Liv, Schlesinger IV

Capítulo Veintinueve

La noche ha sido más de lo que podría haber pensado que sería. Mis amigos y familia la han pasado excelente, Axel me sorprendió con un concierto personal y la pila de regalos parece no querer bajar. Algunas de las chicas de la escuela parecen muy emocionadas con el hecho de Axel estando aquí, imagino que ya sabían sobre nosotros pero, ¿a quién engaño? Ser fanático de Axel es algo bastante serio para ellas. No sé con exactitud cuántos autógrafos ha firmado y en cuantas selfies ha salido, pero no se ha apartado de mi lado en toda la noche, lo cual agradezco bastante.

—Tus amigos de la escuela parecen agradables —dice mirándome de reojo. Estamos sentados en unos sofás que hay a los lados de la pista frente al escenario, hay muchas personas bailando, algunas están en sus mesas comiendo y nosotros solo estamos aquí disfrutando del hecho de estar uno junto al otro.

—No son realmente mis amigos, es decir, fuimos juntos compañeros desde preescolar, pero nunca los considere mis amigas, como a Asher o Gia.

— ¿Ella no vino? ¿Gia? —Inquiere, y yo solo niego levemente con mi cabeza —Lo siento mucho, Liv. Aún no puedo creer que te hiciera eso, me refiero a que Asher también fue un idiota pero al menos quiso arreglar las cosas y ahora, aunque me cueste creerlo, debo admitir que me agrada un poco.

—Eso es lindo —escuchamos la voz de Asher a un lado y ambos nos volteamos hacia mi mejor amigo quien se ve algo cansado —. A mí también me agrada, su majestad.

— ¿Su majes...? —pregunta Axel mirándolo tomar asiento junto a nosotros.

—No preguntes —lo corto evitando lo que sería una explicación demasiado tonta — ¿Ya te aburriste de tus súbditos? —le pregunto a Asher y el tira su cabeza hacia atrás suspirando.

—Puede que ya no estemos en la escuela, pero una vez el rey, lo sigues siendo siempre —dice riendo en broma —. Todos parecen bastante satisfechos con lo que hacen, incluso Ashley, aunque no lo creas.

— ¿Quién es Ashley? —pregunta Axel mirándonos algo confundido.

—Es la que esta vestida con el traje gris roto, es una chica algo... complicada —digo y Asher ríe sonoramente.

— ¿Complicada? Esa chica es pariente del mismísimo Lucifer.

—Si no les agrada, ¿por qué está aquí? —dice Axel aun sin comprender.

—Es la caridad de Shawn —suelta Asher riendo levemente, pero se queda callado cuando ve mi mirada seria —. Lo siento, sabes que me encanta molestarla.

—No es agradable que digas esas cosas de ella no tienes idea de cómo ha sido su vida, además no es la caridad de nadie, Ashley perfectamente podría iniciar una revolución nacional sin problema alguno ella sola.

—Sigo un poco perdido —dice Axel y Asher mueve sus manos intentando encontrar las palabras para darse a entender.

—Ashley Richards es... como te digo, una de esas chicas inteligentes y lindas, pero sumamente peligrosas a un nivel cósmico. Entro a la escuela en primer año, le dieron una beca por ser una potencial amenaza.

—No seas idiota —digo y Axel medio sonríe ante mis palabras —. La escuela le dio una beca porque inicio una campaña de activismo estando en primaria, siempre ha sido muy buena dándose a entender, y su nivel de persuasión es realmente increíble. Te convencería de comerte una araña sin problema.

—Entonces, ¿la molestaban porque era becada, o porque los intimidaba? —suelta Axel dejando fuera de base a Asher completamente.

—Richards no me intimida, podrá tener esa fachada de chica indestructible, pero todos sabemos que es una pequeña florecilla por dentro. No tengo idea de qué es lo que hizo para lograr atrapar a Shawn, aunque es bastante graciosa la historia de la primera vez que la llevó a su casa, hubiese dado lo que fuese por ver eso en vivo. Creo que ni siquiera sabía la forma de tomar los tenedores de la mesa.