El sєcrєtσ dє Nuєstrαs Épσcαs [Iηυγαshα γ Καgσmε]

[Cαρíтυℓσ 3]

Capítulo 3: La antigua joya del sengoku
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-Estoy bien Inuyasha, bájame por favor- pide pero el peliplateado se niega sabiendo que la herida de la joven es bastante profunda- entiende, hay miles de youkai por todas partes y...

-Tus heridas pueden empeorar ¿Qué no te das cuenta?- frunce el ceño brincando de edificio en edificio.

-Pero Inuyasha...- suelta un gemido de dolor y termina por perder el conocimiento.

-¿Aome?- la mueve pero ella no contesta- reciste un poco más.

A lo lejos vio el hospital más cercano de su casa, recordó que no traía puesto su gorra así que inmediatamente se cubrió sus orejas con la capucha de su chompa antes de entrar a toda prisa con la azabache en sus brazos.

Rápidamente se la llevaron las enfermeras en la camilla. Inuyasha se quedó esperando afuera y no podía evitar dar vueltas por todo el pasillo con preocupación. Si esa chica no sobrevivía ¿Quién carajos le explicará lo que pasó recientemente? Nadie más le creería si lo contaba y aunque para él era una imposibilidad lo que vio, ahora que lo pensaba mejor no resultaba tan loco como pensó. De todas formas él mismo tiene ciertas características inusuales que cualquier otro ser humano normal no tendría ¿Acaso todo está relacionado? ¿Abrá alguna cura?

~o~

Abrió los ojos lentamente, todo su abdomen le dolía. Por lo visto ya es de día, miró a su lado izquierdo y se llevó un susto al ver a Inuyasha sentado en una silla mirándole seriamente. Entonces recordó lo ocurrido ayer y comenzó a buscar entre sus ropas la Shikon no Tama pero para su sorpresa ¡No estaba!

-¿Buscabas ésto?- pregunta el peliplateado mostrándole la joya púrpura en sus manos.

-Si...- toma la perla verificando que esté intacta.- disculpa ¿Qué lugar es éste?

-Es un hospital ¿No es obvio?- da un suspiro preparándose para comenzar con su interrogatorio- bien, esperé toda la noche y será mejor que me expliques en éste instante que fue lo que vi anoche.

-Esta bien, aún así me sorprende que no lo sepas. Lo que viste anoche es un youkai ciempiés, hay youkai de todo tipo y el que viste anoche es uno de los tantos que hay por los alrededores- explica.

-Lo que quieres decirme es que ¿Los youkai son reales?- preguntó y ella asiente.

-Esas criaturas van en búsqueda de la Shikon no Tama para así poder pedirle un deseo o aumentar sus poderes demoníacos- concluye.

-¿Pedir un... Deseo? ¿Es posible eso?- abre los ojos como platos posicionando su mirada nuevamente en la perla pero en interior él se negaba a creer que algo así fuera posible.

-Así es, aunque no lo creas ésta joya es capaz de conceder cualquier clase de deseo- añade.

Inuyasha frunce el ceño.