El sєcrєtσ dє Nuєstrαs Épσcαs [Iηυγαshα γ Καgσmε]

[Cαρíтυℓσ 12]

Capítulo 12: El haori de las ratas de fuego y Tessaiga.
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-Entonces... ¿Quieres decir que mis padres están muertos?- interroga ya sabiendo la respuesta- debo encontrar al tal Takemaru.

Y obviamente sabía a dónde ir primero para localizar a ese sujeto, en el sengoku jidai. Definitivamente no podía dejar las cosas así como así, debía hacerlo pagar y usaría todos los medio posibles para llegar hasta él.

-Espere Inuyasha-sama, aún no he terminado- lo detiene Mioga- han pasado ya quinientos años y ahora... Su medio hermano llamado Sesshomaru, está en búsqueda de la espada del amo Inu No Taisho.

-¿Inuyasha tiene un medio hermano?- pregunta la azabache impactada.

-¿Tengo un medio hermano?- cuestiona con los ojos bien abiertos.

La vieja pulga asiente.

-Sesshomaru es su hermano mayor y al enterarse de su existencia, Inuyasha-sama, ha reanudado su búsqueda de la leyendaria espada Tessaiga- informa- y para eso, él tiene planeado encontrar la tumba de Inu No Taisho-sama.

-¿Y yo que tengo que ver con eso?- alza la ceja.

-Su padre me dió órdenes específicas de que por ningún motivo esa espada puede caer en manos de Sesshomaru y con mucha razón, él odia a los humanos.- hace una pausa- y además estoy seguro, de que esa arma le pertenece Inuyasha-sama. Su deber es ir a reclamarla.

-¿Tienes idea de la cantidad cementerios y tumbas que hay en Tokyo?- objeta el peliplateado.

-Tal vez sea una tumba en específico, una diferente a las demás- opina la azabache.

-Estoy consciente de ello y por suerte se de alguien que nos puede ayudar con ésto. Amo Inuyasha ¿No le gustaría hacerle una visita al sujeto que lo dejó en la puerta de ésta casa años atrás?

~o~

En medio de un pasillo oscuro cierta chica de cabello castaño, quién usa un traje similar al de los ninjas, se encaminaba a la oficina de en fondo. Tiene a penas diecisiete años y ya es toda una experta en técnicas específicas de combate, manejo de espadas o armas de cualquier tipo y sobretodo, es una de las mejores en todo Tokyo exterminando youkai.

-¿Me llamaste?- pregunta fríamente.

-Si, tengo un último trabajo para ti Sango- sonríe con malicia, entregándole una foto de alguien- él será tú próximo objetivo, usa todos los métodos que necesites para sacarlo del camino. Si lo haces... Tal vez considere dejar a tu pequeño hermano en libertad ¿Qué te parece?

La joven agacha la cabeza.

-Haré lo que me ordenas... Naraku- es lo último que dice antes de guardar la fotografía en su bolsillo y así salir del sitio con una estrategia entre manos.