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El cielo oscuro en pleno día, las aves que sobrevolaban la zona cayendo muertas al suelo... Todo era un mal presagio de que el Tenebroso estaba por llegar a Zenithia y acabar con todo.

Aunque ese no era la idea que Seungyoun tenía para él.
No, acabaría con su vida para robarle todo su poder y convertirse en el ser más poderoso de todas las dimensiones. No entraba dentro de sus planes convertirse en el segundón de nadie. O era el primero, o nada.

Y sabía perfectamente cómo conseguirlo.

Con todos los habitantes de Zenithia bajo sus pies y sus órdenes, lo conseguiría sin problema alguno.

─ ¡Fuerzas de la oscuridad, espíritus de la noche, absorban el alma de estos infelices con el fin de canalizarla y aumentar el poder del mal!

Cientos de miles de pequeños seres verdosos surgieron del centro de una enorme borrasca poco normal. Estos demonios absorbieron el alma de los vivos, haciendo que el poder de Seungyoun aumentase cada vez más y más.

─ ¡Cuánto más aumentes tu poder, más gordo te vas a hacer, subnormal!

Aquel magnífico espectáculo para él, se vio interrumpido por esa chillona voz que conocía muy bien y no oía desde hacía eones. Se giró hacia allí, logrando ver a todos los dioses juntos de nuevo, y además con Junho. No entendía cómo había pasado eso, juraba que los mató absolutamente a todos, pero ahí estaban, listos para atacarle.

─ Yena, ¿por qué siempre tienes que gritar y quitarle la seriedad al asunto? ─preguntó Minhyun intentando parecer serio en aquella situación, aunque se le dificultaba por culpa de la diosa.

─ Ay, pues mira, ni idea...

─ Seungyoun, ríndete ─habló Junho, dejando a un lado la conversación que habían comenzado los dioses aparte.

─ Jamás.

Pronto, una gigantesca sombra negra a las espaldas de Seungyoun surgió de la nada. Aquel ente comenzó a caminar y a cada paso que daba, el suelo temblaba y crujía, provocando una sensación de que se iba a agrietar en cualquier momento. La figura de ese ser se iba haciendo más nítida a medida que avanzaba hasta dejar claro quién era. El Tenebroso había despertado de su letargo.

Aquel horripilante ser era como una de las pesadillas que solía crear Seungyoun, pero mucho más grande y tétrico, y como no, mucho más poderoso.

Junho se quedó paralizado al verlo. Nunca había presenciado nada igual en su vida.
¿En serio iban a poder contra él, contra Seungyoun y su ejército?

Ellos solo eran ocho y sus enemigos, más de mil.

El Tenebroso, de la nada, soltó un alarido desgarrador del que salieron cientos de voces clamando ayuda, un sonido verdaderamente terrorífico que parecía haber salido del mismísimo infierno.

Aquel grito hizo que todo se tambalease y cayesen desde lo alto al suelo. Los dioses elementales no tenían su poder al completo, ya que una parte la tenían los espíritus y los otros tres tampoco eran de gran ayuda tras años de paz sin luchar.

En cuanto al dragón, sentía que sus fuerzas se debilitaban en presencia de aquel horrible ser. Lo último que logró ver antes de cerrar los ojos y que le quitasen de la misma forma su alma, fue a todo el mundo tendido en el suelo sin vida, a Seungyoun riendo por su victoria y al Tenebroso a punto de comenzar su reinado de oscuridad sobre Zenithia.


























parece que ha acabado ya, pero aún falta, os lo digo en serio. y sí, seungyoun ha matado al resto de personajes. 😎🤟🏻

⌗ TALES OF WIND ♡̷̷%՞˖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora