte un favor?
- Si, dime.

Antes de que Lynn hablara, apareció el señor calvo misterioso saludando a la chica Loud.

- Hola, - Hablo el hombre misterioso. - Oye, te vi en el partido y estuviste sensacional.
- Gracias, - Respondió Lynn pero también estaba un poco nerviosa. - Pero no doy autógrafos.

Lincoln ve al hombre misterioso sonriente y confiado. El no ve nada de malo hacia el pero voltea y ve a su hermana un poco rara cuando ve al tipo. Pensó que ella estaba nerviosa y decidió defender a su hermana sin importar que lo golpeen como hace años atrás.