Maratón 6/6
No dudé y contesté casi al último tono. La mirada intensa de los presentes no ayudaba a controlar mi nerviosísmo. Ya podía sentir mi aroma frutal inundar la habitación por completo.
____: ¿Hola?
Mamá: ¡Finalmente respondes! ¡¿Tienes idea de hace cuánto que debiste haber llegado a casa?!
Se supone que debía estar en casa antes de las diez, y ya casi es la una de la mañana...
____: Mamá, puedo explicar.. -Me interrumpió antes de poder terminar de hablar.
Mamá: ¿Estás bien, bebita? ¿Dónde estás? Llamaré al hermano de Jaqui para pedirle que te vaya a buscar.
____: Mamá, estoy bien, tuve un pequeño percance saliendo de la cafetería y estoy en casa de... Una amiga. Mañana te cuento qué pasó, pero estoy bien, Má. Te amo, en un rato más pediré que me lleve al departamento.
Mamá sólo suspiró y puedo adivinar a que ahora se está mordiendo la uña de su dedo índice.
Es curioso como cada uno de nosotros interpreta la angustia y nerviosísmo; cuando mamá está preocupada tiende a morder sus uñas hasta lastimarse, papá aprieta el puente de su nariz y peina sus cejas, yo me revuelvo en donde sea que esté sentada y muerdo mis labios hasta aveces lastimarlos. Y aunque he tratado de dejar de hacerlo simplemente no puedo. Es muy difícil quitarse una costumbre de encima cuando la has practicado mucho tiempo a lo largo de tu vida.
Es parecido a alguien que ha usado durante tres años brackets, ya no los tiene y aún así no se atreve a morder una manzana.
Mamá: Por la Luna... Mañana hablaremos, yo también te amo, bebita. Recuerda llamar cuando llegues a casa.
____: De acuerdo. -Y colgué.
Me dí vuelta y ahí noté que los cuatro habían estado atentos a mi llamada. Y aunque estoy segura de que no entendieron nada recordé de golpé cómo había sonado mi teléfono.
Luna, qué vergüenza.
NJ: Disculpe, ____. Sé que debe ser muy extraña toda esta situación, pero me gustaría saber su edad.
De repente mi sangre se heló, la diferencia de edad es algo notoria, yo aún no soy mayor de edad, solamente soy una estudiante que ni siquiera sabe qué iba a hacer con su vida terminando la preparatoria.
Por fuera trato de aparentar solo mostrar sorpresa y algo de nerviosísmo, pero la realidad es una completamente distinta.
Si no fuera por el tranquilizador aroma de JungKook (¡por la luna qué bien se siente llamarlo así teniéndolo en frente!) sería demasiado notorio que me muero de la emoción de tener a mis mayores ídolos en la misma habitación, que estoy entablando una conversación específicamente sobre mi mate y yo con ellos. Si fuera por mí estaría gritando como loca y agradeciendo a la Luna por esta magnífica y única oportunidad que me estaba brindando.
Pero ya habrá tiempo para fangirlear como es debido.
____: D-diecisiete años... -salió de mis labios más como una duda que una afirmación. Rápidamente me aclaré la garganta y levanté un poco más el rostro, decidida a mirarlos frente a frente y no dejarme intimidar por estar rodeada de únicamente alfas.- Tengo diecisiete años.
Aunque el poco valor que había tomado de quien sabe dónde se esfumó cuando los ojos color miel del de delicioso aroma me miraron fijos y sonrió. Joder, su preciosa sonrisa derrite corazones me la estaba dedicando a mí. A mí.
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¡Auxilio! ¡Soy la omega de JungKook! (JungKook & tú)
Fiksi PenggemarLa madre luna nos eligió por algo. ____: Oh dios, ¿esto va en serio?. Quien diría que en tu primer asistencia al concierto de tu grupo favorito terminarías encontrando a tu destinado. Tratándose ni más ni menos que del Golden Maknae de BTS. Jeon Jun...