Liv, Schlesinger IV

Capítulo Cincuenta

Vivir con Asher resultó ser mejor de lo que esperaba, me parece increíble lo bien que se lleva con Lauren, incluso ella misma lo dijo "De saber que eras así en la secundaria, no te hubiese detestado todos estos años" creo que eso fue lo que Ash necesitaba para entender lo genial que realmente es. Ven películas juntos, les gustan las mismas series, y aunque difieren en gustos musicales, sus debates diarios resultan ser divertidos. Tenemos ya tres semanas viviendo juntos. El año escolar esta a punto de terminar y con ello mi pasantía.

Hoy es mi último día en el estudio y, aunque no espero que me contraten de manera permanente, honestamente agradezco todo lo que he aprendido en el último semestre.

Ash esta cada día mas cerca de ver el primer modelo de su línea de autos y está sumamente emocionado. La primera línea será de cuatro modelos uno deportivo, dos SUV y un sedan. Hace unos días Lauren y yo le ayudamos a elegir los detalles internos, el cuero para los asientos y algunos colores. El SUV negro es mi favorito, y siento que es el que mas empeño le ha puesto por ser el primer diseño que hizo.

Jenna Michaels y Arthur Martens son los dos grandes nombres que se escuchan en todo el estudio. Me siento muy contenta de estar participando en el debut de ambos, ha sido una experiencia única el trabajar a su lado y aun mas que me permitieran formar parte del equipo de escritura. Es increíble saber que mi nombre estará en el registro de varias de sus letras.

—Olivia, Nora quiere verte en el estudio cuanto antes —me informa Anna, la chica de recepción, en el momento en que entro y la saludo.

—Claro, ya subo —le informo en lo que me encamino al elevador hasta el piso once.

Me he familiarizado tanto con estas paredes que me resulta algo doloroso el tener que dejar de verlas a partir de mañana.

Dentro del estudio puedo ver a Nora hablar entretenida con un hombre algo mayor que nunca había visto antes, y con Arthur.

Cuando entro, todos se mantienen en silencio y Nora me observa con una sonrisa enorme en su rostro.

— ¡Liv! Que bueno que llegas, mira, te presento a Preston Collins, el director general del Estudio Americano de Música.

¡Dios mío, es el gran, gran, gran jefe!

—Hola, un placer conocerlo —le estrecho la mano y él la toma con una sonrisa en su rostro.

—El placer es todo mío, he escuchado grandes cosas de ti, Liv. Verás me gusta ser una figura presente alrededor de mis empleados, y honestamente el programa de pasantías universitarias que ofrecemos es un proyecto que me encanta por diversas razones, así que me gusta venir siempre el último día a conocerlos personalmente, que me cuenten su experiencia personal.

—Bueno de mi parte todo ha sido un sueño hecho realidad, he aprendido muchísimo con Nora.

—Me alegra escuchar eso, también quería hablar contigo sobre algo en particular, imagino que has odio algún rumor de que contrataremos a varios de los internos —yo asiento esperando la noticia que quiero escuchar —, bueno, aunque efectivamente solemos contratar a uno que otro interno como pasó con Nora por ejemplo cuando ella hizo su pasantía aquí hace no mucho, la verdad es que no planeamos contratar a nadie este año —y ahí van todas mis esperanzas de quedarme... —, pero contigo quería decirte algo importante.

— ¿Hay algún problema? —pregunto ahora si algo inquieta, si no van a contratarme, ¿entonces he hecho algo malo?

—No, para nada. Al contrario, quería decirte que no contrataremos a ningún interno este año, pero quiero que sepas que en el momento en que tengas su diploma en la mano, me llames, y tendrás un lugar aquí con nosotros.