Capítulo 25: Otro cuervo de la muerte.
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.Llegó al templo utilizando su velocidad sobrenatural y por lo visto nadie se percató de su presencia, así que avanzó de inmediato hacia el sitio donde se ubica el pozo devora huesos. Frunció un poco el ceño y por fin se decidió a saltar, no quedaba de otra, ya después podría reclamarle a la miko.
De un solo salto llegó hasta la superficie, miró a su alrededor y cayó en cuenta de que ya estaba anocheciendo, se aproximó rápidamente a esa aldea, recibiendo en el camino las miradas curiosas de los aldeanos que andaban cerca. Reconoció una de esas cabañas y entró sin siquiera anunciarse, quedando frente a frente con una mujer mayor y un grupo de chicas angustiadas.
-Pero si eres tú ¿Vienes a ver a Kagome, verdad?- cuestiona la miko de edad avanzada, mirándole un tanto sorprendida por su repentina aparición ya que había pasado mucho tiempo desde la última vez que lo vio.
-¡Chicas, miren, es el novio de Kagome!- exclama una de las tres adolescentes que lo observaban con atención.
-¿Qué yo qué?- abre los ojos como platos, pero decidió dejar ese asunto para después, aunque no tenía idea de cómo se había creado ese rumor.- en fin ¿Dónde está ella?
-Salió hace varias horas, pero aún no regresa. Me preocupa que algún ser de ésta era, que ande en búsqueda de los fragmentos, la haya capturado- respondió Kaede.
<<Argh, esa niña tonta...>> pensó, saliendo del sitio sin decir nada más y siguió el trayecto que indicaba el aroma de la chica del sengoku, el cual estaba mezclado con el de otros humanos.
~o~
Solo árboles rodeaban aquella vivienda en mal estado y los rayos de luna iluminaban el sitio, junto con las lámparas de aceite de cada miembro de la pandilla que la secuestró. Ahí la azabache se encuentra tumbada en el piso de madera, atada de las muñecas, siendo observada detenidamente por los bandidos.
-Oh, una miko ¡Fantástico!- comentó un hombre corpulento y su cabeza calva estaba repleta de vendas, aproximándose para intentar tocarla. La chica frunce el ceño y se levanta con rapidez.
-¡¿Qué les pasa, atrevidos!?- reclamó con molestia.
-Jovencita ¿No quieres ser mi esposa?- pregunta indecentemente otro de ellos, con una sonrisa pervertida.
-Entrégame la Shikon no Tama- pronunció el más amenazante de todos ellos, un sujeto de piel pálida, bastante alto y musculoso, además de calvo. El hombre se pone de pie y se acerca peligrosamente a los demás, desenvainando su espada.
Sus secuaces, al notar sus intenciones, la sujetan de los brazos con fuerza para evitar que huyera. Kagome sintió un escalofrío recorrer todo su cuerpo, más que nada al percatarse de que ese hombre no tenía llama de vida alguna, ya estaba muerto.
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El sєcrєtσ dє Nuєstrαs Épσcαs [Iηυγαshα γ Καgσmε]
Fanfic¿Qué pasaría si Inuyasha y Kagome cambiaran de épocas? ¿Qué sucedería si los personajes de la era antigua estuvieran en la actual y viceversa? ¿Qué pasaría si todo ocurriera al revés? InuYasha Himura es un estudiante de tercero de secundaria, siem...