10. Teatro

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Bob PDV:

Al día siguiente fui a hablar con Njord.

- ¡Tch! Njord. Soy Bob, ábreme. - Le dije susurrando en la puerta de su habitación.

- Voy, voy. - Me abrió la puerta en calzoncillos, como siempre.

- No levantes mucho la voz. - Me senté en la cama de Njord y él a mi lado.

- ¿Que pasa? - me preguntó Njord.

- Sé que la lesión de Iggie es una farsa.

- ¡¿Qu...?! - Le tapé la boca rápido para que no gritara.

- ¡Tio! ¡Que va en serio! - le dije en voz muy baja.

- ¿Cómo lo sabes?

- Ayer fui a ver a Iggie por la noche para ver que tal estaba y me fijé que en su mesa tenía dos botes de maquillaje para disfrazes, uno rojo y otro morado...

- ¡Como su moratón! - Me dijo Njord interrumpiéndome.

- ¡Tch! ¡No me digas! - Le hice gestos para que bajara la voz.

- ¡Hay que decirselo al entrenador! - me dijo Njord mientras se dirigía a su puerta.

- ¡No! - Salí disparado y me puse delante de Njord para que no abriese la puerta.

- ¿Como que no? - me intentó apartar pero yo estuve firme y no lo consiguió.

- ¡Házme caso! Iggie buscará otra forma de fastidiarte, incluso que te expulsen. Por si no lo sabías, es el hijo del director Downhill.

Njord PDV:

- ¿Pero que le pasa a ese chaval? ¿Que tiene contra mí? - le pregunté a Bob.

- Seguro que es por ser el capitán del equipo. - Me respondió Bob.

- ¿Qué?

- Si. Aún no tenemos capitán en el equipo. En un principio, los candidatos iban a ser Yule Hoarfrost, Iggie Loo o yo mismo.

- ¿Y por qué no la toma contigo?

- Porque yo no quiero ser capitán, y no me ve como una amenaza. - Me respondió Bob.

- ¿Y Yule? - Le pregunté.

- Iggie ya le tiene controlado. Si sale capitán renunciará y pasará a ser Iggie.

- ¡Pero si yo no pertenezco a ese grupo de candidatos! - Le dije a Bob con asombro.

- Ya. Pero desde el día que completaste la "BarreraAbsoluta" los jugadores pensaron que sería buena idea el que tú serías el capitán.

- ¡¿Yo, el capitán!? - Bob me puso su mano en la boca para hacerme callar.

- ¡Njord! A ver, ¿que parte no entiendes de "habla bajito"? - Me dijo Bob enfadado.

- Vale, si, lo siento.

- Pues eso. - Me respondió - Pero claro, al ver que tu lesionaste a Iggie, los jugadores le votarán a él por tu "supuesto accidente", mas que nada. Y porque  de uno en uno los ha ido eliminando a todos.

- ¿Y todo esto por ser el capitán? ¡No lo creo! - Le dije asombrado.

- ¡Y mucho más! Una vez habían traido al comedor unos bombones de marca buenísimos para celebrar el aniversario del instituto. Pero Iggie al enterarse, pensó: Que mejor idea que chantajear a las del comedor para que se lleve todos los bombones.

- No creo. - Le dije asombrado.

- Pues es así. Y se puso cerdo a bombones, y nosotros sin ellos. Nos dijeron que el pedido se había perdido, y encima le cayó un paquete a la empresa. - me contó Bob.

- ¿Y no le reconcome la conciencia?

- ¡Que va! Con tal de salir victorioso, lo que sea. - Bob se levantó - Bueno, yo me voy que tenemos que ir a desayunar.

- Sí, si. Espera que yo también bajo.

Bajamos a desayunar y después volvimos a subir para coger las mochilas, más tarde bajamos a clase. En clase...

- ¡Chicos! ¡Apartaos! ¡Dejadle sitio a Iggie! - Entró Iggie en muletas a clase.

- ¿Que tal? ¿Que te ha pasado? - le preguntó una chica.

- ¡Ah! ¡Nada, nada! Ha sido Njord que entró fuerte, y bueno... esto jajaja. - Rió falsamente.

- No pasa nada, te cuidaremos hasta que te mejores. - Dijo la misma chica.

Claro, ahora Njord es el malo de la película, el que entra fuerte y lesiona a todo el que ve a su paso. ¿Y todo esto, por ser capitán? Creo que voy a tener que andarme con ojo con Iggie. 

Pasaron tres días, desde lo del "accidente" con Iggie, hoy le iban a quitar la venda y quería estar presente. Estaban a punto de quitarle la venda y allí estabamos Bob, el entrenador Froste y yo.

- No hacía falta que vinierais. - Nos dijo Iggie.

- No pasa nada, es lo menos que puedo hacer, después de lo que hice. - Le dije yo. Pero más que nada quería estar para ver el moratón. ¿Como se lo habrá quitado, si tenía la venda puesta?

A Iggie no se le veía para nada nervioso, parecía que lo tenía todo bajo control. Le quitaron la venda y en la zona donde tenía el moratón, solo tenía una marca roja como lo que sería el golpe. Parece ser que la enfermera también ha sido manipulada por Iggie.

- A ver, ¿así te duele? - la enfermera dobló la pierna de Iggie y hizo varias maniobras más para verificar que estaba recuperado - vale, está todo bien, ya puedes irte.

- Gracias enfermera. - dijo Iggie.

Bob, el entrenador y yo salimos antes que él. Le djimos al entrenador que viniera con nosotros para explicarle algo.

- Entrenador, tenemos algo que contarle. - Le dijimos mientras nos alejabamos de la enfermería.

- ¿Qué pasa? - nos dijo preocupado.

- Sabemos que la lesión de Iggie es una farsa. - le dijo Bob, el entrenador no dió reacción alguna.

- Vale ¿y? - Nosotros nos quedamos alucinados.

- ¡¿Cómo que "y"?! ¡Iggie nos está engañando a todos, entrenador! - le dije yo, el entrenador Froste se fué bajando la cabeza, pero ví que de sus ojos salió una lagrima - ¡es que no me lo creo!

Fuí enfadado a mi habitación ¿como podían permitir que Iggie les manejara así? ¡Es increíble! Cogí la mochila y la lanzé con todas mis fuerzas contra el escritorio. *Toc, toc* Alguien tocó la puerta. Fuí hasta la puerta y la abrí, era Bob de nuevo.

- Njord, tenemos que hablar. - Yo me quedé sorprendido al ver la cara que Bob,  se notaba que era algo importante. Entró y cerró la puerta tras de sí.

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¡Uy! ¡Uy! ¡Uy! Este Iggie no se cansa de fastidiar a los demás, e? Que le dirá Bob a Njord? Será tan importante? Lo descubriremos en el próximo capítulo de mañana!

Aaaaaaaaaaaaagur!

~Icenazuma~

Una Fría AventuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora