Jueves 8 de Febrero
-¿¡Pero que me estás contando Victoria!? ¿Y la creíste?
-Sh, vas a despertarlos. -digo señalando a los chicos que aun siguen durmiendo.
Y es que no he podido aguantarlo mas, he acabado contandole todo lo que pasó a noche con Helen a Lisa. Se que ella no se cree nada de lo que le conté, pero yo si lo hago. Mejor dicho, Lisa sigue convencida que Helen es como su madre. Pero yo lo dudo.
Entiendo que ella estará de parte de Thomas, por muy profesor idiota que sea, es casi parte de su familia. Y por supuesto yo también estoy de su parte, pero su historia es incompleta y si, me creo a Helen.
Se como es Thomas, impulsivo, cabezota y a veces es como discutir con una pared. ¿Por que no creerme que el no quiso saber nada de ella? Ni siquiera la dejó hablar para explicarse y eso, me lo creo.
-Si Thomas se entera de que ella estuvo aquí, se volverá loco.
-Y por eso mismo no se va a enterar, de momento. Solo te lo estoy diciendo a ti Lisa, espero poder confiar.
-Claro que si, pero creo no deberías hablar con ella a sus espaldas.
-No volverá a pasar por que como te dije, ella se marchará, pero antes quiso advertirme sobre su madre. Quiere a Kylan a toda costa y es porque para ella mi bebé solo significa dinero.
Estoy tan disgustada de solo pensarlo que si tuviese ahora mismo a esa señora frente a mi no se de lo que seria capaz.
-Creo que eso si debe saberlo Thomas, el problema es que si tu se lo dices o yo, obvio empezará el interrogatorio. ¿Como vamos a averiguar nosotras algo así y el no?
-Lo se, de alguna manera tiene que saberlo, por que puede ser una buena prueba para demostrar por que ella quiere al niño de repente.
No se como voy a hacer para contarle algo así a Thomas. Aun que lo mas sencillo seria no mentir y decirle de una buena vez la verdad. Tampoco puede ser tan malo, al fin de cuentas yo no busqué a Helen.
-Hay algo mas.
-¿Algo mas?
-Si, pero antes de eso, quiero saber, ¿Que se supone que estás haciendo con Paul y Logan?
-Ah eso, Logan me pidió no decirlo, ya sabes, sigue pensando que podrá tener algo contigo en un futuro. -dice sin darle demasiada importancia.
-Lisa, ve al punto.
-Solo nos besamos Victoria, no pienses nada raro.
-¿¡Y Paul!?
-También estaba presente, se quedó mirando. -dice riendo encogiéndose de hombros. -Supongo tiene un lado fetiche.
-Los tres están locos.
-¿Y me lo dices tu? Te recuerdo querida amiga que tu estás saliendo con nuestro profesor. -dice este ultimo en un murmuro.
-Y ademas...
-¿Ademas?
...
Me escondo tras la pared de la sala y al escuchar la puerta principal abrirse me preparo para que el terremoto llamado Kylan aparezca corriendo de un lado a otro feliz de volver a casa.
Lo conozco demasiado, su rutina siempre es la misma. Llegar, correr a la sala, sacarse los zapatos para así sentarse sobre la alfombra y esperar la merienda. Vale, esa rutina se la he creado yo, ya que Thomas no le permite comer en la sala.
Al pasar a la sala Kylan no nota mi presencia y sonrío victoriosa mientras lo tomo por su espalda en el aire y comienzo a dar vueltas haciéndolo chillar.
-¡No,ayuda papi, ayuda! ¡Me atrapó un monstruo!
-¿Pero como que un monstruo pequeño travieso? -dijo deteniéndome y girando su cuerpecito entre mis brazos.
-¡Mami! ¡Es mami! -chilla feliz abrazando mi cuello con sus bracitos.
-Creo que acabas de dejar a tu mami sorda. -dice Thomas acercándose a nosotros para dejar un rapido beso sobre mis labios. -Hola nena, ya veo que hiciste buen uso de tu llave.
-Espero no te haya molestado, digo, me la diste para traer a Kylan de la guardería, pero pensé...
-Victoria, no debes darme explicaciones, sabes que puedes sentirte como en tu casa.
-Sobre eso, he estado pensando. Ya que ahora soy tu mujer y creo que eso de cara al juicio seria mas creíble...
-¿A donde quieres llegar nena? -Thomas sonríe mirándome sabiendo a la perfección lo que estoy insinuando.
-Tu sabes... pídemelo. -digo haciéndolo reír mientras mi rostro se calienta por la vergüenza.
-¿Yo? No cariño, vas a hacerlo tu por que yo te pedí se mi novia, y que te casaras conmigo, aun que fue para el juicio, debes dar tu también el paso en algo.
No debería darme vergüenza decirle esto, al fin de cuentas Thomas me ha enseñado a hablar con libertad y confianza, sobre todo con el. Mierda, debería confiarle todo y aquí estoy, ocultándole información.
Información muy importante.
-Entonces cuando obtengas la custodia nuevamente, ¿nos divorciaremos?
-Te mereces algo mas que solo firmar un papel Victoria. Por eso haremos las cosas bien, tendrás la boda que seguro soñaste y me arrodillaré para que te cases conmigo frente a nuestras familias y amigos.
Eso lo veo dificil, dudo que mis padres apoyen algo asi.
-Entonces... ¿tu ves un futuro conmigo Thomas? ¿Sin importar nuestras edades, nuestra condición de profesor y alumna?
-Mi hijo te llama mamá Victoria, ¿todavía lo dudas?
Niego varias veces con la cabeza y dejo en el suelo a Kylan que sale corriendo y como pensé, quita sus zapatos, pero esta vez va corriendo a la cocina.
Mordisqueo mi labio inferior con nerviosismo mientras me acerco a Thomas que me mira con sus cejas alzadas.
Mis brazos rodean su cuerpo y me pongo de puntillas para poder llegar a sus labios y besar estos.
Si no fuese por Kylan, ahora mismo arrastraría a Thomas a su habitación y arrancaría toda su ropa. Creo que la falta de sexo en los últimos días ha causado que mis hormonas estén mas alteradas que nunca. Mierda Thomas, me has hechos adicta a ti, eso o, al sexo contigo. Ambas.
Sin poder evitarlo río sobre sus labios al pensar eso.
-Estas graciosilla hoy eh. -dice tomando mi cintura y pegando mas nuestros cuerpos. -¿Que quieres Victoria?
-Muchas cosa señor.
-Joder, eso es jugar sucio, sabes que me encanta que me digas así.
-Por eso, puedo manipularle señor. -digo acercando mis labios a su cuello y dejando un húmedo beso sobre este antes de comenzar a mordisquearlo.
-Pide por esa boquita maldita sea, antes de que la folle y ya no puedas hablar.
-Eso es justo lo que quiero señor y ademas...
-Ademas... -dice entre jadeos mientras desciendo mi mano derecha a su entrepierna y acaricio esta por encima del pantalón.
-Vivir juntos.
-Deseo concedido. -dice tomando mi cuerpo por sorpresa entre sus brazos cargándome y río escondiendo mi rostro contra su pecho.
-¡Thomas! El niño...
-¡Kylan, vamos a la siesta!
-No serás tan cruel. -mis labios se entre abren indignada pero a la vez divertida mientras Thomas se encoge de hombros.
-Seguro está cansado, y yo, estoy ansioso por cansarme.
Algo me dice que será una larga siesta.
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¡Si señor! © +18 | Bill Skarsgård
RomanceEl amor no tiene edad. Frase que no todos los padres inculcarian a sus hijos. Hay barreras difíciles de superar y la edad, es una de ellas. Sobre todo cuando pone en duda la etica y la moral de dos personas. -"No soy el tipo de hombre que los padr...