39

714 81 73
                                    

JungKook resaltaba algunos títulos en su libro, lucia concentrado y con el ceño levemente fruncido. Estaba poniendo todo de su parte para el examen de admisión, aunque su hermana le había dicho que no se esforzara demasiado o terminaría desmayado en plena clase, y JungKook prefería ahorrarse esa pequeña vergüenza.

Se recostó en el espaldar de su silla y estiró sus brazos, checó la hora y llevaba dos horas y media leyendo sin parar, le ardían los ojos, tal vez sería bueno ir al oftalmólogo para unos lentes de lectura.

Su estómago rugió por comida e hizo un puchero involuntario. Se levantó perezoso y caminó en dirección a la habitación de su hermana. Llamó, y a los pocos segundos Soyeon abrió la puerta.

—Noona tengo hambre, ¿Podrías prepararme algo de comer, por favor?

Soyeon no pudo evitar soltar una pequeña risa y luego pellizcar su mejilla derecha.

—Niño tonto. Vamos.

Soyeon fue a la cocina y sacó ingredientes para preparar la cena. JungKook la esperaba sentado en el comedor cercano mientras jugaba a Piano tiles.

—Brochetas de cordero para el mejor hermano del mundo~

—¡Por eso te amo! – alegó JungKook sosteniendo su tenedor con fuerza.

Soyeon se sentó en su frente observando como su hermano comía con ganas.

—JungKook, está bien que te esfuerces para alcanzar una buena puntuación para el examen, pero no solo debes comer cuando tu estómago te lo dice. Hay horarios de desayuno, almuerzo y cena, por no decir que también hay meriendas.

—Lo sé, es solo que cuando me enfoco en algo, lo hago en un 100%.

—Lo estás haciendo bien, así que tómalo con calma.

—Están deliciosas. ¿También le preparas brochetas de cordero a NamJoon?

—No. Es mi receta especial solo para mi hermanito.

—Beneficios de ser el menor – hizo un sonidito de satisfacción.

—Y cómo te fue la última vez que fuiste al psicólogo.

—Uh, bien. Jinki-sshi me dice que he mejorado progresivamente. Ha cambiado mucho mi percepción con las mujeres y me ha recomendado en lo posible no tener pareja hasta que cumpla la mayoría de edad – bufó – Algo difícil, pero no imposible. Y a mí me gustan los retos. Si.

Soyeon sonrió convencida.

—Debe ser difícil para ti que siempre has tenido atención. ¿Es por eso que te alejaste de Yuju-sshi?

JungKook negó.

—No nos hemos alejado. Ella entendió que tenía que prepararme para el examen y con ella alrededor era una potencial distracción, además con lo que me recomendó mi doctor, no tendría sentido tenerla cerca. A veces nos escribimos, más que nada por el asunto legal.

—Oh, cierto. ¿Cómo van las cosas con su entrenador?

—Perfectamente – sonrió autosuficiente —El abogado de la familia está haciendo su mejor esfuerzo por demostrar a las autoridades los abusos e irregularidades que se cometió en esos cuatro años que fue su entrenador. Si todo marcha perfectamente, dentro de unos meses Yuju noona será libre por fin.

—Me alegra que ella esté haciendo lo correcto. Pero fue gracias a ti que la convenciste en demandar a ese hombre.

—Si – suspiró —No podía quedarme tranquilo luego de todo lo que me contó. Odio los abusos e injusticias.

Seúl Master School [Yoonnie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora