Segunda prueba

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Fernanda.
Ya pasó una semana desde la ultima prueba y Alexis no me ha dirigido la palabra en lo más mínimo, solamente me entrego unas hojas con la información necesaria, lo hizo casi sin mirarme, si cree que le rogare está equivocado, yo no fui la que actuó mal ¿o si?.

Estoy enfrente de lo que parece ser un parque súper grande más bien es la entrada del bosque del zorro, creo que el por qué le dicen así está de más, me acaban de dar una mochila con comida para tres días, agua y una cuerda. También llevó un traje que parece de hombre, es un pantalón algo pegado color café con un cinto, llevo una camisa color azul, cada participante lleva una de diferente color supongo que para distinguirnos. Me tome la libertad de tomar mi cabello en una coleta y como parece ser que no hay ligas tuve que tomar un listón blanco, me sorprende que aún agarrado el cabello me llega bastante largo.
-Yo seré el que los instruirá en esta sección, candidatos por favor presten atención, la misión consta de llegar al otro lado del bosque en menos de 3 días, durante ese tiempo muchos problemas se les presentarán en el camino como saben este es el cuarto bosque más peligroso del reino así que tengan cuidado, esta de más decir que una vez dentro no habrá retorno hasta que los 10 primeros participantes salgan, en todo caso lo mejor es que se queden en un solo lugar y sobrevivan hasta que acabe la prueba y lleguen los rescatistas. Comienza en 10 minutos.
No sé si sea algo de este reino o por qué toda la gente tiene la manía de hablar tan cortante o macabra. Me siento en un árbol caído que está cercas, trato de relajarme lo más que pueda antes de pasar tres días sin que algo intente matarme.
-No estás nerviosa.
-Creí que no me hablarías más señor.
-No tienes que decirme señor.
-Prefiero que mantengamos la distancia.
-Si es lo que tú quieres...
miro que Cesar pasa enfrente de nosotros, recordé que tengo que preguntarle algo.
-Oye tu espera César.
El se detiene y me levanto dejando atrás a Alexis.
-Que es lo que quiere mi mascota.
-Solo...quiero pedirte un favor, sé que no nos conocemos ni nada es más estás en tu derecho de recharzar el favor y pues no es obligación y yo...
-Basta, me mareas, que es lo que quieres.
-Si muero, puedes hacer que lleven rosas blancas? Es que en serio me encantan.
Por un momento su cara fue de sorpresa y luego solo empezó a reír a carcajadas.
-Oye basta te lo digo en serio...
-Ahhh lo siento, es solo que eres tan estupida jajajaja
-OYEEE
-Tranquila, si veo que no llegas entre los primeros diez seré el primero en ir a buscarte, de acuerdo?.... pero si te encuentro muerta entonces le daré el mensaje a tus padres.
Mostró una sonrisa burlona, yo lo decía en serio. Los diez minutos ya habían pasado y el mismo señor que nos dio las instrucciones nos hizo la indicación para que empezáramos.
-Bien supongo que ya tengo que ir al matadero...
-Espera... toma esto, es mío y solo es prestado así que tienes que regresarme lo me escuchaste, no te lo perdonaré si lo pierdes así que regresa con el.
Me da la piedra que tenía cuando pasó el primer filtro.
- Esto como funciona...
-  Lo descubrirás en el camino, ahora ve...
me da vuelta y una palmada en la espalda para que camine, supongo que algo tan valioso tengo que cuidarlo así que lo hecho en la mochila.

Ya han pasado 10 minutos desde que entramos al bosque, la verdad esto muy desconcertada.  los rayos del sol queman la piel aunque hay árboles estos no dejan de llegar. En cuento comenzó todo, se crearon pequeñas alianzas, no sabía que entre todos se conocían, la verdad yo no, así que mejor me fui por mi cuenta sola...

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