¿Qué pasaría si Inuyasha y Kagome cambiaran de épocas?
¿Qué sucedería si los personajes de la era antigua estuvieran en la actual y viceversa?
¿Qué pasaría si todo ocurriera al revés?
InuYasha Himura es un estudiante de tercero de secundaria, siem...
Capítulo 14: La tumba de Inu No Taisho . . . . . . . .
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Justo cuando pensó que ya no habría forma de salvarlo, se percató de algo peculiar, sobre la superficie del río se reflejaba una imagen en especial de Inuyasha de niño, durmiendo en los brazos de la mujer del limbo con la apariencia de Izayoi.
-Ese es el hechizo- concluyó la miko para después saltar al río y con su arco movió las aguas, borrando esa imagen de ahí.
Solo fue cuestión de segundos para Inuyasha fuera liberado, saliendo del cuerpo de la mujer del limbo que lo tenía prisionero. El conjuro se había roto justo a tiempo.
<<Todo eso fue... Una maldita mentira>> piensa el hanyou.
-Nunca pensé que la tumba estaría en un lugar así, que inesperado- y sin darle tiempo a reaccionar Sesshomaru lo toma fuertemente del cuello- después de quinientos años, el secreto por fin es revelado.
-¿Qué tipo de locuras estás diciendo bastardo...?- cuestiona Inuyasha pero no termina la pregunta, ya que repentinamente su medio hermano introduce sus dedos en su ojo derecho y así arrancándole una curiosa joya de color negro.
-¡Inuyasha!- exclama la azabache, mirando con horror la escena y no dudó en sacar su arco para apuntarle con el mismo al daiyoukai- ¡Suéltalo ahora!
Sesshomaru arroja bruscamente al hanyou al suelo, tras ésto saca su látigo con la intención de atacarlos a ambos, Kagome no lo pensó dos veces y se paró frente al peliplateado, dispuesta a defenderlo del ataque. Pero se llevó una gran sorpresa cuando la mujer del limbo apareció de la nada, recibiendo todo el ataque.
-Mi hijo...- fueron las últimas palabras de la mujer sin rostro, antes de que el frío daiyoukai pisara sin piedad su cabeza, a penas trozos de ella quedaron.
-Eres un maldito asesino- acusa Kagome con evidente furia.
-No lo haga enojar o nos matará a todos- la detiene Mioga, quién a simple vista parecía a punto a de querer escapar.
Ignorándola por completo, el hermano mayor deposita la perla negra en el piso, su sirviente le entregó el báculo de dos cabezas y tras tocar esa diminuta joya con aquel báculo, un portal se abre a sus espaldas. Sesshomaru ingresó al sitio siendo seguido por Jaken.
Inuyasha a duras penas podía ver con su ojo derecho, el cual hace poco había dejado de sangrar. Estaba verdaderamente furioso, no podía creer que a penas conocía a su medio hermano y ya era atacado sin piedad por él, usando una bruja con la apariencia de su difunta madre biológica. Ésto jamás se lo perdonaría.
-¡Inuyasha-sama, vaya detrás de ellos antes de que se cierre el portal! Sesshomaru va a llevarse todos los tesoros de su padre solo para él- advierte la pulga.